"Por ti" es la secuela del FanFiction "Elite Way School 5º Año". Una historia inspirada en los personajes de Rebelde Way, cuyo eje tornará en la pareja de Pablo Bustamante y Marizza Pia Andrade.
Una historia de reencuentros, promesas, decepciones...
Pablo sostenía una bandeja en sus manos. En ella había un desayuno completo compuesto de cafés, medias lunas y jugo natural.
Me desemperecé en la cama a la vez que bostezaba.
- Buenos días
Me deshice de las sábanas y besé los labios de Pablo con ternura. Me sentía tan bien estar a su lado. No me importaría no volver a la ciudad y vivir nuestra vida en Bariloche, alejados de problemas. Solamente él y yo.
- Te he preparado el desayuno.
Pablo colocó la bandeja en mis piernas. Aplaudí al ver todos lo que había preparado y comencé a comer junto a él.
- Que rico – digo. – Deberías hacer esto mas a menudo.
- Cuando acabe esta pesadilla, prometo que te preparare cada mañana uno – me dice besándome la frente. Toma una media luna y le da un bocado. – Hoy voy a hacer un par de llamadas sobre lo de Franco, a ver si queda alguna huella de lo que hizo
- Posiblemente la haya, sino tu padre no hubiera dado el paso – digo. Tomo un poco de café. - ¿Sabes algo de él?
- No, le sirvió la excusa que le di.
- ¿Crees que se lo ha creído? Sergio es muy ingenioso, a saber qué planes tiene para que te haya dejado ir así no más.
- Lo importante es que lo ha hecho. Si tiene algo pensado es porque ve la oportunidad perfecta para conseguir tiempo para su plan y eso también nos da tiempo para a nosotros.
- Espero que no te equivoques. – digo insegura.
Él deja el vaso de jugo en la bandeja y agarra ésta poniéndola a un lado. Se acerca a mí y me abraza.
- No, lo tengo todo pensado. – me dice. – Vamos a hundir a Felipe y, con él, a mi viejo. Confía en mí.
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Habíamos decidido tomarnos el día de hoy para nosotros. Había pasado mucho tiempo y habían ocurrido demasiados acontecimientos que no nos permitieron estar juntos. Muchos años sin saber el uno del otro. Muchos años extrañándonos en la distancia.
Queríamos apartar por un día todos los problemas que nos rodean y darnos ese tiempo que no tuvimos. Pactamos no hablar nada que respecta a la familia Bustamante. Solamente él y yo.
- ¿A dónde vamos? – le pregunto
Pablo camina emocionado hacia una pequeña caseta situada cerca de la orilla del lago. Un hombre de no más de cincuenta años lo saluda.
- Ahora lo sabrás
Agarra mi mano y me lleva con él hacia el hombre que nos espera. Puedo leer en un letrero el nombre del negocio que aguarda la caseta "NATURA". Sonrío al observar a un par de parejas subiéndose a sus kayaks.
