El significado de protegerte con mi vida

Capítulo 74: Desviar la atención

Jiang Cheng ya estaba harto de los alardes de la Secta Lanling Jin. Ni siquiera habían hecho tanto durante la guerra, y lo que habían hecho, había sido sólo obra de Jin Zixuan, no de Jin Guanshan. Así que el líder de la secta Lanling Jin no tenía nada que presumir en primer lugar. Esto hacía que Jiang Cheng se enfadara mucho. Aunque, supuso, era mejor que sacar el tema de su hermano.

Y tal como había temido, una vez más, el tema se acercaba peligrosamente a su hermano: "... mis hijos se habían distinguido durante la batalla final. Jin Zixuan luchó con valentía y ayudó a conseguir la victoria que ahora celebramos, y Jin Guangyao rescató a Wei Wuxian y aseguró el hierro de Yin para que no fuera utilizado contra nosotros. Así que..."

Jiang Cheng ya no tenía paciencia. No quería arriesgarse a que ninguno de los cultivadores presentes empezara a pensar en su hermano en una frase junto con el hierro Yin. Sería una combinación muy peligrosa. Los rumores que habían circulado por el campo durante la guerra y después de ella eran demasiado vívidos en la mente de todos. Podría poner a todo el mundo del cultivo en contra de su hermano. Y Jiang Cheng no podía permitirlo.

Así que intervino rápidamente. Se levantó de su asiento y se inclinó ante Jin Guanshan, asegurándose de no apretar demasiado los dientes: "Líder de la Secta Jin, estabas hablando de tus dos hijos. Pero no pude dejar de notar que uno de ellos falta a tu lado..."

Dejó el final de la frase en la nada, dando a entender que era una pregunta. Lo que en realidad no era, ya que sabía perfectamente dónde estaba Jin Zixuan en ese momento. Sólo quería interrumpir el discurso y dejar que los cultivadores presentes se preguntaran por qué el heredero de la secta Lanling Jin no estaba aquí con ellos, celebrando el fin de la guerra igual que el resto.

Parecía haber funcionado porque una oleada de murmullos resonó en la sala del banquete tras sus palabras y Jiang Cheng tuvo que ocultar una sonrisa de satisfacción que amenazaba con aparecer en sus labios.

Fue Jin Guangyao quien habló, su voz tan dulce como siempre, estaba haciendo que Jiang Cheng tuviera náuseas. "Es cierto que el Joven Maestro Jin no puede asistir a esta reunión, ya que se encuentra indispuesto en estos momentos. Ha sufrido heridas en la batalla que requieren tratamiento. Estoy seguro de que podrá unirse en breve".

Jiang Cheng vio cómo Jin Guangyao hacía un gesto con la cabeza en dirección a los discípulos de la Secta Lanling Jin y cómo uno de ellos se escabullía de la sala de banquetes. Se alarmó de inmediato; esto no era bueno. Si alguien buscara al heredero de la secta Lanling Jin, se daría cuenta rápidamente de que no estaba en ninguna parte. Y seguramente no tardarían en sumar dos y dos y entender que el resto de las fuerzas de la secta Yunmeng Jiang, incluyendo a Wei Wuxian, ya no estaban aquí.

Jiang Cheng tenía que hacer algo. Preferiblemente, algo que sorprendiera tanto a los demás que ya no pensaran en Wei Wuxian.

Hizo un gesto a los discípulos de la secta Yunmeng Jiang a sus espaldas para que siguieran al discípulo de la secta Lanling Jin y le impidieran descubrir al cultivador demoníaco desaparecido. Sólo podía esperar que alguno de ellos lo entendiera y que hiciera lo posible por salvar la situación. Sin embargo, no podía comprobar nada si no quería ser descubierto, sólo podía seguir como si nada.

Pensaba mucho en lo que podía hacer para sorprender a todos. Y había encontrado justo lo que necesitaba. Ni siquiera era tan difícil en realidad, sólo muy poco convencional.

"Pueden buscar a Jin Zixuan todo lo que quieran; no lo encontrarán en su tienda. Mi hermana y él decidieron renovar su compromiso y se han declarado sus sentimientos con toda claridad, así que él ha estado cerca de las tiendas de la secta Yunmeng Jiang. Mis padres ya estaban de acuerdo. Sé que no es muy habitual, pero me gustaría pedirle al líder de la secta Jin su bendición también. Fue bastante repentino, así que asumo que el Líder de la Secta Jin aún no había escuchado las noticias..."

Toda la sala se sumió en un sorprendente silencio y todas las miradas se volvieron hacia Jin Guanshan a la espera de su respuesta. Jiang Cheng sabía que era un plan incrédulo el que había ideado, pero realmente no había tenido muchas opciones. No sólo había captado la atención de todos, sino que también había conseguido alejar sus pensamientos de Wei Wuxian, el compromiso de Jin Zixuan con Jiang Yanli era un tema mucho más interesante después de todo. Significaría una alianza entre dos grandes sectas y un aumento del poder compartido entre ellas.

Jin Guanshan parecía muy disgustado aunque intentaba ocultarlo. Estaba claro que no era muy favorable a la idea. Y Jiang Cheng podía entenderlo, él era el Cultivador Jefe ahora, no tenía necesidad de aliarse con alguien tan débil como la Secta Yunmeng Jiang. Probablemente quería utilizar a su hijo para conseguir aliados de otro partido más influyente.

Sin embargo, si declinara ahora, no se vería bien, no después de la declaración de Jiang Cheng de que Jin Zixuan y Jiang Yanli ya habían dado a conocer sus sentimientos hacia el otro. ¿Quién querría separar a dos jóvenes enamorados? Eso sería simplemente cruel.

Jin Guanshan debió darse cuenta de esto también porque ahora estaba apretando la mandíbula con fuerza, casi hasta el punto de que Jiang Cheng temería por sus dientes.

Sin embargo, fue Jin Guangyao quien habló: "Líder de la Secta Jiang, diría que esas palabras están un poco fuera de lugar. Y ni el Joven Maestro Jin ni la Doncella Jiang están aquí para testificar..."

No tuvo tiempo de continuar porque Jiang Cheng le interrumpió: "Por supuesto, Joven Maestro Jin. Por eso quería presentar un acuerdo de compromiso oficial. Y, por supuesto, puedes consultar a Jin Zixuan sobre sus sentimientos cuando te convenga".

Jin Guangyao se inclinó, ocultando rápidamente su expresión agria. Tras varios segundos de silencio, la sala del banquete estalló en vítores y todos quisieron brindar por la nueva unión.

Jiang Cheng se concedió una pequeña sonrisa que ocultó en su copa. Han ganado, al menos por ahora. Era incluso matar dos moscas de un tiro: ahora nadie hablaría más de Wei Wuxian con su atención desplazada hacia un matrimonio por preparar y, al mismo tiempo, acababa de asegurar el futuro de su hermana y Jin Zixuan.

Se sintió encantado cuando captó el pequeño asentimiento de su padre en su dirección. Los ojos de Jiang Fengmian estaban llenos de orgullo y el pecho de Jiang Cheng se derretía por dentro. Sin embargo, quería que toda esta farsa terminara ya para que él y su padre pudieran partir también hacia el Muelle del Loto lo antes posible. Quería comprobar cómo le iba a su hermano.