Eran las 6 pm el parque de diversiones estaba por cerrar y adentro se encontraba un shoto preocupado y enojado además de un bakugo irritado e igualmente preocupado, pues los policías ni los guardias del parque eran capazes de encontrar a la pequeña de 7 años, pero como llegamos a esto pues......
Eran las 8 de la mañana y shoto se despertó y se dispuso a tomar una ducha, vestirse e ir a despertar a obitaki para que se bañarla y bajara a desayunar y así pasó después de un desayuno quemado y no saber cómo peinar a la niña, ambos salieron en el carro del bicolor a recojer a katsuki, cabe destacar que para esto ya eran al rededor de las 12 pm, y una vez recogieron al rubio se fueron en dirección al parque de diversiones donde la niña apenas entrar quería ir a las tazas giratorias, para después vomitar su desayuno debido al mareo y querés subirse a los columpios voladores.
Todo hiba bien hasta la hora de la comida fue perfecta al pareces de la pequeña.
-Mocosa comprende que no tienes la estatura para subirte al destructor de estómagos-decía bakugo ya irritado por discutir con la niña terca.
-Pero yo me quiero subir!- dijo la niña con los ojos cristalinos, para después voltear a shoto y decir- papá, mi mami no me quiere dejar subir al juego!- dijo la pequeña sin darse cuenta de la reacción que había causado en los adultos.
-Cómo me llamaste? - preguntó shoto conmovido y con uns sonrisa.
-A-e perdón! - grito obitaki para salir corriendo despavorida, pues se imagino lo peor por lo que había dicho.
-Mocosa, no corras! - dijo bakugo siguiéndole pero poco después le perdió el rastro.
Shoto y bakugo buscaron con desesperación a la niña pero al ko encontrarla decidieron dar habiso a las autoridades y así el parque impidió la salida a las personas para así evitar que en caso de que alguien tenga a la niña pudiese escapar. La policía, los guardias y ambos hombres buscaban a la pequeña, podía estar en cualquier lado pero el rubio y el bicolor se temían lo peor.
No encontraban a la pequeña y cada vez se hacía más tarde, la preocupación de ambos era inmensa y las autoridades no hacían nada, tanta preocupación no les permitia pensar con claridad pues en ese momento solo querían encontrar a su niña.
Continuara.....