Amor en partes iguales

Capítulo 42: El vestido

-¡Ash! ¡No!-grite arrancando la hoja de mi cuaderno, arrugándola y tirándola al suelo, es como la quinta hoja que arrugó en diez minutos.

-Jade estas empezando a impacientarme-dice Stuart quien en verdad suena como si lo estuvieran sacando de quicio.

-Lo siento, solo que no me sale el maldito discurso-dije tirando el cuaderno a la otra esquina del sofá.

Llevo tres días completos tratando de hacer el discurso, solo quedan cinco días para irnos de viaje y esto en verdad me está agobiando. Mi madre me dice que ya llegara la inspiración, y mi padre dice que lo improvise. No sé a quién hacerle caso, pero en este momento va ganando mi padre.

Dejando eso de lado hoy nos encontramos Stuart, mi madre y yo en su compañía para que elija uno de los vestidos de novia que ella creo, pero por los momentos ninguno le gusta y estoy creyendo que dentro de unos minutos me tocará darle una charla inspiradora.

Con respecto a Nataly, todavía no hablo con ella ni por teléfono ni en la escuela, en verdad cuando la veo se me amarga el día es algo impresionante. En verdad nunca creí que esto llegaría a suceder. Me siento como en un pozo con este tema, en el cual no tengo escapatoria a menos de que trepe el pozo sin caerme en ningún momento y pueda salir victoriosa, pero sé que eso no sucederá.

-¡Te queda genial!-dice Stuart cuando ve a mi mamá salir del vestidor con un nuevo vestido.

-No me gusta-se queja.

-Y es el último que te trajimos-dije mirando a Stuart.

-Bien, ya vuelvo. No te me desanimes-dice antes de irse. Veo como mi mamá se pasea un rato por el lugar, antes de sentarse a mi lado.

-¿Qué tal las cosas con Nat?-pregunta

-Terrible, no nos hablamos. Y ni siquiera sé qué debo hacer.

-¿Qué quieres hacer?

-Quiero que nos arreglemos, pero creo que ella se merece la ley del hielo por un tiempo.

-Entiendo pero ¿También quieres que vaya a Hawaii verdad?-pregunta y yo solo logro a asentir.

-Ponla aprueba.

-¿Cómo hago eso mamá?

-Habla con ella, dile que le vas a dar una oportunidad, pero te lo tiene que demostrarte en el viaje hasta el punto en que tú puedes confiar en ella y que pueden seguir siendo amigas.

-Eso es muy ingenioso, mamá.

-Lo sé, soy la mejor-dice alardeando, yo me río.

-Por cierto, cuando te pruebes un vestido, no solo lo veas como te lo estas poniendo. Transfórmalo, imagínate tú peinada, maquillada y lista. Ve si la ilusión que tienes la refleja el vestido y así lo encontrara-dije muy segura y dándole mi opinión más sincera.

-Gracias, lo tomare en cuenta para la próxima ronda-dice regalándome una sonrisa la cual le devolví.

Cuando pasaron aproximadamente dos horas mi mamá ya había encontrado su vestido ideal, el cual será secreto hasta la ceremonia. Al encontrarlo dijo que era ese y me conmovió tanto que me puse a llorar con ella, Stuart dijo que él no lloro pero era mentira, lloro tanto como si llevara cinco mujeres por dentro.

En fin, al volver a la casa Nancy nos preguntó cómo era el vestido, pero tanto mi mamá como yo guardamos el secreto. Ella quiere que las personas se sorprendan y así será. Cuando fui a mi cuarto llame a Nataly, en verdad quiero solucionar este caos, y creo que la idea de mi mamá fue muy ingeniosa. Entonces aquí estoy esperándola afuera de mi casa para que hablemos.