𝐑𝐚𝐢𝐧| 𝐄𝐫𝐞𝐦𝐢𝐤𝐚 𝐀𝐔

Tan bella como el otoño

Mikasa y Eren estaban realmente bien juntos, expresar su cariño era algo que Eren disfrutaba. Amaba abrazarla y besarla.

Llevaban algunas semanas saliendo y aún seguía muy nerviosos.

Eren solía decirle por apodos lindos como: cariño, cielo, linda.

Mientras que Mikasa todavía era muy tímida para hacerlo, pero algo que solía decirle era: Moon.

Ella siempre amó la luna. Levi le decía que la luna era algo significativo para las personas enamoradas, pero a ella nunca le importó eso hasta que por fin pudo saber a lo que se refería.

—¿Quieres ir por un helado? —preguntó Eren abrazándola por detrás.

Mikasa asintió con las mejillas sonrojadas, en este tiempo Eren se comporta muy cariñoso y bastante lindo.

—Vamos —dijo Eren mientras se alejaba de Mikasa para dejar su mandil colgado.

Para Mikasa, estar con Eren era lo mejor que puedes imaginarte, era su amigo y pareja. Apenas llevaban 3 semanas de relación y Mikasa se sentía muy bien con todo.

Ella empezaba a verse mejor, trataba de verse más bonita para Eren y trataba de no saltarse comidas. Eren incluso comía con ella por videollamada, ella agradecía cada detalle que Eren tenoa hacia ella.

Hace tiempo solo hubo dos personas a las que sintió que les importaba: Levi y Hange.

Ella siempre sospechó que ellos dos estaban enamorados pero nunca pudieron estar juntos.

Mikasa estaba yendo de la mano con Eren hacia la heladería. Él sabía que a ella le gustaban mucho los helados desde que la vio comerlo por primera vez.

—Zeke sabe que somos novios —habló Eren con una sonrisa—. Él quiere conocerte.

Mikasa sintió nervios por un momento.

—Mi madre también, bueno, ella ya te conoce —dijo Eren con una pequeña risa—. Pero aún así quieren cenar contigo.

—¿Y si les caigo mal? —preguntó Mikasa con miedo.

—Mi Mamá piensa que eres muy linda y amable —dijo Eren besando la mejilla de Mikasa.

Mikasa amaba que Eren fuera tan cariñoso. Nunca experimentó el amor de manera romántica, incluso no tuvo amor paternal. Levi se comportaba más como su padre que como su hermano.

No lo negaría, desde que conoció a Eren ella se ha sentido mucho mejor, pero sigue teniendo pesadillas.

—¿Lo quieres de vainilla? —preguntó Eren.

Mikasa asintió. Había algo raro, algo en su corazón estaba preocupado como si algo malo iba a pasar, pero trataba de evitarlo. Ahora estaba con Eren, nada malo iba a pasar ¿verdad?

Estuvo todo el camino con una punzada en su estómago, con ganas de llorar y huir de todos, era algo raro. Ella no se había vuelto a sentir así desde que conoció a Eren, pero el sentimiento regresó.

—Cariño, ¿estás bien? —preguntó Eren.

Mikasa asintió y lo abrazó como si eso fuera a alejar todos sus pensamientos.

Él la abrazó de vuelta, sabía que en personas como Mikasa era normal que tuvieran bajones de la nada y se sintieran tristes.

"Personas como Mikasa"

—¿Quieres ir a otro lado? —preguntó Eren.

Mikasa asintió y Eren la agarró de la mano.

—¿O quieres regresar a casa?