Más allá de mí [+18]

capitulo XXXIII

Naseem

Le dejé mensajes, notas de voz y nada, tenía dos opciones o iba hasta su casa y la llamaba hasta que me respondiera o quedarme acá en casa viendo cómo Aidan me mira como loco.

-Tienes que tenerle paciencia tío, es una chica que está embarazada y tiene miedo.

-Yo también tengo miedo Aidan y correte que la voy a ir a ver- intente pasar por arriba de él pero me agarró del brazo y me hizo volver a mi lugar.

-No vas a ir a ningún lado, ella necesita su espacio, así que toma el control y sigue jugando mientras yo hablo con Kenn- me tendió en control pero lo ignoré.

-Ella dijo......

-Lo dijo porque está cansada Naseem, vives muy pendiente a ella y ella es más...como te lo digo.....- Se quedó un par de segundos mirando el piso en busca de la palabra- Liberal es eso.

-Hay entonces perdón por querer protegerla y nadie como Emma le haga daño.

- Dale su espacio y ya, todo va a ir bien y además Jass dijo que anoche se peleó con su madre, aunque ella no tenga la mejor relación con su madre le debió doler.

-Pero....

-Naseem, deja de ser egoísta y pensar solo en ti todo el día y piensa en ella, capas que necesita su espacio o no sé, se que tienes miedo pero mientras más la cuides, más rápido se va a ir- Tomó el control y empezó a jugar por mi.

Dos horas más tarde Aidan se había quedado dormido con una pedazo de pizza en la mano.

Salte la ventana del baño rezando para que nadie se haya dado cuenta, encendí un cigarrillo y caminé por las calles de noche en rumbo a su casa, no podía dormir sin saber que ella estaba bien, las palabras de Aidan sonaban en mi cabeza, <<mientras más la cuidese más rápido se va a ir>>, No sé qué quería decir con aquello pero tampoco quería saberlo, solo quería saber que ella esté bien, hay muchas personas que le pueden hacer daño en este pueblo, más de la que ella o todos. Pueden creer.

La noche está fría, más de lo normal, unas pesadas nubes tapaba la luna.

Me quedé enfrente de su casa pensando cómo iba a ser para entrar, no pensaba tocar y quedar como el novio tóxico, pero tampoco pensaba entrar por la ventana y quedar como un delincuente juvenil así que me senté en la parte de enfrente de su casa bajo un árbol, más bien donde daba a su habitación, no había traído el móvil así que tampoco le podía mandar un mensaje.

Estaba arrancando pasto cuando ví que su madre salió hecha una furia de la casa y minutos más tardes la luz de su habitación se prendió y apagó casi en segundos, nada iba bien, lo sentía, antes que el portón principal se cierre entre corriendo pasando la gran entrada y toque el timbre de su casa.

-Hola cariño, no llegas en un buen momento.

-Justo pasaba y vi que la madre de Sam salió hecha una furia- Ella aceptó con la cabeza.

-Si, han discutido.- Hizo una leve pausa- de nuevo.

-Y eso porque?- La intriga me estaba matando.

-Mientras subimos te cuento- empezamos a subir las escaleras mientras escuchaba atentamente a Anna- Hace unos días la niña le dijo a su madre que vosotros estáis embarazos y muchas más cosas y a la hora de cenar la niña se empezó a sentir mareada y con náuseas y salió corriendo.

-Pero eso qué tiene que ver qué la madre allá salido corriendo- pregunté aún más confuso.

-Que La madre se enojó porque ella le contó que le habían vuelto a ofrecer ser capitana de porrista y ella lo rechazó por estar embarazada, a lo que la madre de dijo que ese "problema" se solucionaba en una clínica de abortó y la niña explotó diciéndole mil cosas y viniendo llorando a su habitación- Llegamos a la puerta y antes de entrar ella me tomó de la muñeca que sostenía el plomo de la puerta- ¿Tu la quieres?.