El bosque Rojo [Amazon Y Librerías]

Capítulo 10

MARCUS

Llegué a mi casa y, nada más poner un pie dentro, sentí un ambiente extraño, como si mis padres ocultaran algo. Observé cada rincón de la planta principal y no noté nada fuera de lo común, nada que llamara especialmente mi atención. Me hicieron preguntas acerca de la expedición y mi relación con Scarlett. No sentía nada por ella, a veces discutíamos, muchas veces me sacaba de quicio y otras veces me hacía reír. Creo que más que amigos éramos confidentes, personas que se llevan bien y que se confiesan sus secretos. Porque llegué en el momento equivocado al sitio equivocado. O quizás no.

Subí las escaleras hacia mi habitación y fue justo antes de abrir la puerta, justo ahí, cuando distinguí aquel olor que nunca podría olvidar, porque ese era su olor. Giré el pomo, abrí la puerta y levanté la mirada.

― ¿Me has echado de menos hermanito?

Corrí hacia él y me envolvió entre sus brazos haciendo que el olor se hiciera aún más palpable en el aire.

Mike era mi hermano mayor, solo dos años, tenía el pelo marrón y estaba muy tatuado, el cuello, los brazos, el torso... todo eran dibujos en su piel. Sus ojos eran verdes y su mandíbula marcada. Vestía una camisa abierta que lo hacía ver informal junto con unos pantalones negros y unas cadenas adornando su cuello.

Llevaba mucho tiempo sin verlo, él se había quedado en casa de su novia desde hacia unos meses, el problema era que esta chica era demasiado tóxica y controlaba todo lo que hacía, hasta el punto de no dejarlo ver a su familia. Rompieron unos días después de venir a RedWillow y se había quedado en Estados Unidos para preparar la mudanza.

Hablamos por horas y sobre todas las cosas que habían pasado desde que no nos veíamos, evidentemente, el asunto Fiore no estaba en la lista de anécdotas.

Cuando por fin tuve sueño, me dirigí a mi dormitorio y, tras esconderme entre las sábanas, decidí enviar un mensaje a Scarlett.

―Hola tormenta.

―White, mañana te quiero en la biblioteca del pueblo a las seis de la tarde―Contestó al instante.

―Como ordene mi coronel.

―Buenas noches Marcus.

―Buenas noches Scarlett.