Partido || Marcos Bolados

C U M P L E A Ñ O S

(Capitulo extra)

Estaba terminando de afinar los últimos detalles para el gran cumpleaños de Marcos que traía en mente junto a los chicos del club.

—¿Marcos no sospecha nada?— me pregunto mi amiga, estábamos ambas en mi habitación haciendo las últimas cosas.

—No, gracias a Dios— sonrei— quizas piensa que no se cuando es, o no lo se.

Estaban invitados la gran mayoría de los chicos del club, y podían traer a sus parejas.

Esto mayormente fue hecho por Jeyson, Ivan, Gabriel su pareja y Fran.

Quienes desde un principio no pusieron ningún problema en ayudarme, y así se me hizo un poco más fácil. Por que ellos tenían un buen de contactos, mientras que yo tenia los justos.

—Mañana tienen entrenamiento, por lo que me comento Jeyson.

De seguro en la mañana como siempre.

—La idea será la misma, Ivan irá a buscarlo. Y lo llevará a la parcela en chicureo— adivinen quien nos presto semejante lugar, la tía de Fran— y nosotros deberíamos estar allá, con toda la decoración y lo demás.

Me vengo esperando desde diciembre con esto, me sería imposible que me salga mal.

—Ivan pasara con el a su departamento, donde le inventara que irán a comer algo. Por su cumpleaños, y asi todos los demás chicos les da el tiempo de llegar allá igual.

—Entonces supongo que ya estamos ready— me tire el pelo hacia atrás.

—Marcos es muy afortunado de tenerte amiga— tomo mis manos— veo el bien que se hacen mutuamente, es muy lindo realmente.

Siempre había querido algo así, donde pudiera ser yo. Y al estar con Marcos en esto que tenemos, me hace sentir muy bien.

—Ay no quiero llorar— agite mis manos cerca de mi cara, mis ojos ya habían amenazado con estallar en lágrimas.

Ella se acerco aun más y me dio un calido abrazo, esos que solo sabía dar ella.

—Agradezco a ese partido, que nos junto más como amigas nuevamente— le dije cuando me separaba de ella— eres un solecito en mi vida Fran.

—Y así no querías llorar— se rio, también agitando sus manos.

Cual de las dos más llorona.

Ella se quedó a dormir por la hora, y así mañana podíamos salir de acá juntas. Había invitado a mis padres, pero no quisieron asistir pero si les mandaban un presente.

—¿Estoy bien así?— me había colocado un jeans negro tiro alto, y un crop top blanco. Y encima iría con un tapadito rosa palo.

Me iba a colocar uno negro de encaje, pero mostraba más de la cuenta. Y uno de mis complejo aveces es mi busto, aunque no es ni mucho ni tan poco.

—Lo diosa que eres— me alabo mi amiga, mientras me miraba con una sonrisa— lo único que te cambiaría, es el tapadito por un chaqueta.

Habían opciones, una del mismo tono que el pantalón.  Mirándome al espejo me probé esa opción y quede totalmente enamorada.

Aun así la chaqueta no fuera parte del outfit toda el día, por el calor. Debía tenerla como mi compañera en la noche cuando refrescara.

—Vamos entonces— hablo mi amiga, cuando yo estaba tomando mi cartera.

—Vamos— conteste, saliendo de mi habitación.

Habíamos tomado las cosas que llevaríamos desde aca, y los regalos. Para poder guardarlas en la maleta del auto.