A Hyunjin sus padres lo iban a mandar a estudiar a Francia al descubrir que su hijo tenía un novio. Lo que no sabía es que cuando se mudara iba a dejar de escuchar los alagos de cierta persona que justo le gritaba cuando estaba con su amada pareja...
Era otro día, estaban los dos en la cama del más alto en bolas por lo que habían hecho el día anterior. Tenían una Sabana hasta la cintura y estaban abrazados.
-Buenos días~- Dijo el mayor acariciando las mejillas del contrario quien no se despertaba.
-¿Amor? ¿ESTAS VIVO?- Empezó a gritar asustado de si estaba muerto o solo dormido.
-Callate- Dijo el Rubio mirándolo feo mientras se acurrucaba más en el pecho del mayor.
-Awww- Dijo acariciando los mechones de pelo de este.
-¿Podés dejarme dormir la puta madre?- Dijo el menor agresivamente.
-A vos sos un agresivo, no me quieres- Dice levantándose de la cama haciendo que el menor de queje ya que este quería estar en el cálido pecho de su futura pareja. Cuando este último lo miró se sonrojó y se tapó los ojos.
-TAPATE ESTAS EN BOLAS- Gritó nervioso.
-Pero si ya me viste desnudo- Se queja el mayor poniéndose los calzoncillos y poniéndose un buzo de manga corta
-Igual- Se destapa los ojos y le hace señas para que vuelva a la cama.
-Perdón amor pero tengo que ir a una cita que me obligó ir mi mamá con Mina.
-Tu mamá me cae mal- Dijo levantándose y abrazando al mayor.
-Es muy linda cuando quiere, pero injusta- Murmuró el mayor agarrando un buzo suyo y poniéndoselo al mejor a quien le quedaba gigante.
-En un mes empezamos las clases- Murmuró cambiando de tema un poco triste.
-Vamos al mismo Instituto ¿no?- Preguntó internado peinarse.
-Sí, solo que nunca me viste porque sos un estúpido- Dijo agarrando el peine y subiéndose a un banquito para peinarlo bien.
-No se que responder ante tu agresiva respuesta- Confesó agarrandolo de la cintura para que no se caiga.
-Que fachero que sos la puta madre- Dijo agarrando las mejillas de este y dándole un pico.
-Lo se, bebé- Dice sonriendo como si fuera superior.
-Pero sos muy lindo, demasiado, ¿sos real? O solo sos una ilusion proveniente del Gobierno?
-Soy real, tonto- Río sintiéndose halagado.
-Y mío- Dijo de forma posesiva mientras lo abrazaba.
-Si si, tuyo- Río el más alto mientras agarraba su celular y veía la hora.
-¿Qué hora es?- Preguntó Jeongin bajandose del barquito.
-Las doce menos cuarto- Dijo mirándose al espejo.
-Voy tarde, adiós amor, recuerda que voy por obligación, desayuna, la casa es tuya- Se terminó de mirar al espejo y besó a su futuro novio.
-A veces no entiendo a su familia- Dijo hablando solo.
-Mejor me voy a comer algo- Baja a la cocina y intenta hacer algo, lo cual extrañamente le salió bien.
Comió su desayuno y después se puso a ver la televisión aburrido.
Mina y Hyunjin estaban en la cita que la madre del último nombrado obligó que tengan.
-Sabes que vine obligado- Dijo mirando la Carta del café elegante donde estaban
-Si pero, podríamos intentar tener una relación, ¿no crees?- Insistió Mina agarrandole la mano al más alto.
-No- Dijo serio.
-¿Por qué no? Soy muy linda, todos los pibes quieren conmigo ¿por qué tu no?- Preguntó inconforme.
-Si eres linda, pero no quiero tengo ya a alguien y no eres tú- Dijo alejando su mano de la de ella.
-Pero... Yo si quiero- Musitó bajando la mirada
-Mina... Podrás conseguir a alguien que te quiera pero yo no quiero entiendelo.
-Está bien- Dijo levantándose.
-A donde vas?
-A mi casa, tu no me quieres por ahora pero me querrás- Espetó yéndose enojada y dejó a Hyunjin ahí con cara de orto.
-Que rompe huevos- Musitó para si mismo mientras se levantaba pagaba su café y se iba otra vez a su casa.
──ೋღ 🦉 ღೋ──
-Hola- Dijo entrando a su casa y viendo a su futura pareja en el sillón mirando una película.
-Hola, ¿cómo te fue con la puta?- Preguntó el Rubio sin mirarlo por estar extremadamente concentrado en la película.
-Pues mal, primero me quiere obligar amarla y le aclaré que tengo un cuchurrumin- Dijo yendo a sentarse al lado del Rubio.
-¿Qué? Como te va a obligar a amarla- Lo mira.
-No se pero nunca la amaré- Declaró y se quedó mirando la cara del más chico y hizo un poquito con la boca.
El Rubio le dió un pico y lo abrazó.
-No quiero que te quiera, no quiero que la quieras- Murmuró el Rubio metiendo su cabeza en el cuello del mayor.
-No la voy a querer, tu sabes que me tienes a tus pies- Confesó el más esto besandole la cabeza
-Awww- Dijo Chan desde la cocina.
Ambos protagonistas lo miraron mal por colarse en la tierna escena.
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