Capítulo 24

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Los días habían pasado para los protagonistas de esta historia, Yibo y Zhan habían asistido a la clínica especializada en Inseminación Artificial le habían pedido a Yibo que pasara a un cuarto especial donde le dieron un pequeño recipiente esterilizado pidiendole que depositara ahí su semen, le proporcionaron unos folletos y videos para estimular al azabache ya que Zhan se moría de la pena cuando el médico le pregunto si quería entrar y ayudar a su esposo.

Cuando Yibo salió del cuarto con un leve rubor en sus mejillas, le dió el pequeño recipiente al médico quien les indicó que todo estaría listo en dos días, primero tenían que analizar el semen y seleccionar así los espermatozoides.

El gran día de la inseminación había llegado, Yibo había pedido permiso en su trabajo para faltar un par de días ya que quería estar presente y apoyando a Zhan.

- Tranquilo Zhan, todo estará bien - acariciaba el dorso de la mano del castaño.

- ¿Y si no funciona? - pregunto aún sabiendo que Yibo no podía responder a sus preguntas.

Paciente Wang Zhan - llamó la recepcionista de la clínica.
Zhan y Yibo se apresuraron a levantarse - la doctora Sammy le espera en la habitación 7, sólo se permitirá su entrada, su esposo puede esperar aquí.

Zhan volvió su mirada hacia Yibo, se abrazaron y el castaño hundió su cara en el fornido cuerpo de su esposo.

- Anda, todo saldrá bien! Te prometo que no me moveré de aquí - dió un corto beso en el cabello del castaño quién sólo asintió y busco el cuarto número 7.

- Mucho gusto Zhan, yo seré quién llevará tu proceso - habló la doctora Sammy mientras el castaño entraba a la habitación donde también se encontraba una enferma con una cálida sonrisa.

- No debes estar nervioso cariño, será rápido y no dolera nada - mencionó cuando notó los nervios del castaño - vamos necesito que vayas a cambiarte y te pongas esta bata.

- G-gracias - fué lo único que pudo decir en ese momento, siguió a la enferma que lo guió hasta el lugar donde se cambiaría.

Cuando Zhan estuvo listo, regresó a la habitación, la doctora ya tenía algunas cosas que utilizaría y guantes puestos en las manos.

- Bien, hazme el favor de acostarte en la camilla - Zhan se acostó en la camilla, la enfermera colocó una pequeña almohada en la empalda del castaño para elevarlo - ahora abre las piernas.

Con un poco de vergüenza abrió las piernas - ¿M-me dolerá? Pregunto cuando vió una especie de jeringa.

- No cariño - sonrió dulcemente al notar lo asustado que estaba el castaño - sólo sentirás incomodidad al momento que ingrese la canula... Ingresaré ahora.

Luego de anunciar que iba a iniciar, comenzó a meter el largo y delgado tuvo, guiandose por una pequeña camarita donde podía ver donde debía depositar los espermatozoides.

Zhan tenía sus ojitos apretados y con su manos hechas puño alrededor de su bata esperando a sentir un pinchazo en su interior - ¡Listo! - anunció la doctora con una gran sonrisa.

- ¿Eso era todo? - pregunto Zhan con el entrecejo marcado.

- Así es, señorita Xuan haga pasar al esposo del joven por favor - la enfermera asintió y fué a llamar a Yibo.

- Los dejaré sólos por unos 15 a 30 minutos, trata de descansar y no moverte tanto, luego vendré y podrán retirarse - anunció la doctora y salió de la habitación.

- Zhan, ¿Estás bien? ¿Te dolió mucho? - pregunto mientras tomaba en sus manos las mejillas del castaño.

- No Yibo, sólo me sentí un poco incómodo al estar expuesto de esa forma - sus mejillas se ruborizaron.

- Espero que esto funcione - suspiro y beso la frente del castaño.

- Si llegara a funcionar ¿Qué te gustaría que fuera nuestro bebé? - de pronto los ojos de ambos brillaron ante lo bonito que sonó las palabras *Nuestro bebé*

- Me encanta como sonó eso - sonrió cuando Zhan bajó su mirada a sus manos entrelazadas - No importa que sexo sea, pero sabes quisiera tener una hermosa niña que se parezca a tí...

Siguieron hablando sobre su futuro bebé y en menos de darse cuenta la doctora ingreso de nuevo.

- ¿Cómo se sienten? - pregunto ingresando con una bonita sonrisa.

- Ansiosos por saber si esto resultara - expreso Yibo.

- Espero que sí las probabilidades de aborto en estos casos es aproximadamente un 15%, podrás seguir con tus deberes diarios, pero no podrás hacer fuerzas - explico Sammy - si la inseminación funciona en unas semanas estarás sintiendo los efectos del embarazo, puedes hacerte la prueba y visitar al ginecólogo.

- ¿Usted puede recomendarnos un buen ginecólogo? - Pregunto el azabache.

- Claro, permíteme - anotó en un papel el nombre y la dirección de la clínica de su colega - El doctor Mean Phiravich es de los mejores ginecólogos que conozco, sé que los atenderá con gusto - Yibo tomó el papel en sus manos.

- ¿Puedo cambiarme ya? - habló el castaño incómodo de estar sólo en una bata.

- Puedes hacerlo, luego pueden retirarse, recuerden cualquier consulta pueden venir - ambos asistieron con una sonrisa y se despidieron de la doctora.

Zhan fué a cambiarse y regresó con el azabache.

- ¿Quieres comer algo antes de ir a casa? - pregunto mientras subían al auto.

- Mejor vamos por unos helados.

- Pensé que no te gustaban los helados... - miró extrañado al castaño quién sólo se encogió en su asiento.

- Lo dije por que estaba molesto contigo en ese momento - comento mientras el azabache reía y negaba con la cabeza.

Llegaron y ambos pidieron dos Bananas Split, sentados conversando surgió una propuesta por parte de Yibo.

- Sabes Zgan...Hace unos días estuve pensando en nosotros y el hecho que estamos en proceso de tener un hijo - tragó saliva pensando en lo que diría continuación - Quizás no quieras hacerlo o piensen que es muy rápido...Pero me gustaría si...Tu aceptaras v-vivir juntos en...Una pequeña casa? - sus manos estaban sudando y su corazón latiendo rápido, pensando en el rechazo del castaño que tenía su boca entre abierta.

- ¿Q-quieres que v-vivamos sólos tu y yo?

- Mira, sé que no tengo el suficiente dinero como para ofrecerte algo mejor de lo que mereces, pero créeme que quiero empezar de cero contigo, no sé alquilar una pequeña casa y yo podría conseguir otro trabajo donde me paguen mejor y poder mudarnos antes que nazca el bebé, no quiero vivir bajo las miradas de mi padre, ni que siga controlando nuestras vidas ni las de nuestro futuro hijo.

- Yibo - susurro en un hilo de voz el castaño.

- ¿Dime Zhan, aceptarías iniciar conmigo de cero en esta nueva etapa? - pregunto sosteniendo las manos del castaño.

- S-sí, claro que sí quiero hacerlo Yibo!, no me importa sino tenemos los mejores muebles o una casa lujosa, mientras podamos estar en paz y felices es suficiente para mí - se levantó de su asiento y tomó del brazo al azabache para estrecharlo en sus brazos y dar pequeños besitos en el pecho de su esposo quién sonrió ante la ternura del castaño.

Descubriendo El AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora