16. Encuentros en la disco 2/2

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— ¿Qué tanto has aprendido conviviendo con las hermanas Kochou?

— La mayor es bastante madura, ordenada, amable y extremadamente paciente. Aunque tiene mal gusto... — Comentó desinteresado refiriéndose a su supuesta relación con Sanemi, el maestro de Matemáticas — La menor es amable, un poco tímida, no habla mucho pero me cae bien. La peque es una piedra en el zapato — Murmuró llamando la atención de Yae que parecía no entender la situación — Sin embargo me cae bien, pero no se lo digas a nadie, es buena persona muy en el fondo pero lo es — Concluyó haciendo una rara mueca al mencionar a la de mechones violetas

— Ya veo — susurró sonriendo con melancolía

— Una de las tantas cosas que aprendí al convivir con ellas es que... — Susurró con voz de ultratumba logrando hacer que su amiga lo vea confundida — Jamás las hagas enfadar, esa familia tiene la locura en la sangre.

— Sé exactamente a lo que te refieres. — Continuó imitando la mueca de su amigo

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Las jovencitas yacían en la pista de baile divirtiéndose mientras hacían jugarretas entre sí hasta que de pronto alguien toma del hombro a la de ojos azulados y la hace voltear, al hacerlo esta miró a la persona que estaba en frente suyo con sorpresa.

— Así que una pijamada con tus primas ¿no?

— I-Inosuke... — Balbuceó apenada aunque de pronto recobró la compostura y cayó en cuenta de que él también le había mentido — ¿No se supone que pasarías la noche en casa de Tanjirou? ¿Qué haces aquí?

— ¿Acaso estás ciega? ¿Qué no vés que estoy bailando?

— Eres un mentiroso Inosuke ¡Nisiquiera me dijiste nada!

— ¡Tampoco eres libre de pecado Aoi!

— Ya chicos calmense — Murmuró el pelirrojo acercándose a la pareja que tenía alguna pequeña discusión

Mientras tanto en una parte de la disco otro grupo de estudiantes que acaban de llegar estaban tomando asiento en una de las grandes mesas redondeadas que se encontraban cerca de la pista de baile.

— Amigos ¿qué tal si vamos a bailar? — El rubio cenizo sugirió animado a los demás

— ¿Desde cuándo somos tus amigos, idiota?

— Vamos no seas malo conmigo, Akaza — Contestó denotando "amabilidad desbordante"  mientras perseguía al nombrado

— Este idiota nunca se calla ¿verdad hermano? — La unica dama en el grupo susurró en el oído de su querido hermano que caminaba a su lado

— Ven Ume, no te vas a juntar con esa chusma — Gyutaro guió a su hermana a una de las asientos junto a él y alejada de los demás varones

Ya una vez todos sentados en sus respectivos lugares decidieron pedir bebidas mientras algunos charlaban entre sí.

Douma paseó su vista por el lugar tratando de buscar a quién molestar hasta que encontró un muy buen objetivo.

— ¡¿Pero qué veo?! — Exclamó con desbordante felicidad llamando la atención de los demás que se encontraban bebiendo en aparente tranquilidad

— ¿Por qué gritas inepto? — Ciertamente Akaza no lo soportaba y siempre le respondía a la defensiva, pues porque es molesto

— ¡¿Qué no lo vez amigo Akaza?! ¡La pequeña Shinobu está sola en esa mesa! — Le contestó mientras con el dedo índice apuntaba a una de las mesas — ¡Busqué oro y encontré diamantes~!

Idiota/GiyuuShinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora