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CAPÍTULO 21: LLEGADA FASTIDIADA

La noche había llegado, apenas habían llegado a la ciudad central de Marleos al suroeste de Labata, era de las ciudades más grandes en todo el reino por lo cual decidieron alquilar habitaciones en una posada, al encontrar una que aparte ofrecía variedad de comidas decidieron quedarse ahí.

Alquilaron tres habitaciones, las gemelas compartieron habitación por costumbre, aunque la mayor de ellas se escabullo a la habitación de la albina para conversar un poco antes de dormir y preguntarle si todo iba bien en el viaje, casi se queda dormida junto a ella pero, a pesar de que le hubiera gustado hacerlo, volvió con su hermana aun con mucho sueño.

Al despertar optaron por desayunar ligero para continuar el camino, se suponía que al llegar la noche llegarían a Labata, enviaron a Pritt al palacio junto a las cartas escritas por las gemelas y emprendieron camino, conforme pasaba las horas la charla se hacía más amena, Lilinet a presión de su hermana fue a conversar con el muchacho, con la excusa de qué "si me caso con él lo verás toda tu vida" acepto ir con él.

- Shin me envió.- dijo apenas apareció a su lado

- entiendo.- dijo el muchacho para dar paso a un silencio incómodo

- entonces... ya habías estado por aquí? .- preguntó con desinterés.

- si, con mi padre.- respondió de la misma forma.

Lilinet no sabía qué más decir, suponía que su padre ya le había dado todas las advertencias al muchacho, y realmente todo era demasiado incómodo como para seguir, Las otras dos muchachas notaron la incomodidad y decidieron intervenir.

- ¿Hay algún atajo por estos lados?.- preguntó la mayor sonriendo

- si, bueno estamos yendo por el atajo.- dijo el muchacho

- Cariño, qué tal si paramos a comer algo, estoy hambrienta.- dijo sonriendo Shinesi

- Claro, lo que quieras.- dijo sonrojado por el apodo.

Todos pararon, dejaron a los caballos descansando a un lado, Lilinet creó una manta y almohadas que cubrieran el duro suelo y la Albina sacó algo de fruta de los árboles alrededor para comer.

- Esto se ve delicioso, gracias Adeena.- agradeció la gemela mayor.

- De nada lindura, lo que sea por ti.- coqueteo la mayor.

- No crees que a pesar de todo, esto es muy lindo.- dijo la menor hacia su pareja.

- Si, todo es muy agradable, gracias.- solo respondió Asher.

- Asher no seas tan tímido, ellas no muerden.- reprocho la peli lila

- La verdad yo si.- dijo seria Lilinet

- Te gusta morder eh?.- bromeo Adeena haciendo sonrojar a la pelirosa

- Lo siento por ella, es algo molesta, pero es buena persona.- se disculpó por su hermana Shinesi

- Está bien, solo, ya sabes..- respondió Asher.

- ¿escondes algo acaso? ¿Qué es lo que quieres que no veamos?.- preguntó con brusquedad la gemela mayor

- Nada, no hay nada que ocultar.- respondió nervioso el Romanoff

- Más te vale niño, tu novia es muy importante en todo el reino, un error y tu cabeza rodará por todo el reino como advertencia a todos.- declaró intimidante Lilinet.

- Lilinet!! ¡¿por qué dices esas cosas?!tu idiota!.- grito la gemela menor para lanzar una almohada a su gemela

- Es la verdad, crees que dejaré pasar alguna cosa, eres mi hermanita.- respondió igual Lilinet

- Me llevas 10 minutos tarada!! no necesito que me cuides!!.- grito tambien la peli lila

- Y quien habla de necesidad?!. lo hago porque se me da la gana, tu harías lo mismo y lo sé.- se defendió la pelirosa

- já, acaso me vez molestando a Adeena cada que te coquetea!.- grito por ultimo Shinesi

Un silencio largo se formó, Lilinet estaba sonrojada al máximo, no tenía idea de que eran tan obvios los coqueteos con la mayor, solo se paro y camino algo lejos, estaba avergonzada y necesitaba un tiempo fuera, Shinesi por su lado sabía que se le fue de la manos, no quería decir eso pero al momento de molestarse solo salió, ahora iría a esperar a que su hermana saliera de su burbuja para disculparse y seguir.

Después de una hora las gemelas habían arreglado su pequeño problema, Lilinet aún se sentía avergonzada pero era consciente de que se lo merecía, el viaje había continuado en un silencio tranquilo, Adeena también se encontraba algo avergonzada, era consciente que solía ser muy descarada pero no había notado que tanto, Asher por su parte solo se encontraba callado y atento a todo el camino. Con el pasar del tiempo el pequeño grupo se volvió a dividir en parejas, siendo Asher y Shinesi quienes iban al frente, cada par conversando de algún tema al azar y riendo individualmente de lo que hablaban, a pesar de la marcada distancia se sentía tranquilo.

Al estar cerca a Labata, Adeena sintió el ambiente pesado, advirtiendo que conforme se fueran acercando estuvieran más atentos alrededor, para cuando estuvieron cerca pudieron ver guardias cuidando la frontera, decidieron que Asher hablara para que entraran, pero el permiso fue negado y una amenaza de ser llevados a la cárcel de la ciudad fue dada.

Las gemelas se miraron y decidieron hacer un escándalo para así ser llevadas al interior de la ciudad.

El escándalo se armó y los guardias rodearon a los jóvenes con sus armas para dirigirlos hacia la cárcel, lanzando un disparo al aire el camino hacia este empezó.

Pritt, quien se encontraba en el bolsillo de Lilinet con la forma de un pequeño hámster fue despertado, escucho la indicación y salto sin más, se transformó en una gran bestia de 4 metros, llamando la atención de todos los soldados, de pronto una capa rosa semitransparente lo rodeo a forma de escudo y los jóvenes huyeron bosque adentro. cuando se encontraron lo suficientemente lejos, el sonido inaudible de un pequeño silbato fue realizado por Shinesi llamando a Pritt, quien unos minutos después llegaría junto a ellos en la forma de una mariposa, Lilinet deshizo el escudo y el pequeño pudo volver a dormir en el bolsillo de una de sus dueñas.

Tenían que pensar en cuál sería su siguiente paso, tenían una vista a la ciudad, la cual parecía sombría, sin más algo en la menor decía que si iban estarían bien, pero le daba miedo decirlo.