Un hijo legítimo tratado como un suplente. Una lucha de intereses políticos. La perdida de un padre adoptivo en batalla y la muerte de un amor sin futuro que acabó por arrastrarlo a la ejecución.
-En caso de que fuese su verdadero hijo, que me diría...
Después de entrenar en el Camino Amarillo, tomé a Shō para dirigirnos al oeste a realizar un reconocimiento de campo a las villas de lobos. No iba a ir a ciegas a pelear contra el enemigo, en su lugar analizaría sus movimientos para hallar debilidades.
Gracias a que Mel fabricó un perfume que mezclaba mi aroma con el ambiente, podíamos infiltrarnos impunemente acechando en la oscuridad de los bosques.
Aguardábamos sobre un árbol gigantesco cerca de la entrada de la villa Samba para variar y quizás por estar muy alerta, capté el sonido de varios lobos peleando cerca del acantilado a 1km.
Nos ocultamos entre los árboles para ver como una docena de lobos intentaban asesinar a una pareja de lobos grises que resguardaba a su cachorro herido en el hocico de su madre.
-Sólo déjalos morir. Esa cría es defectuosa como su madre!- el líder del escuadrón los acorraló al borde del precipicio
-No, son mi familia!- el joven lobo se negaba a retroceder
-Siempre fuiste un estorbo, hermano. Acábenlo!- el lobo marrón se lanzó con los demás para atacarlo
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*Raufff Rowww*
Iniciaron la erradicación a través de una matanza. Con tal de proteger a los suyos, el lobo gris luchó en una pelea desigual de 12 contra uno dónde lo estaban masacrando.
*Hewhew howl*
Lo arrojaron contra las piedras y siguieron encajándole los colmillos para matarlo. Aprovechando el desquite, se acercaron a desafiar a la hembra que apenas podía mantenerse en pie.
-Latifah corre! Rowargh!- pese a estar herido, saltó para que huyera
-Muérete Malik!-
-Shō, ve- susurrando a su oído, lo envié al despeñadero
Entre tres lo arrojaron al vacío a la par que los demás empujaron a su hembra con su cachorro.
-Tch! Maldito desperdicio. Si preguntan, ellos atacaron primero y los lanzamos al barranco como castigo-
-Vámonos. La ceremonia aún no finaliza- corrieron de regreso
Una vez se alejaron, salté a buscar a Shō y lo encontré arrastrando al joven hasta una cueva.
*Graww*
La hembra gruñía a duras penas.
-Tranquila, no te lastimaré. Tal vez hayas oído de mí, soy Dyson Halliday. Debo suponer que esto fue por el niño, mal hecho-
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