El significado de protegerte con mi vida

Capítulo 67: Tareas del jefe de secta

Jiang Fengmian acababa de despertarse para tomar su turno y pasarle energía espiritual a Wei Wuxian cuando un discípulo de la secta Yunmeng Jiang de aspecto angustiado entró corriendo en la tienda. Se paró en seco entre la puerta, observando toda la habitación antes de dirigirse hacia Jiang Cheng, que seguía durmiendo, completamente agotado tras la operación de rescate y mantenimiento de Wei Wuxian con vida.

Antes de que Jiang Fengmian pudiera intervenir y evitar que el discípulo despertara a su hijo, el acto ya estaba hecho. Jiang Cheng se sentó en la cama, frotándose los ojos y bostezando. Con el pelo suelto y sólo con su túnica interior para dormir, parecía muy joven.

Fue en ese momento cuando todo había caído sobre Jiang Fengmian. Hubo una guerra y no fue su generación la que luchó en ella, ni él ni su mujer, ni Jin Guanshan, ni Lan Qiren. No, fueron sus hijos los que tuvieron que crecer demasiado rápido mientras se enfrentaban a tales horrores. Se sintió avergonzado por no haber sido de ayuda hasta ahora, limitándose a descansar y a tomarse las cosas con calma mientras su hijo tenía que recoger los pedazos de la arruinada secta Yunmeng Jiang y ascender como líder de la secta.

Era un poco lamentable que toda la generación de sus hijos hubiera sufrido y se hubiera visto obligada a asumir responsabilidades para las que eran demasiado jóvenes. Nie Mingjue era un líder de la secta, y ya lo había sido durante varios años. Lan Xichen también era el nuevo líder de la secta Gusu Lan después de que Lan Qiren se retirara, por el duelo de su hermano muerto. Jin Zixuan lideraba el ejército de Lanling Jin mientras Jin Guanshan era un cobarde y se escondía en la Torre Koi. Y Jiang Cheng, también tuvo que tomar el lugar de Jiang Fengmian tras la caída del Muelle del Loto y reconstruyó sin ayuda toda la secta Yunmeng Jiang.

Realmente, Wen Ruohan y la guerra no sólo habían costado muchas vidas, sino que también se habían llevado muchas más. Amigos y familias, y también la inocencia juvenil y la libre elección. También le ha quitado el futuro a Wei Wuxian, sin un núcleo dorado, ya no podría convertirse en cultivador. Sin embargo, eso nunca impediría que Jiang Fengmian se preocupara por él como por su propio hijo.

Sin embargo, no pudo evitar sentirse arrepentido, Wei Wuxian había sido un chico tan brillante y talentoso, y ahora todo le había sido arrebatado. Jiang Fengmian tuvo que preguntarse si la pérdida de su núcleo dorado no le había destrozado como a muchos otros. Aunque, después de que su esposa le explicara que Wei Wuxian no había perdido su núcleo dorado el día de su huida del palacio de la Ciudad Sin Noche, sino mucho antes, durante la caída del Muelle del Loto, Jiang Fengmian tuvo que asumir que no había afectado al joven de la misma manera que a los demás.

Wei Wuxian había estado luchando incluso sin su núcleo dorado, ¡e incluso había aprendido el cultivo demoníaco! Jiang Fengmian no estaba demasiado preocupado por su futuro, el chico era lo suficientemente inteligente e ingenioso como para darse cuenta de todo y aprovechar al máximo sus nuevas circunstancias. Lo que le preocupaba mucho más eran los efectos que el cultivo demoníaco estaba teniendo en él, al menos según Lan Wangji.

Pensando, Jiang Fengmian no podía ni siquiera imaginar despojar a Wei Wuxian incluso de esta arma recién encontrada, seguramente se sentiría como perder su núcleo dorado, su única defensa, de nuevo. No importaba que toda la familia lo protegiera, Jiang Fengmian podía entender la impotencia de alguien despojado de su único medio para luchar. Después de todo, había vivido en las mazmorras de Ciudad Sin Noche. Supuso que todos tendrían que resolver esto una vez que Wei Wuxian despertara.

"¡Líder de la Secta, le necesitamos!", susurró con urgencia el discípulo de la Secta Yunmeng Jiang, sacando a Jiang Fengmian de sus cavilaciones. "Hay una reunión entre las grandes sectas, tiene que ver con el hierro Yin y el uso del cultivo demoníaco por parte del hermano mayor marcial. Tienes que ir allí también. Tengo miedo de lo que le pueda pasar si nadie habla por él".

Jiang Fengmian se levantó al mismo tiempo que Jiang Cheng, que gruñía y maldecía en voz baja mientras se ponía la túnica exterior.

El discípulo miró entre ellos, repentinamente inseguro de quién venía realmente con él. Y Jiang Fengmian comprendió su vacilación. Había estado alejado del puesto durante demasiado tiempo y su hijo había reconstruido la secta desde las cenizas, ya que ni siquiera recordaba haber conocido a este discípulo en particular, incluso podría ser que fuera una nueva incorporación y nunca hubiera estado en la secta mientras él era el líder de la misma. Sin embargo, por la vacilación y la confusión en su rostro, podía decir que al menos lo reconocía.

Jiang Cheng pareció no haberse dado cuenta de nada y ya estaba preparado para salir. Jiang Fengmian estaría más que feliz de dejar que su hijo se fuera y creciera un poco más, sin que hubiera una guerra esta vez, si no fuera por la mirada que Jiang Cheng lanzó en dirección a Wei Wuxian. Estaba tan llena de preocupación e inquietud, muy abierta y vulnerable, y tan increíblemente joven, diferente a todo lo que Jiang Fengmian había visto en el rostro de su hijo. Y sabía que ir a la reunión ahora mismo era lo último que Jiang Cheng quería hacer.

Estaba muy orgulloso de su hijo por anteponer la secta a sí mismo y por estar dispuesto a sacrificar su deseo personal por el bien de muchos. Sin embargo, ahora estaba aquí, lo suficientemente curado como para asumir sus antiguas responsabilidades de las que había estado huyendo en secreto toda esta semana. En este momento, no quería volver a separar a su familia. Se acercó a Jiang Cheng y le puso una mano en el hombro, apretándolo ligeramente.

"A-Cheng, esta vez iré yo, puedes quedarte al lado de tu hermano. Estoy orgulloso de ti y de ninguna manera intento recuperar el puesto después de todo este tiempo, has hecho maravillas. Has resucitado toda la secta Yunmeng Jiang sin ayuda; realmente has seguido el lema de nuestra secta. Pero ahora, si tu corazón te dice que te quedes con A-Ying, puedes hacerlo. Yo intervendré esta vez, sólo como suplente temporal. Podemos discutir esto después de que A-Ying se sienta mejor, ¿qué dices?"

La cabeza de Jiang Cheng se levantó para mirarlo y Jiang Fengmian vio gratitud y emoción en ellos. "Gracias, padre, te lo agradecería mucho".

Las mejillas de Jiang Cheng adquirieron un sospechoso tono rojo, se sonrojaba y sonreía como un niño pequeño. Y Jiang Fengmian se dio cuenta de que el "gracias" no había sido sólo como agradecimiento por su oferta, sino también por los elogios que había hecho. Le dolió un poco porque Jiang Fengmian sabía que en el pasado no había elogiado lo suficiente el buen trabajo de su hijo. Debería hacerlo mejor en el futuro, la mirada de Jiang Cheng merecía la pena.

Jiang Fengmian dio una última palmadita en el hombro de su hijo y luego se volvió hacia el discípulo de la secta Yunmeng Jiang, que seguía esperando en medio de la sala, desconcertado y aparentemente sin entender la situación. Sonrió al joven y le indicó que le guiara. Todavía confundido, el discípulo salió de la habitación y Jiang Fengmian lo siguió con una última mirada a su familia. Intentaría solucionar esto lo antes posible y volvería pronto con ellos.