29.

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Él está enojado, tan jodidamente enojado. Nunca lo había visto tan enojado antes.

Taehyung camina por la pequeña habitación de mi tienda. Lo llamé aquí para informarle que me iré. No puedo decirle dónde o cuándo regresaré, solo le supliqué que le pidiera a su hermana que manejara este lugar. Puede tomar todas las ganancias. Soy el dueño de la tienda y el dinero que me sobra está en un cheque enviado a Yoongi.

—¿Él regresa y te vas directo a la cama con él? —su mano recorre su cabello.

—No es así.

—Lo es —grita.

Mirando hacia el piso, estoy avergonzado. Él aún me ama, lo sé. Pero mi amor por él no sobrevivirá. Amamos de manera diferente.

—Por favor, Taehyung.

Él asiente. Luego se inclina para besar mi mejilla antes de irse.

Mirando a mí alrededor, veo el desorden que es mi tienda, gracias a Yoongi y a mí.

Limpiando todo, mato las horas antes de que toquen inevitablemente mi puerta. Mi mente está entumecida, es la única forma en que puedo pensar en sobrevivir a esto. De lo contrario, tengo miedo de lo que haré.

Namjoon está aquí para recogerme.

🍓

—¿Por qué parecen enojados?

Namjoon me mira y luego sale por la puerta. Hay hombres parados frente a una furgoneta. Reconozco a algunos de esa noche. Mis manos se deslizan por mi pantalón, y Namjoon me pasa algo.

—Te relajará —es todo lo que dice.

Lo tomo de inmediato sin siquiera cuestionar lo que me ha dado.

Salimos, y justo cuando empiezo a poner un pie delante del otro, llaman a mi nombre. No mi nombre, su nombre para mí. Girándome rápido, lo veo.

Sus manos tocan mi rostro, sus labios a centímetros de los míos.

¿Cómo llegamos aquí?

¿Cómo me dejó llegar a este lugar?

Estoy roto. Ahora más allá de la reparación

—Regresa a mí, Hoseok. — Fueron escasas las veces que me llamó por mi nombre, podría contarlas con mis manos. Entonces algo dentro de mí se mueve. Solo un poco. Pero no lo suficiente para aferrarse a él.

¿Por qué no puedo aferrarme a él?

—Yoongi... —Mi voz es débil, siempre será débil. Su amor domina al mío, incluso cuando no debería. Él me ama más, de esto estoy seguro.

Incluso si mi corazón solo sangra por él, no sabe amar cómo lo hace él.

Mi corazón... está roto.

—Regresa, Hoseok.

Sacudiendo mi cabeza, retrocedo para que sus labios no se me acerquen. Entonces, sus manos, manos que solo saben cómo darme placer, no me tocan. Porque alguna vez, de alguna manera, quiero que esas manos me odien. Me lo merezco. Me lo merezco todo. Merezco que todo venga.

Estoy roto.

—Necesitas irte.

Doy un paso atrás a las manos del hombre que me llevará. Son frías y no como las manos que alguna vez me tocaron. Queriendo darme otras cosas. Cosas que solo Yoongi podría darme. Él niega con la cabeza y luego se adelanta. Namjoon lo toca, tira de él hacia atrás, para que no pueda avanzar hacia mí otra vez.

—No hagas esto, Hoseok, puedo arreglarlo.

Mi cabeza tiembla, una lágrima cae.

—Algunas cosas están destinadas a romperse, Yoongi. Algunas cosas que no pueden arreglarse.

—No te creo.

Las lágrimas caen a mi boca y pruebo la sal.

—Namjoon, no dejes que siga. —Mis ojos se posan en Namjoon, quien solo puede darme un asentimiento.

Nada más debe hacerse.

Las manos me jalan, casi tropezándome, aunque trato de mantenerme erguido mientras me alejo más de él.

Es lo mejor. Porque...

—Estoy roto.

—Eres mío.

Sacudiendo mi cabeza, la mano que me sujeta me agarra más fuerte.

Un moretón estará allí en la mañana.

—No lo soy. Lucha por Jimin. Lo amas. ¿Recuerdas? Tú lo dijiste.

La mano de Namjoon se aferra más a Yoongi mientras hace un movimiento por mí otra vez. Los hombres que están a mi lado agarran sus armas mientras lo miran.

Saben que si quisiera podría dispararles a todos, y Namjoon lo ayudaría. He escuchado historias de lo letal que se ha vuelto. Las historias se mueven como el contagio. Se esparcen. Su postura en este mundo sigue siendo una de las más fuertes.

Namjoon está igual de oscuro.

—Es a ti a quien quiero.

Sacudo mi cabeza cuando el hombre me dice que me mueva. El auto está justo detrás de mi pierna, puedo sentir el acero golpeándolas.

—Es a mí a quien no puedes tener. ¿Aún no te has dado cuenta, Yoongi? Dos errores no pueden hacer un bien. Tú y yo, somos dos errores.

Me levantan y me colocan en la parte trasera de un automóvil. El hombre que aún me agarra del brazo gruñe para cerrar la puerta.

Será la última vez que veré a Min Yoongi.

Me han recolectado.

Y no para él.

🍓

tiene una segunda parte este libro, lo acabo de subir. <3

 <3

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DISTORTED LOVE [SOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora