TRICKS OF DESTINY ||NAMJIN

10. CARA A CARA.

El camino se tornó tan silencioso en el interior de la camioneta, no se parecía a la emoción que ambos estuvieron compartiendo desde temprano.

Durante la visita al trabajo de Namjoon, este le contaba sobre sus futuros planes. Se atrevió a preguntar sobre cómo funcionaba todo, a lo que su padre le respondió explicando con detalle y de un modo sencillo el procedimiento que llevaba la realización de un vino, desde la cosecha hasta que la bebida fuera vertida en el recipiente de cristal.

Al principio, la pregunta le pareció arriesgada, su hermana muchas veces debió preguntárselo, pero los adultos sabían lo curiosos que eran los niños en ocasiones. El mundo de los mayores era confuso todavía y muchas de las preguntas respondidas tenían que volver a explicarse hasta que tuvieran la capacidad de entenderlo.

Un adulto comprensivo no se molestaría en contestar y el que encajaba perfecto en ese concepto era Kim Namjoon.

Por más que a Rosie le causara curiosidad probar alguno de los vinos que estaban listos, se resistió, su padre Jin seguramente la reprendería de solo pensarlo y Bogum lo alentaría a que la dejara probarlo. Uno de los empleados le había ofrecido un poco, pero su padre le negó aquello rápidamente.

—No lo creo, por ahora esta jovencita no debe pensar en esta clase de cosas. Tiene que concentrarse solo en la escuela y pensar en cuál es la posible universidad a la que irá, claro que aún es muy pronto para que lo sepa.

—Tu padre tiene razón, ya habrá un día en que puedas gozar de esto. Disfruta tu infancia como se debe Rosie, luego es posible que la extrañes —el sujeto le guiñó un ojo de manera amistosa a lo que la niña sonrió.

Todo indicaba que volverían que ella y su padre volverían a casa con una sonrisa en sus rostros, formando recuerdos que no se iban a borrar nunca de su mente cuales fueran los resultados de su travesura. Rosé jamás imaginó que, tras recibir una alarmante llamada, la felicidad y el buen humor de su padre se esfumaría.

Luego de colgar empezó a ponerse distante y dar respuestas vagas que en su lugar Gavin contestaba al reconocer lo irritado que Namjoon estaba. La niña no pudo evitar pasarlo por alto ya que su sonrisa estaba siendo forzada, esperaba que conforme el tiempo pasara, el buen humor de hace un momento volviera, pero lastimosamente seguía igual.

Namjoon frotaba su barbilla manteniendo la mano libre sobre el volante, su mandíbula estaba tensa, dejando a Rosé sin opciones para hacer del ambiente más armonioso.

A pesar de que ahora el hombre no le dirigiera la palabra, Rosie estaba feliz. Namjoon sabía mucho de todo y la parte favorita de su paseo hasta ahora, fue ese recorrido que dio a su lado por los viñedos sobre la yegua que pertenecía a su hermana.

Estuvo aterrada cuando la vio y más aún cuando tuvo que montarla. Agradeció que Namjoon permaneciera a su lado, motivándola a no temer, como si olvidara que se trataba de Ryujin. Por ese breve momento Rosé pudo sentirse ella misma, bienvenida.

Namjoon era excepcional en su trabajo y en su día a día, por no decir que también era un fantástico padre. Repasar toda sensación alegre le hizo percatarse que habían llegado a casa, en donde había mucho por hacer, desde cocinar algo con Elaine, pasar tiempo en la piscina, hasta las caminatas alrededor de la residencia que a Namjoon le gustaba hacer como una rutina.

Rosie cerró la puerta de la camioneta una vez que bajó. Rodeó el vehículo para reunirse con su padre, que siempre le tomaba la mano para entrar a la casa juntos.

—¿Cómo estuvo el paseo?

Preguntaría Elaine que los esperaba con un rico bocadillo para la merienda. Sin embargo, esta vez fue dolorosamente diferente y a pesar de ser solo pocos días a su lado, el cambio y su tono tan gélido le lastimó.