Miedo

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Narrador omnisciente

Al día siguiente Mikasa se encontraba en la cafetería. Hoy sólo trabajarían ella y Eren; Marco tuvo el día libre.

—¡Hola, Mikasa! —dijo Eren sonriendo.

—Hola —dijo algo bajito.

—¿Te enfermaste? —preguntó Eren.

—Oh, no —dijo Mikasa sin verlo—. No me enfermé, creo que me siento bien.

—Oh, me alegro —dijo Eren sonriendo—. Puede que parezca intenso para ti, pero... ¿Te gustaría ir al cine hoy conmigo? —preguntó Eren mientras se ponía el Maldil.

—Oh, claro, si quieres —dijo nerviosa.

—Si tú quieres, Mikasa —dijo él—. Sólo aceptaré si tú quieres hacerlo.

Pudieron parecer simples palabras, pero fueron significativas para ella.

Toda su vida hizo lo que los demás querían, pero ahora alguien le dijo que aceptaría sólo si ella quería.
Sólo si ella tomaba esa decisión.

—¿Podemos ver una de terror? —preguntó Mikasa.

—¡Claro! Si eso quieres, la podemos ver —dijo Eren —. Me encantan las películas de terror.

Mikasa asintió con una ligera sonrisa.

Era raro para Mikasa que una persona quisiera convivir con ella. Lo era porque ella se encargaba de alejarse de las personas.

—¿Hoy viene Marco? —preguntó Eren con curiosidad.

—No, es su día de descanso —respondió Mikasa mientras limpiaba las mesas.

—Ya veo —dijo sin saber como contestar—. ¿Qué película te gustaría ver? —preguntó Eren.

—No sé, sólo que sea de terror —dijo Mikasa.

—Bien, buscaré qué películas hay en cartelera.

—Ok.

En día pasó. Eren hablaba mucho para ser sinceros, pero no le molestaba a Mikasa.

La clientela era normal, ni mucha ni poco. Solo había mucha clientela en los fines de semana; muy poca los miércoles, y los demás días eran regulares.

Pero ese día justamente fue Miércoles.

Le gustaba escuchar la voz de Eren, su voz era hermosa. Le gustaba escuchar lo que le platicaba. Él empezó a leer aquel libro que Mikasa dijo. Ahora él le estaba platicando de cómo le estaba encantando ese libro.

—Me encanta —dijo Eren emocionado —, creo que debería leer más —dijo con una sonrisa.

Mikasa sonrió.

Parecía que Eren vio la imagen más hermosa del mundo, por la manera en la que le brillaron los ojos al ver la sonrisa de Mikasa.

—Tu sonrisa es realmente linda —dijo Eren sonriendo.

Mikasa se sonrojó al oír eso, nunca pensó que su sonrisa era bonita, o más bien, no solía sentirse linda, pero al venir de Eren la hizo creer que decía la verdad.

—Gracias —dijo sin mirarlo, pues sentía pena por aquellas palabras que le dijo Eren.

—¿Te gusta la música? —preguntó Eren mientras comía un pedazo de pastel.

—Sí.

—¿Qué tipo de música? —preguntó curioso.

—Suelo escuchar música en inglés, son como baladas —dijo Mikasa mientras jugaba con un lapicero.

𝐑𝐚𝐢𝐧| 𝐄𝐫𝐞𝐦𝐢𝐤𝐚 𝐀𝐔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora