23- celos discretos 🥀

1K 97 3
                                    


El sol había dejado de admirar a su amada para iluminar la mañana…

El día llegó y los estudiantes tenían que levantarse rápidamente e ir a clases.

Hermes se levantaba de forma lenta, no quería levantarse, por más que su familia le haya enseñado a levantarse temprano y hacer sus deberes, quería seguir durmiendo…

- Hermes, levántate, llegaremos tarde, no importa que ya te sepas todo, a tu madre no le agradará que no asistas o seas impuntual - con la simple mención de Loki, Hermes se levantó de golpe.

- Ya estoy vestido - si, si estaba vestido y aseado.

- Bendita sea la magia que posees para hacer eso - alabo Blaise, Theo asintio.

Draco río para salir acompañado de los otros tres, sus pasos eran calmados, había mentido, aún faltaba bastante para que la primera clase empezará.

Se encontraron a las Greengrass y Parkinson en la sala común, el aire era frío, todos estaban debidamente abrigados, al salir de la sala y caminar por los largos pasillos se escuchaban cuchicheos de los alumnos, sobre una tal Dolores Umbrige como maestra de DCAO.

Al llegar al comedor, Hermes sintió una mirada inquisitiva sobre el, giró y vió a una mujer regordeta vestida totalmente de rosa, acababa de verla y su sonrisa ya le fastidiaba.

Sintió un ligero y suave toque en su mano, giró a ver a Draco - ten cuidado con ella, es Umbrige… - le susurró el rubio, asintió para sonreír al ver a sus hermanos esperarlo en la mesa.

- Jörmud, Hela, Fenrir! - se acercó de forma rápida y alegré, recibiendo un efusivo abrazo de Fenrir - Hey! - saludo este.

- Y para esta serpiente no hay abrazo - comentó Jörmud fingiendo estar dolido, Hermes río y le dió un fuerte abrazo a su hermano mayor.

Hela le dió unas caricias en su cabello y Hermes suspiro satisfecho bajo la atenta mirada de todos en el comedor, incluida la de un pelirrojo envidioso.

- Ahora, mis estimados estudiantes, permítanme presentarles a la nueva maestra de DCAO, Dolores Umbrige! - anunció contento el anciano, definitivamente tenía algo en mente…

algo le daba mala espina de esa mujer a todos allí, a todos menos Dumbledore.

- Harry! - le llamó Cédric con una brillante sonrisa acercándose acompañado de Luna, Ginny, Fred  y George.

- Hola chicos!, ¿dónde está Neville? - dijo mirando detrás de sus amigos, para luego mirarlos al no encontrar a su amigo.

- Ronald no lo dejó levantarse… - dijo Ginny mirando de forma amarga a su hermano mayor, a su lado los gemelos pensaban en que hacer para no pertenecer más a los Weasley.

- Ya veo… Fred, George, ¿en que piensan tanto? - estos miraron a su amigo de raíces rubias, que por cierto, tenían que preguntar, de donde salieron estás…

- Pensábamos
como hacer
para
dejar
de
ser
unos Weasley - ( si, así pondré la de los gemelos, no pensé otra mejor :">).

Cuando terminaron de decirlo, Hermes y sus amigos tenían los ojos abiertos como platos.

- Dejar… de ser unos Weasley…? - preguntó desconcertado el de rubias raíces, los gemelos asintieron - está bien, pero hablemos eso en otra parte… - los chicos se sentaron junto a los demás para intentar entablar conversación con los que suponían, eran los nuevos amigos de Hermes.

- Hola, soy Fred y el es George - se presentó George, Jörmud sonrió con gracia - hola, George… - le saludo la serpiente, todos abrieron los ojos con sorpresa, los gemelos iban a colapsar…

- Cómo…? - Fred solo miraba desconcertado a Jörmundgander, este río - no lo sé, solo, algo me dijo que él no era Fred -.

Hela río - estamos acostumbrados a ver persona idénticas, nuestras tías, son Trillizas, la única diferencia son sus ojos, por allí las diferenciamos - dijo la pelinegra, sintiendo una mirada fija sobre ella, volteó, era Granger…

- Oigan, la sangre sucia me está mirando - Hermes la miró, casi regañándole por el apodo ofensivo, pero decidió simplemente callar.

- Dejala, tal vez simplemente tenga envidia de tu belleza - le aludió Draco.

- No vas a ganar mi aprobación para salir con mi hermano através de halagos - Draco suspiro - tenía que intentarlo - se encogió de hombros.

Hermes reía de las ocurrencias de sus amigos mientras desayunaba, todo bien hasta que volteó y chocó con la mirada de una chica de Ravenclaw, pensó que lo miraba a el, hasta que se dió cuenta que miraba a Draco.

No le dió importancia y siguió en lo suyo, al rato tuvieron que retirarse a su primera clase, que tocaba con Ravenclaw…

Volvió a restarle importancia, al llegar al salon de transformaciónes se sentó junto a Draco para comenzar la clase.

Levantó la mirada para encontrar a la misma chica de antes susurrar algo al oído de la maestra Mcgonagall con una sonrisa tonta en su rostro.

- Es una buena idea… - dijo pensativa Minerva mientras la chica se sentaba en su lugar - bueno chicos, hoy vamos mezclar las casas, estudiantes de Ravenclaw con estudiantes de Slytherin -.

Hermes frunció el ceño discretamente, esperaba almenos que le tocará con su amiga Cho.

- Potter y Chang - sonrió para levantarse y sentarse junto a su amiga, la cuál le sonreía de forma animada.

- Emily Rosemin y Draco Malfoy - sonreía, hasta que vio que era la misma chica, que ahora sabía, se llamaba Emily, está se sentó con confianza al lado del rubio platinado y le sonrió de forma estúpida, el de ojos plata le dió un simple asentimiento.

- Bueno, que comience la clase - la clase dió inicio y Hermes trató de prestar atención, pero era difícil al ver como la águila se estaba restregando de forma "discreta y accidental" de su novio.

Al llegar el final de la clase decidió simplemente ignorar el tema, llevaba el ceño ligeramente fruncido, cosa que Draco notó rápidamente.

- Hey, ¿que sucede? - Hermes levantó un poco la mirada para poder ver a su pareja a la cara.

- Oh, no es nada, descuida, ¿cuál es la siguiente clase? - Draco dudaba de su palabra pero simplemente le dió su espacio, si algo sucedía, confiaba en que el le diría cuando quisiera - toca pociones -.

Siguieron su camino hasta las mazmorras, donde lograron llegar antes que Snape, les tocó con Gryffindor, no era sorpresa que ese laboratorio se convertirá en un campo de guerra…

Snape llegó, y minutos después los de Gryffindor.

- 20 puntos menos para Gryffindor por la impuntualidad - dijo con su voz fría como glaciar, la cual se descongelo ligeramente al ver a su ahijado y a Hermes.

La clase solo se basó en teoría, no elaboraron ninguna pocion, todo sintieron como Snape estaba de un peculiar y aterrador buen humor.

La clase culminó, y después de que Snape pidiera verlos más tarde en su despacho se retiraron.

Así continuó el día, hasta que llegó la última clase del día, DCAO…

Heredero de los dioses.(en Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora