Agitada, Ryujin se detuvo a unos metros de la puerta de emergencia tomando respiros pesados. Rosie corrió hasta ella lanzando miradas a sus espaldas, solo para asegurarse que no las hayan seguido.
A pesar que estaba preocupada, por dentro la situación le parecía totalmente divertida, además de sentirse satisfecha por lo sucedido en el interior.
—¡Cielos! Creí que no iba a funcionar. Esa mujer montó todo un show allá adentro.
Su hermana le lanzó una mirada, riéndose apenas por su cansancio y se tocó la cabeza adolorida.
—¿Estás bien?
—Sí, ese hombre y sus reflejos. Alcanzó a golpearme, ¿lo hice bien?
—¿Bromeas? Esa jugada fue maravillosa, hermana.
—¿Viste si ellos...? —Rosie negó y Ryujin bajó sus hombros desanimada—. Rayos.
—Papá iba a seguirte, espero que haya funcionado.
Ryujin miró al cielo considerando que el golpe valió la pena hasta ese momento, las estrellas lucían brillantes entre ese cielo oscuro y la luna sonriéndole de manera cómplice.
Bajó la mirada para ver que Rosé también miraba las estrellas, tal vez no era la única que sentía que esa noche le brindaba un buen presagio. Forzosamente Ryujin debía volver a la habitación antes que Jin y Rosie volvería a la fiesta fingiendo no saber nada de lo ocurrido.
No era lo más conveniente, pero sin importar cuanto fuera su deseo de presenciar el reencuentro de sus padres, debían dejarlo fluir, ya habían manipulado lo suficiente para hacerlo parecer una casualidad.
Ryujin se despediría de Rosie, cuando por encima del hombro de su hermana se percató de la silueta que salía por la puerta de emergencia. No quiso quedarse de pie para averiguar quién era, apresuradamente tomó la mano de Rosé para hacerla esconderse detrás de unos arbustos que decoraban los alrededores de la piscina.
—Ouch —se quejó Rosé al impactar contra el suelo.
Ryujin tapó su boca al escuchar voces. La niña llevó el dedo índice a sus labios, indicando silencio. Asomó su cabeza con precaución distinguiendo a Namjoon tratando de alcanzar a Jin que se negaba a girar ante sus ruegos.
Rosie que se había quedado sentada en el pasto, vio la decepción de su hermana cubrir su rostro, llevándose consigo toda ilusión.
—Son ellos —aseguró.
¿Y qué hacemos escondidas? Deberíamos salir.
—No —comentó desanimada—, papá está huyendo.
Rosé tragó duro. Ya comenzaba a oír a Namjoon tratando de detener a Jin, sus voces sonaban más cerca haciendo que su corazón latiera nervioso. Ryujin volvió a esconderse llevando las piernas a su pecho y abrazándolas, por lo que el arbusto le permitía ver, aún faltaba una distancia considerable para que estuvieran frente a ellas.
Con esas grandes zancadas, las niñas estarían presenciando un amargo reencuentro en tan solo segundos.
—Jin, por favor espera.
El de cabello castaño se detuvo de golpe sin saber la razón. No valía la pena huir o tratar de esconderse si el otro ya lo había visto; Namjoon iría a buscarlo sin dudar. Pensando en su hija, prefirió tener que enfrentarlo de una vez por todas y aclarar las cosas.
Con temor se dio la vuelta chocando con un rostro que la noche y la luz de la piscina le permitía ver. Delante de sus ojos, había un hombre más fornido, con el cabello más largo, era guapo...mucho más que hace once años.
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TRICKS OF DESTINY ||NAMJIN
FanfictionRyujin y Rosé asisten a un campamento de verano, desconociendo la extraordinaria aventura que les espera. Han creado una rivalidad por su increíble parecido y un castigo por una travesura les obliga a convivir. Al compartir sus historias se dan cuen...