—고장난—
Decir que sabe lo que fue, sería muy pretencioso de su parte.
Taehyung no podía hallarse a sí mismo concentrado en el libro que tenía delante suyo. No tenía importancia para él como sí lo tiene el descubrir el porqué del enredo en su cabeza.
¿Qué es eso que retumba en su pecho con euforia? Y ese zumbido en sus oídos, ¿de dónde salió?
Está confundido, totalmente.
Pero no con lo que Jungkook hizo.
Taehyung no es tonto y la experiencia de tres décadas le dio la capacidad de leer a las personas, y descubrió a Jungkook mirándolo más de una vez de forma sugestiva. Notó ciertos gesto que joven hacia con cuando él está cerca suyo y debe admitir que de cierta forma, se esperó que esto pasara.
Lo que lo tiene desconcertado es el hecho de que él permitió que lo besara.
Pudo haberse apartado, pudo haberlo frenado con su mano o haber cortado el beso para que durara menos.
Pero no lo hizo, no lo detuvo.
Tampoco reaccionó de mala manera sabiendo que lo que el muchacho hizo estaba mal.
¿Por qué? ¿Qué fue lo que lo hizo ceder a esos labios, a esos ojos tan cristalinos y puros acercándose con miedo? ¿Qué fue lo que le impidió apartarlo como debió hacerlo? ¿Por qué le permitió a Jungkook besarlo?
Incorpora aire a sus pulmones mientras fija la vista en un punto de la sala de su departamento que se extendía delante suyo, toma la manija de la taza de porcelana con su mano hábil y por pura costumbre la lleva a sus labios.
El sabor del café despertó el sentido del gusto, pero el resto de sus capacidades permanecían o dormidas porque se estaba convirtiendo de noche o bien estaban enfocadas en los delirios de su cabeza.
Desde ayer a la noche que pasó el acontecimiento que está así.
Si dice que durmió bien, si afirma que comió adecuadamente y si asegura que no estuvo todo el día con un peso en su pecho, miente.
Y a Taehyung no le gustaba mentir.
Lo que más le preocupa de toda la situación es Jungkook y como este se sentiría porque antes de que bajara del auto, él le vio las lágrimas asomándose por sus bellos ojos y la disculpa dicha con tanto arrepentimiento lo dejó entre pasmado y contemplativo.
Quizá si hubiera reaccionado a tiempo hubiera podido solucionar todo esto. Pero, ¿cómo lo iba a hacer? ¿Qué le hubiera dicho si hubiera tenido la oportunidad?
Él también tiene su cuota de culpa por haberse dejado besar.
Ugh, al final terminó enredando más el lío en su cabeza.
La puerta de la habitación matrimonial siendo abierta es lo que activa su sentido del oído. Taehyung sale parcialmente de su trance, pero no se anima a voltear en dirección a la sala cuando escucha los pasos suaves de su esposa.
Ni siquiera debe hacerlo porque Soyoung aparece en su campo visual con su habitual amargura siendo el manto que cubre su presencia.
"¿Dónde están las llaves del auto?"

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DEAR JOHN | taekook
Fiksi PenggemarTaehyung, un docente universitario se involucra demasiado con su alumno, Jungkook. El verdadero problema es que ellos comparten un lazo mucho más profundo del que deberían. "Jungkook" y aquel nombre se vuelve carne bajo las palmas de sus manos. "¿Có...