Hijo De Una Clara Canción De Otoño |SAVE|

XX

Advertencia: empieza lo feo(?)

Disfruten y prepárense para lo peor.
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BingHe dejó a Qin WanYue y corrió en dirección al río, donde se suponía que habían más personas jugando en el agua hasta hace poco. ¿Por qué ahora solo habían dos personas en al agua? ¿Dónde estaba Qin Wanrong?

Olía a miedo. El olor del temor se esparcía como el humo alrededor.

Mayor Meng, ¿qué está pasando?

"¡Te dije que te fueras! Que desaparezcan un par de mocosos no es un gran problema. ¿No es mejor tener menos personas a las que cuidar?"

"¡Justo antes no sé qué pasó! ¡En un momento las aguas se tornaron negras y algunos hermanos y la hermana fueron absorbidos por el agua!"

¿Absorbidos?

"Hm, que pena. No sabían nadar. Da la vuelta, niño."

Extrañamente habían cosas flotando en el suelo cerca de la orilla. Probablemente pertenencias de los desaparecidos. BingHe iba a tomar las cosas del agua y asegurarse que todos salieran del agua cuando vio a un hermano de otra secta ser arrastrado por el pie hasta desaparecer en el río.

"¡Aléjate del agua, aléjate ahora mismo!"

BingHe en un segundo supo de qué criatura se trataba y alejó con recelo la mano del agua sin tener que ver algo en ella. Rápido advirtió a los hermanos y hermanas.

"¡Aléjense del agua! ¡es un Nu Yuan Chan del Reino Demonio!"

Se escuchó un burbujeo y del agua salieron largas extensiones de cabello negro, delgado y mojado. Cadáveres emergieron a la superficie, enredados entre cabellos sin una parte de carne o sangre en ellos. Completamente succionados, solo quedaban los restos. Flotaban pacíficamente a pesar de la situación, dándole escalofríos a BingHe al verlos. Los hermanos en las orillas estaban bajo un trance causado por el miedo y la conmoción. Incluso BingHe sintió que se quedaba sin palabras hasta que alguien se aferró a su espalda, soltando un fuerte y agudo grito cerca de su oído. Era Qin WanYue reaccionando a ver el pequeño esqueleto de su hermana atorado en la orilla. Su cabeza parecía mirarlos con ambos orificios donde se suponía que iban los ojos, como grandes agujeros que absorbían la mirada de otros, incapaces de mirar a otro lado más que a la oscuridad y profundidad en los orificios. Aún conservaba su propio cabello mezclado con los largos hilos de cabellos.

"Pensaba que a los humanos no les gustaba maltratar niños, pero ahora veo que les gusta encerrarlos en montañas con bestias asesinas."

Estas bestias no deberían estar aquí, Mayor Meng...

"¿Entonces que hacen aquí? Estas bestias solo pueden ser encontradas en ciertas zonas dentro del Reino Demoníaco."

"¿Qué es lo que sabes del Nu Yun Chan?"

No mucho. Sé que es capaz de moverse por tierra y agua.

La frustración de Meng Mo llegó a BingHe en forma de un fuerte suspiro que sólo él pudo escuchar dentro de su cabeza.

"Tu maestro debió enseñarte estas cosas. Tienes saber las formas de mantenerlo alejado de ti. Es una criatura de tierra y agua, no soporta el calor."

BingHe asintió e hizo cuanto pudo para quemar con talismanes a la criatura. Alertó a los demás hermanos, sacándolos de su trance y cuando todos empezaron a correr en dirección contraria al río, BingHe sacó las bengalas que les habían entregado al inicio de la conferencia y prendió una para lanzarla. Pronto cientos de bengalas alumbraron el cielo, proviniendo de distintas direcciones. Ver las señales en el cielo le dio un malestar en el estómago a BingHe, una horrible sensación que se arremolino con intención de subir y estancarse cerca de su pecho.