The Red Eyes Lover

Reencuentro.

- Está haciendo mucho frio esta noche.- Zhan caminaba hacia la puerta.- Una vez dentro debes cambiarte por algo más abrigado, estuviste esperándome por un buen rato.

- En realidad no fue mucho tiempo.- Yibo caminaba a su lado.

- Compré muchos bocadillos, gracias a tu generosa invitación.

- Por lo visto decidiste realizar un tour gastronómico.

- Bueno, tu invitaste así que yo solo aproveché.- Se detuvo ante la puerta.- Ya estamos aquí.- Acercó su mano para abrirla.

- ¿Sean?

- ¿Si?

-....¿Podrías soltar mi mano? Has estado sosteniéndola todo el trayecto. No creo que sea necesario.

- Vamos guapo, solo quiero sentir un poco de calidez.- Sonrió.- ¿No te dije ya que hoy hace mucho frio?

-.....

- Es broma. Es solo que no quería que tropezaras, el suelo está muy resbaloso, está a punto de nevar.

- Gracias por eso pero si ya llegamos a casa no es nece...- Trató de soltarse.

- Soltaré tu mano cuando estemos dentro, en un lugar seguro.- Sonrió y tiró de Yibo hacia adentro.

- Hasta que por fin llegas.- La señora Wang apareció.- He estado espe...

La señora Wang se detuvo al ver al par de jóvenes de pie frente a ella, mientras uno lucia sorprendido, el otro lucia avergonzado. La asombrada madre paseo su mirada por aquel par, los examinó exhaustivamente, escaneó cada parte de ellos hasta que detuvo sus ojos en las manos que continuaban entrelazadas.

¿Acaso estaba viendo con claridad? ¿Qué tipo de ambiente era aquel? Regresó su mirada hacia el pelinegro el cual seguía confundido y asombrado, se quedó viendo su blanco rostro y sus grandes ojos que la veían fijamente. 

Wang Yibo retiró con rapidez su mano al notar la presencia de su madre allí, cosa que terminó de sacar de su sorpresa a Zhan quien se giró para verlo y notar aquella tonalidad rojiza que adornaban sus orejas.

- Mamá ¿Qué haces aquí?

- Oh.- Sonrió.- Hoy me demoré un poco porque quise prepararles hotpot (olla caliente) ya que el clima está muy frio.

- No puedes regresar tarde a casa, mi tío debe estar esperándote.

- Tu tío fue convocado a una operación de emergencia así que esta noche no regresa a casa.- Se acerco y tomó el rostro de su hijo en sus manos.- Tienes las mejillas frías bao bao.

- Mamá, permíteme presentarlos. ¿Sean?

- Aquí estoy.- Se acercó a ellos.- Mucho gusto.- Hizo una reverencia.- Mi nombre es Li Sean.

- ¡Oh!.- Lo apuntó.- Ahora que te veo mejor...

- ¿Si?.- Sonrió.

- ¿No nos hemos visto ya?

- ¿Perdón?.- Se tensó.

- No sé pero tengo la impresión de que nos hemos visto ya.- Se quedó pensativa.

- Yo...yo me fui muy pequeño a Estados Unidos, no regresé hasta ahora.

- ¿Es así?.- Sonrió.- Bueno, quizás solo te pareces a alguien conocido.- Llevó su mano a la mejilla de Zhan y la acarició.- Es un placer conocerte cariño, tu también tienes las mejillas frías.

- ¿Quieres quedarte a cenar con nosotros mamá?

- ¿Puedo?.- Sonrió con emoción.

- Por favor.- Zhan asintió.- Su hijo me invitó unos bocadillos así que seria bueno compartirlos ¿Qué dice?