25 - estaremos juntos - Final.

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( ____ )
 
Habia estado un buen rato adentro, habia averiguado como resolver un mecanismo que traía el orbe que cumpliría mi deseo, eso me habia dicho la cosa que estaba dentro de la burbuja.
 
- no dejaré que lo hagas. - miré a mi costado y estaba tsukasa, ¿habia entrado?.
 
No sabía si preocuparme o estar feliz por que estuviera aquí, así que solo aseguré mi deseo escondiendo el orbe detrás mío.
 
- tsukasa, este lugar es peligroso para ti, te debilitará hasta desaparecerte. - le mencioné.
 
- para ti igual es peligroso. - se acercó a mi. - dame esa cosa, no te dejaré hacerlo.
 
- o-oye, escúchame.
 
- no necesitas eso, podemos averiguar otra forma, no sacrifiques tu vida. - dijo seguro.
 
- por favor... - lo miré severamente - sé que no podrás, no quiero que trabajes tanto en eso tampoco, simplemente podemos pedir que todo se solucione.
 
- es imposible que se solucione así porque si. - afirmó. - no quiero hacerte daño, dame eso.
 
- ho vamos, ni siquiera podrás quitármelo. - le dije.
 
- ¿cómo estas tan segura? - Dudó.
 
- porque... No podrás hacerme daño, y no hay otra manera de que suelte esto. - mostré el orbe en el aire, me subestimaba demasiado, sabía que no habia otra forma de salvarnos.
 
Le tomé el mentón, acercándome a él peligrosamente.
 
- no finjas, siempre has sido malo en eso. - le sonreí coquetamente, noté que sus mejillas de pusieron algo rojas. - ambos sabemos que no podríamos lograrlo de otra manera aún que quisiéramos, tsukasa.
 
- ¿por qué haces esto ____?, es muy peligroso.- se quejó adolorido, los efectos del lugar le llegaban y estaban dando su vida de a poco.
 
- ... Lo hago porque te amo. - lo solté, haciendo que callera de nuevo al piso inmovilizado. - esto es necesario, solo un obstáculo para lograr lo que quiero.
 
- no importa cuanto lo intentes, yo detendré esto.
 
- ¿qué harás tu?... En esa condición.. - miré su cuerpo sumamente herido.
 
- haría lo que fuera por ti. - se intentó levantar.
 
- ¿por qué tú haces esto realmente tsukasa? - pregunté. - arriesgar tanto por mi, incluso podrías desaparecer.
 
- ____, para salvar a amane, cuando era niño. - me miró molesto, mientras explicaba. - tuve que hacer un trato, pero él decidió perder la vida de todas formas, me dio mucha rabia que a pesar de todo, él no apreciaba mi sacrificio, soporté cosas horribles, luego de casi morir por él, amane no cambió, y de igual manera se quitó la vida...
 
- ¿p-pediste un deseo antes? - pregunté sorprendida.
 
- si, luego volví a antes de pedir ese deseo, no sabia porque vivir o porque morir, ya que nadie me quería allí, mi propia madre me desconoció, hasta que en ese festival... - lo miré atentamente. - dijiste que tu me querías, no habia lugar a donde ir hasta que me diste uno, primero fue curiosidad, perdía esperanzas a medida que pasaba tiempo pero... Te conocí, ¡volvió a ser curiosidad y esperanza, hasta que te volviste irremplazable!. - luego de eso tosió un poco. - haría lo que fuera por ti, por que compartimos todo... Prometiste eso conmigo.
 
- si, recuerdo eso... - me miró asombrado por lo que dije. - recuerdo cuando lo prometimos.
 
No pude más y lo abracé, colocándolo en una posición que no le doliera.
 
- mis errores son los tuyos, así que... Lo siento, por no decírtelo antes. - se disculpó.
 
- lo siento... Pero enserio quiero hacer esto, ¡por mi culpa nunca podrás ir al paraíso!, ¡si yo voy al infierno por esto no importa pero tu--!
 
Sentí sus labios besándome.
 
- no debes hacer eso, no quiero separarme de ti de ninguna manera, desearía vivir de nuevo... contigo.
 
- si, también... - en ese momento me di cuenta de lo equivocada que estaba y lo imposible que era mi deseo real. - deseo estar contigo... - volví a abrazarlo.
 
"los deseos han sido escuchados... "
 
al escuchar esa voz ambos nos miramos y luego alrededor, nos empezábamos a separar y todo empezó a levitar.
 
- ¡_____! - gritó tsukasa, se movió rápidamente, juntó nuestras manos alcanzándome y sosteniéndome en un abrazo.
 
Bastante asustados miramos alrededor, todo se estaba iluminando, incluso las heridas de tsukasa se habían curado, nuestros cuerpos se cristalizaron hasta empezar a deshacerse en pequeños cristales, estaba algo asustada.
 
- ¡tsukasa!, ¡¿que te está pasando?! - primero noté el de tsukasa, intentando sostenerlo.
 
- ¡no lo sé! - rió un poco. - ¡no lo sé ____!, ¡estamos acabados...!, No importa cuanto me haya esforzado por mantenerlo, simplemente no podemos estar juntos... - noté que de sus ojos se asomaban unas pequeñas lagrimas. - ¡¿qué debía hacer?!, ¡¿acaso no me esforcé lo suficiente?!.
 
