Midgard

Cap. 22 Control (+18)

Nos quedamos por un rato así, disfrutando de nuestro momento, de nuestras miradas cómplices del romance, del silencioso pero perfecto instante que estábamos pasando, donde nada importaba más que nuestra promesa de amor, una que nada rompería porque era lo único que quería de Loki y él de mí, saber que nos pertenecíamos el uno al otro.

- El cielo ha sido testigo de que Loki Laufeyson puede llegar a amar.

- Dahlia. - Dijo sin soltarme mientras me acariciaba tiernamente el rostro. - Te amo, te amo tanto que me haces sentir vivo y quiero que sepas que soy completamente tuyo ahora y siempre.

- Y yo siempre seré toda tuya.

- Toda mía. – Me sonrió y después nos levantamos. - Será mejor que volvamos, ya deben estar esperándonos.

- Espera ¿Todos lo sabían?

- Solo los que tenían que saber.

- Eres el príncipe de las mentiras. - Me volvió a tomar entre sus brazos.

- Soy tu príncipe.

- Entonces bésame príncipe mío. - Tomó mi rostro tiernamente y después tomó mi mano para regresar al castillo, cuando subimos las escaleras curiosamente se encontraba Thor quien parecía hacer guardia tal cual los soldados, al vernos nos sonrió.

- ¿Qué haces aquí? – Pregunté.

- Lo siento, pero me aseguraba que nadie los interrumpiera.

- Eres el mejor hermano. – Dijo Loki tomándolo por el hombro. – De verdad aprendiste después de las veces que nos interrumpiste. – Soltamos a reír.

- Bueno, tenía que asegurarme de que pudieran arreglar sus problemas.

- Pues. - Loki volteó a verme. - Fue más que eso. - Levanté mi mano mostrándole a Thor quien se quedó emocionado.

- Por los dioses ¿Hablas en serio? ¿Acaba de pasar?

- ¿No hablamos hace rato con madre?

- Si, pero pensaba que ocurriría más noche, no justo en el momento donde Dahlia te haría mil preguntas por tu desaparición.

- Bueno, no quería perder más tiempo. Ya tenía la aprobación de Fury y Odín, solo faltaba que Dahlia me aceptara.

- Ahora entiendo porque me dijo que tenía que arreglar las cosas.

- ¿Y no se te ocurrió leer su mente? - Pregunto Thor.

- No, respeto su privacidad, además no me imaginaba que este era el verdadero plan de Loki. - Me tomó entre sus brazos.

- Te lo dije, todo lo que haga siempre será para ti.

- Al fin después de tantos años deciden estar juntos, entonces ahora sí podemos festejar aún más en grande. – Dio media vuelta y empezó a caminar. – Aquí se romperán varios corazones. – Loki y yo soltamos algunas risas y después entramos a la fiesta, Thor estaba tan emocionado que se notaba en su rostro, de pronto Frigga se acercó a nosotros, sabía lo que estaba pasando y solo nos tomó para llevarnos a lado de Odín quien nos sonrió de la misma manera.

- Hijo mío. - Dijo viendo a Loki.

- He tomado a Dahlia como mi prometida esta noche. - Frigga sonrió con tanta emoción que lo hacía notar.

- Esto es algo que se debe festejar. - Odín volvió a su trono golpeando su lanza contra el piso para hacer callar a todos. - El día de hoy es un día de fiesta, uno donde no solo recuperamos personas, recibimos familia, sino que se unen los corazones. Esta noche mi hijo Loki ha tomado como prometida a Dahlia. - Se escucharon algunas voces de sorpresa. - Esta noche brindaremos por ellos. - Los aplausos empezaron a escucharse por todo el lugar, Frigga nos abrazó felicitándonos.