— Cinco minutos más. — Susurro más dormida que despierta cuando siento como me acarician suavemente el cabello.
— Cariño debemos alistarnos ya. En el avión puedes seguir durmiendo. — Escucho la voz de mi Mami.
Es cierto. Hoy nos vamos de viaje a la playa. Rachel y yo estamos muy emocionadas porque vamos a pasar una semana entera en un hotel muy bonito. Mi Mami me enseñó unas fotos desde su celular de cómo es el hotel y es gigantesco, con piscina y playa privada.
Es la primera vez que voy a ir a conocer la playa así que desde que me dijeron que nos íbamos de vacaciones, hace 2 días; no he podido dormir bien por la emoción.
—¡Si! ¡Playa, playa! — Exclamo emocionada sentándome en la cuna. Ya estoy totalmente despierta.
—Así es cariño, pero debemos darnos prisa. Ven.— Estiro mis brazos y mi Mami me coloca en su cadera.
Miro en dirección a la cuna de mi hermana, que está en la misma habitación, y la encuentro vacía. Frunzo el entrecejo mirando a mi Mami. Ella entiende y me explica que Rachel ya está esperando en la bañera.
Cuando llegamos al baño me encuentro a mi hermana en la bañera medio dormida y a mi Papi lavando su cabello con masajes suaves en la cabeza.
Miro el reloj que hay en el baño y ahora entiendo porque se durmió en la bañera. Son las 4:37 de la mañana, es muy temprano.
— ¡Pero miren quién ya despertó!— Exclama mi Papi apenas nos ve entrar al baño. Yo le sonrío y estiro mis brazos en su dirección. Mi Mami se apresura a despojarme de mi pijama y mi pañal y me mete en la bañera.
Cuando Rachel siente el movimiento del agua abre los ojos y observa a su alrededor. Cuando sus ojos se posan en mí sonríe. Empezamos a jugar con la espuma del agua mientras mis Papis nos bañan.
[...]
Siento los rayos del sol en mi cara.
Ya estamos en el avión privado.
Me encuentro en el regazo de mi Papi con un chupete en mis labios. Tengo mi oreja escuchando los latidos de su corazón para poder relajarme, mientras mi Papi me da suaves caricias en mi espalda con una mano, con la otra mano está escribiendo en su computadora cosas de su trabajo.
Me puse muy nerviosa cuando despegó el avión.
Nunca me había subido a uno, así que me asusté cuando el avión hizo un movimiento muy brusco al despegar. Mi Papi al ver esto, me acomodó en su regazo viendo hacia la ventana y así llevo más de 30 minutos.
Mi Mami está en otro asiento dándole un biberón a Rachel que, supongo, ya debe estar dormida.
—¡El mar! — Hablo de repente alejando mi oreja del pecho de mi Papi y señalando con mi dedo índice hacia la ventana donde se observa el hermoso mar de color azul cristalino. Mi Papi se asusta por mi repentina acción pero me sonríe al ver lo emocionada que estoy.
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Mi mágico mundo
Romance- Ariana, ¿Qué te hemos dicho Papi y yo sobre decir mentiras?. - Que son malas y nunca las debo decir. Lo siento - Digo ahora arrepentida y jugando con mis dedos. - Eres nuestra bebé, y una bebé no puede decir mentiras. ¿Entendiste? - Si Mami - Le c...