Se encontraron sin saber que les brindaría el futuro.
ADVERTENCIA: Es mi primer ff, así que la narración puede llegar a ser horrenda.
Avisos:
-Intento de "comedia", un poco sobre fantasía, mitología y más.
-Capítulos cortos.
-Jungkook+Jimin
-Menció...
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-Bien- habló Yoona llamando la atención de ambos padres- Jimin ¿Me darías permiso de revisar el estado del pequeño?- le preguntó retirándose los guantes ensangrentados al terminar de retirar la placenta y poniéndose unos limpios.
-Eh, claro- contestó retirando al niño de su cuello y dándoselo a la mujer frente a él quién lo recibió de manera delicada entre sus brazos.
Con ayuda de Jungkook colocó una toalla limpia en la cama y sobre ella colocó al niño teniendo cuidado con su cabecita.
-Veamos pequeño ¿Qué más sorpresas tendrás para mi?- le preguntó al niño con una sonrisa- Ya me has dado las suficientes el día de hoy- comentó haciendo reír a ambos padres quienes miraban atentos los movimientos de la doctora.
-Su llegada es más que mil sorpresas- comentó Jungkook a la mujer.
-Lo es, era casi imposible que sobreviviera pero sorprendentemente lo hizo, solo hay que asegurarnos de que todo esté bien para que lo siga haciendo- contestó Yoona moviendo las piernitas y brazos del pequeño asegurándose de que sus capacidades motrices estén más que bien.
Siguió por revisar las espalda del pequeño y tocó varias partes para ver que sus terminaciones nerviosas funcionaran de manera correcta, continuó por revisar los ojitos del niño y que no hubiera ninguna deformidad.
Al terminar su revisión de campo levantó la cabeza con una sonrisa y miró a Jimin- Al parecer todo está perfecto físicamente, si me permiten tendré que sacarle sangre para hacerle unos estudios de laboratorio para asegurarnos que todo funcione bien.
Al recibir el afirmativo de los padres del pequeño la mujer sacó un catéter delgado y pinchó al niño haciéndolo llorar, eso preocupó a Jimin pero se mantuvo en su lugar pues que sintiera dolor era una buena señal.
-Muy bien- dijo la mujer guardando la muestra de sangre- Me llevaré la placenta para asegurarme de que todo esté bien y vendré un poco más tarde para sacarle sangre a la pequeña y a ti Jimin- tomó al niño en brazos y se lo acomodó a Jimin en el pecho- Es bueno que los tengas piel con piel los primeros días, dales pecho y pónganles un pañal, cuando defequen me avisan para sacar una muestra de eses ¿Si?
Al recibir la afirmación miró a los niños dormidos en los pechos de sus padres y la mujer les sonrió antes de salir para darles un poco de tiempo a solas después de todo el ajetreo.
Cuando miraron a la mujer desaparecer a través de la puerta ambos suspiraron y miraron con amor a sus hijos.
Sus hijos.
Nunca imaginaron que vendría uno más de lo que se contemplaba pues en las ecografías nunca apareció ni tampoco dio señales de vida ya que nunca se movió, no como su hermana quién era muy inquieta.
-Son hermosos- dijo Jungkook con lágrimas en los ojos- Gracias.
-¿Gracias?- preguntó Jimin un poco confundido ¿Por qué le agradecía?