- ¡es mi culpa!, ¡debí escucharte!
 
- no... No lo es, escucha... Yo también lo sabía, que eras lo único que me ataba a esta orilla y que... No habia nada que te atara aquí, no habia una solución para tu cuerpo tampoco. - noté como ahora si parecía aguantar unas lágrimas bastante enojado. - de esa manera era la única manera de estar juntos, me gustó tanto cuando me pediste que te besara. - sonrió pero no dejaba de llorar. - creí que podríamos estar mucho más tiempo juntos...
 
Mi corazón se quebró, incluso tsukasa se rendía ahora... Intenté ocultar que sollozaba y lloraba, para abrazarlo, quería que si era la ultima vez, pudiera darle una sonrisa, pero muy en el fondo... No quería que fuera la ultima.
 
- ¡no te soltaré! - grité. - no dejaré que me alejen de ti, te sostendré hasta el final...
 
- tampoco te soltaré. - hizo una mueca de dolor que intentaba disimular pero, era imposible ahora, me atrajo a él abrazándome, se aferró a mi tan fuerte, que creí que no podríamos soltarnos - te amo...
 
Pero en poco todo se cristalizó haciendo que ambos desapareciéramos...
 
Habia sido nuestro fin... ¿acaso fui muy codiciosa?...
 
 
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...
 
...
 
El universo mismo se volvió cristal, se despedazó y cuando volvió a unirse...
 
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...
 
( omniciente )
 
Una chica, de hermoso cabello y ojos despiertos al mundo, caminaba a casa, traía dinero para quizás pasar a comprarse un helado.
 
Sus padres estaban divorciados, ella vivía con su madre, y su hermano mayor con su padre, pero a pesar de eso, ella estaba feliz así, ya que su madre le habia dado amor y una vida cómoda.
 
Decidió comprar un helado de regreso a casa.
 
- ha~ ¿donde se habrá metido? - pensó alguien en voz alta.
 
Ella miró atentamente como un chico pelinegro estaba frente a el almacén que vendía helados, parecía buscar algo en sus bolsillos, dando vueltas para ver si se le habia caído cerca, La chica observó en el lugar, encontrando enseguida una billetera debajo del asiento cercano.
 
Ella se agachó recogiéndola y luego se acercó al chico, tocando su hombro, él se dio vuelta, quedando sus ojos conectados por un momentos, haciendo resaltar el ámbar en los ojos del chico.
 
- ¿d-disculpa? - preguntó ella. - estaba debajo del asiento de la entrada, ¿buscabas esto? - preguntó entregándoselo.
 
- ¡¡sii!! - gritó emocionado. - ¡la encontré!, mi mamá me iba a matar por perder otra.
 
- ¿otra? - preguntó ella.
 
- ho, suelo perderlas, el problema es que tiene dinero dentro siempre. - suspiró. - por cierto, me llamo tsukasa yugi, creo que te he visto, vivo al otro lado del rio.
 
- ¿yugi?... Ho, ¿se mudaron hace poco?, también vivo por allí, soy ____ ____. - le mencionó de vuelta, pero ambos tenían la sensación de que no era por eso.
 
¿hace cuanto habían vivido esa vida pacifica?, ambos tenían nostalgia desde el momento en el que se encontraron, además el amor a primera vista no existe ¿cierto?, pero ambos sentían una inexplicable conexión desde el momento que se vieron, como si siempre hubieran estado enamorados del otro.
 
- he... Iba a comprar helado, ¿quieres que te invite uno? - preguntó tsukasa.
 
Él sabia que nunca habia sentido esa necesidad con nadie, la necesidad de que ella no se fuera, incluso amane lo molestaba con que aún con 15 años no tuviera novia, pero la chica aceptó el helado, así que luego de comprarlo se sentaron a charlar.
 
- toma. - él le entregó el helado, y fue un rocé accidental.
 
Un simple roce de manos.
 
Que detonó los recuerdos reprimidos de ambos, como si fueran pólvora, haciendo que ambos se miraran sorprendidos, si... Solo habían necesitado reencontrarse para recordarlo, todo lo que habían vivido, y el deseo que pidieron para estar juntos entonces.
 
- no puedo creer que lo olvidé. - mencionó ella arrepentida.
 
Pero mientras ella se culpaba, tsukasa simplemente la abrazó, botando el helado por el brusco movimiento, abrazo que ella respondió, ambos lo sabían, ahora podrían estar juntos.
 
- no te volveré a soltar. - sonrió él emocionado.
 
Ella se acercó al rostro de tsukasa, cortando rapidamente la distancia entre sus labios, haciendo que probaran un beso luego de tanto tiempo.
 
- te amo. -volvió a decirle tsukasa, luego de tanto tiempo.
 
- yo a ti. - ella respondió.
 
esta vez podrían cumplir el sueño que ambos deseaban vivir, estar juntos y esta vez el tiempo no les jugaba en contra.
 

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.

Fin...

 
  
  
  
   
   
   
   
   
  
   
   
   
    
    
   
   
  
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Este es el final.

Gracias por acompañarme hasta aquí leyendo, espero que les haya gustado.

Nos veremos pronto (❁´◡'❁)*✲゚*

Incluso Después De La Muerte --(Tsukasa y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora