El significado de protegerte con mi vida

Capítulo 113: Goose chase

Jiang Cheng había tenido una mañana terrible hoy, ya que no había pegado ojo durante la noche, pensando en cómo decirle a su hermano que todo el mundo sabía lo de su núcleo dorado, y que Jin Guangyao y Jin Guanshan iban tras él. Había sido mucho para él digerirlo y ni siquiera era la víctima en cuestión. Tenía miedo de cómo reaccionaría su hermano.

Y ahora sucedió esto. Había corrido a la habitación de Wei Wuxian tan rápido como pudo sólo para encontrarla vacía, tal y como le había dicho el discípulo. Su hermano no aparecía por ninguna parte y tampoco Lan Wangji, que supuestamente estaba persiguiendo al intruso. Jiang Cheng no podía creer que alguien hubiera entrado en la habitación de su hermano y se lo hubiera llevado.

Habían hecho todo lo posible para asegurar el lugar y los espías de Nie Huaisang también lo vigilaban. ¿Cómo era posible que algún asesino o secuestrador hubiera puesto sus manos sobre Wei Wuxian? Y lo que era aún más sorprendente, ¿por qué su hermano no se resistió ni alertó a nadie? Era un misterio que tendrían que resolver más tarde, lo más importante ahora era encontrarlo sano y salvo.

Cuando vio a Lan Wangji caminando -o más bien corriendo si no le hubieran prohibido correr- hacia la habitación, se dirigió a él y empezó a preguntar: "Segundo Joven Maestro Lan, ¿qué ha pasado? Me han informado que mi hermano ha desaparecido y que usted está persiguiendo al intruso. ¿Lo has atrapado? ¿Dónde está Wei Wuxian?"

Después de todo, Lan Wangji había sido el primero en la habitación, debe haber visto algo. O por lo menos escuchó como Wei Wuxian había sido llevado. Por lo que Jiang Cheng podía decir, no había ninguna interrupción en las matrices que habían establecido, así que el intruso debía haber entrado por la ventana abierta.

El corazón del Líder Jiang se desplomó cuando Lan Wangji sólo sacudió la cabeza pero permaneció en silencio por lo demás. Incluso sin haber hablado entre ellos, Jiang Cheng sabía que el Segundo Jade habría hecho todo lo posible y lo imposible para recuperar a Wei Wuxian si hubiera habido alguna pista. Es decir, no había ninguna y su hermano había desaparecido sin más.

Sus ojos se endurecieron cuando se volvió hacia los discípulos que estaban de pie junto a la puerta con expresiones culpables. Sabía que no habrían podido hacer nada cuando Lan Wangji no pudo. No estaba enfadado con ellos, sólo tenían que encontrar a su hermano lo antes posible.

"Vayan a informar a todos los demás que Wei Wuxian ha desaparecido. Quiero que se envíen grupos de búsqueda inmediatamente. Tenemos que encontrar a mi hermano como sea".

Los discípulos sólo asintieron con la cabeza y salieron corriendo. Sólo quedaron Jiang Cheng y Lan Wangji dentro de la habitación.  Aunque el líder de la secta Yunmeng Jiang sabía que el Segundo Jade ya debía haber buscado pistas, todavía quería verlo por sí mismo. También necesitaba algo que le distrajera del miedo helado que sentía en sus entrañas, el miedo a no volver a ver a su hermano.

Fue en ese preciso momento cuando Jiang Yanli entró en la habitación y se detuvo en el centro de la misma, mirando a su alrededor. Parecía más confundida que otra cosa y Jiang Cheng se preguntó si tal vez no se había enterado todavía de que Wei Wuxian había sido secuestrado. Desde luego, no parecía estar fuera de sí por el miedo o la preocupación.

"¿Qué ha pasado, A-Cheng, Lan Wangji?", preguntó en un tono suave, con un poco de nerviosismo e incertidumbre en su voz.

Sorprendentemente, fue el Segundo Jade quien habló primero: "Wei Ying ha desaparecido".

Algo en esa afirmación no le sentó del todo bien a Jiang Cheng. El discípulo que había venido a informarle dijo claramente que Wei Wuxian había sido secuestrado, pero ahora parecía más bien que Lan Wangji pensaba que se lo habían llevado, pero no estaba completamente seguro.

Jiang Yanli debió captar este sutil indicio e hizo otra pregunta que el líder de la secta Yunmeng Jiang probablemente debería haber dado antes de empezar a estar fuera de sí por la preocupación: "¿Sabes lo que ha pasado?"

Lan Wangji negó con la cabeza. Jiang Yanli asintió y miró a su alrededor: "No parece que hubiera nadie aquí, ¿es posible que A-Xian se haya ido por su cuenta? Llevaba tiempo queriendo salir de su habitación. ¿Quizás había ido a dar un paseo o algo así?".

La voz de Jiang Yanli sonaba agradable, no demasiado preocupada. Ahora que Jiang Cheng miraba con atención a su alrededor, no veía nada fuera de lo normal. Había un desorden, pero eso era bastante normal para su hermano, especialmente si había estado buscando algo. Pero no había señales de lucha, ni cosas rotas o destruidas, ni muebles volcados. Le parecía improbable que su hermano no se hubiera defendido en caso de ataque. Probablemente Jiang Cheng había exagerado.

Jiang Yanli parecía haber llegado a la misma conclusión que él: "¿Se ha llevado la flauta?"

Jiang Cheng fue inmediatamente al pequeño armario donde él mismo había puesto las armas espirituales de Wei Wuxian, las dos. No había estado seguro de si debía poner allí también a Suibian, no quería herir a su hermano mientras le recordaba el hecho de que ya no podía empuñarla. Pero al final, decidió guardarlos juntos. Sabía que Wei Wuxian tenía un gran vínculo con su espada y que, probablemente, no le gustaría que Suibian se perdiera durante la guerra.

Y efectivamente, cuando abrió el armario, se dio cuenta inmediatamente de que faltaba una de las armas. Sin embargo, no era Chenqing como él y su hermana habían supuesto. La espada había desaparecido.

"Ese idiota", murmuró Jiang Cheng en voz baja para que nadie más lo oyera, "¡preocúpate de ti mismo por una vez, quieres!".

Tenía claro por qué su hermano cogía la espada en lugar de la flauta. Al parecer, todavía tenía la impresión de que tenía que salvar la cara de la secta Yunmeng Jiang. ¿Era posible que incluso supiera del ultimátum que le había dado el resto del mundo de cultivo sobre la prohibición de usar el cultivo demoníaco? ¿O simplemente no quería seguir usándolo cuando casi le había costado la vida?

Sea como fuere, Wei Wuxian se encontraba ahora caminando por el Muelle del Loto, sin ser visto y sin un arma para protegerse, un objetivo perfectamente indefenso para un secuestro o asesinato.

Jiang Cheng salió furioso, buscando al discípulo más cercano. Cuando encontró uno, la detuvo y le ordenó: "Dejen de buscar a Wei Wuxian fuera del Muelle del Loto, está en algún lugar de aquí. Dile a todos que lo encuentren y le hagan compañía mientras me informan de su ubicación. ¡Rápido!"

El Líder de la secta Yunmeng Jiang no podía estar totalmente seguro de que su hermano no hubiera salido de las puertas del Muelle del Loto, pero tenía una corazonada. Sospechaba que si Wei Wuxian quería irse del todo, también se habría llevado su flauta. Al igual que la espada de un cultivador era su mejor defensa y una fuente de su fuerza y tranquilidad, lo mismo ocurría con Chenqing para Wei Wuxian.

Debía estar en algún lugar y tenían que encontrarlo rápidamente. Antes de que los espías de Jin Guanshan o Jin Guangyao lo hicieran.