Contando a mis ex- Jordanna

21

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A la mañana siguiente, el teléfono de Danna sono, despertandola. Era su hermana.

-Buenos días.-Dijo Vania contenta.

-Buenos días.-Contestó con menos emoción que su hermana.

-Te desperté, ¿verdad?

-Si.-Hizo una mueca.-Pero no importa, ¿qué necesitas?-Se sento en la cama.

-¿Por qué crees que necesito algo?

-Siempre me hablas cuando necesitas algo.

-Claro que no.-Se quejó su hermana.-Bueno ese no es el tema.-Danna rió por lo bajo.-Te quiero invitar a comer, ¿bien?

-¿Comer? ¿Tan tarde es?

-Si, algo. Bueno, ¿vienes?

-Está bien, me convenciste con la comida. ¿En dónde te veo?

-Danna, ya sabes donde.

-No puedo creer que te guste tanto ese lugar.

-A ti también te gusta, no te quejes.

-Si, bueno...Tienes razón.

-Bueno, te dejo. Nos vemos en una hora. No llegués tarde.

-No lo haré. Adiós.

Danna terminó la llamada y se paro rápidamente, tomó una ducha y luego se vistio con unos pantalones azules ajustados un jersey gris, se puso las botas, tomó su bolso y salió de su departamento. Cuando llegó, visualizó a Vania, quien la miraba con una sonrisa. Ella se acercó y le sonrió, bajo un poco la mirada y vio cuatro platos, de nuevo la había engañado.

-No de nuevo.-Hablo Danna seria.-¿Quién es el invitado sorpresa?

-Se supone que comería con papá para decirle que no tiene que ir a la boda.-Vania la miro mientras hablaba.-Pero me dijo que llevaría a su novia.

-¿Jane?-Preguntó Danna con pocos ánimos.

-Si. Y no puedo tener esa conversación frente a ella. Así que pense que podríamos hacerlos juntas.-Vania le sonrió y le señaló un lugar a su lado.

-No pienso volver a comer contigo en mi vida.-Se sento y miró seriamente a su hermana.-Pense que realmente me amabas y querías pasar tiempo de hermanas.

-Te amo, y me encanta pasar tiempos de hermanas contigo, pero eso es más importante.-Danna se iba a quejar pero su padre apareció en ese momento.

-¡Danna! No sabía que vendrías.-El hombre mayor le sonrió a su hija menor.

-Papá.-Le sonrió Danna.

-Hola.-Saludo Vania y amabas se pararon a saludar a su padre y a su novia, Jane.

-Que sorpresa, están todas mis chicas aquí.-Dijo su padre divertido, Danna sonrió y volvió a sentarse.-Tengo uno igual.-Señaló el celular de Danna.-Compré uno para mensajes, deben seguirme en twitter.

-Oh, podríamos hablar ahora.-Hablo Danna y todos rieron.

-Está tan emocionado por tu boda.-Le dijo Jane a Vania.-Solo escribe sobre eso.-Susurro al final.

-No puedo esperar a que todos conozcan a mi dama.-Dijo refiriéndose a Jane, ella lo volteó a ver y sonrió segundos después le dio un beso.

-Oh, ¿vas a ir a la boda tú también?-Preguntó Vania.-Eso es genial. Danna, ¿no te parece increíble?-Dijo sarcásticamente. Danna que estaba más concentrada en su celular jugando con algún jueguito que este tenia que en en la conversación, la miró.

-Oh, si. Es perfecto.-Dijo mientras miraba a su hermana y luego se giraba hacia su padre y su pareja.-Eso será muy lindo.

-Lo sé...Estoy ansioso.-Finalizó su padre.

Danna miró a su hermana, quien la miro nerviosa. No podían decirle a su padre que no fuera la boda, y mucho menos, como dijo Vania, frente a su novia. ¿Qué tipo de hijas serían? Si volver a tocar el tema de la boda, comenzaron a comer y hablar sobre temas triviales. Cuando terminaron de comer, su padre y su novia se fueron. Danna y Vania se subieron al auto de la última y se dirigieron a casa de su madre, tenían que arreglar ese enredo, sin importar las circunstancias.

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