La madre de Harry Potter

14| Primer partido

Se miró nerviosa en el espejo, no era que le preocupara como se veía, solo estaba nerviosa y emocionada, emocionada por ver a su hijo, solo había pasado un mes sin él y para Valerie ya era toda una vida, y nerviosa porque conocería Hogwarts.

Aunque suene ridículo, pero siempre soñó con conocer el hermoso castillo. Al parecer, al ser madre de uno de los jugadores, tenía permitido visitar el colegio para ver el partido.

Cuando Harry le envió una carta diciendole que se había unido al equipo de Quidditch, casi se desmayaba, once años, Harry tenía solo once años y ya estaba haciendo de las suyas. Por supuesto que se había emocionado, había leído la carta tantas veces que ya se la sabía de memoria.

—Dile a mi sobrino que lamento no poder ir, pero que le deseo que gane el partido, que enorgullezca a Gryffindor y que haga de las suyas en ese colegio — le dijo Shannon desde la puerta

—Prometo decirle, ahora tengo que irme, es un largo viaje el que debo tomar — bromeó

—Val, tomarás un traslador — rió Shannon

—Hace años no viajo en uno, ¿Cuanto? ¿Diez?

—Después de ese viaje a Italia, casi vomitabas — recordó causando que ambas rieran

—No me lo recuerdes, fue tan vergonzoso — pidió Valerie cerrando los ojos — el hermoso chico italiano que nos llevaría a nuestro hotel estaba riendose de mí

—Fue lindo contigo, hasta te ofreció una poción para el mareo, le gustaste, el pobre se quedó con ganas de más que una sonrisitas y miraditas nerviosas... Debiste aceptarle la salida — Valerie sonrió triste

—Sabes que no podía, Harry ya estaba conmigo en ese tiempo y... Bueno, ya sabes que no puedo... — miró el anillo en su dedo con tristeza

—Ha pasado mucho tiempo Val, le habria gustado que fueras feliz

—Y lo soy, tengo a Harry, un negocio exitoso, a mi mejor amiga, ¿Que mas puedo pedir? — Shannon abrazo fuerte a Valerie — tengo que irme — dijo soltandola y tomando su bolso — Pasaré a la cafetería antes de irme, Laura se quedará a cargo de cerrar

—Bien, pasaré por las llaves al final, que te vaya bien, tomale una foto a mi sobrino con sus amigos, quiero conocerlos

—De acuerdo, les tomaré foto, te veo luego

(...)

Horas mas tarde, Valerie iba en un carruaje directo a Hogwarts, observó entretenida al animal que jalaba el carruaje, un thestral, era lo que recordaba de los libros. Nunca había visto uno.

Cuando empezaron a acercarse al castillo, abrió la boca fascinada y sorprendida, no esperaba que fuera tan grande, ni tan magestuoso.

No era la única en ir, algunos padres también se habían presentado a Hogsmed para ir en los carruajes. Miraba impaciente la hora en su reloj, no le había dicho a Harry que iría, era una sorpresa.

—Padres y tutores, sean bienvenidos al inicio de nuestra tenporada de Quidditch — los saludó la profesora Mcgonagall — Por favor, caminen por el pasillo, hasta llegar al campo, el partido comenzará en unos minutos

Notando la familiaridad con la que caminaban por los pasillos, el resto de padres, Valerie supuso que al menos la mitad de ellos habían ido a Hogwarts.

Los cuadros se movían y hablaban, las escaleras también se movían, y había visto unos animales en forma de ramas moverse. ¿Acaso todo en el castillo se movía?