CAPÍTULO 53: VENGANZAS

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Lilinet por su parte, al ver sus hermanas iniciar su camino al baño, salió de esa casa, su barrera rodeaba toda la casa, no sería difícil encontrar a Raynett, empezó a caminar por los pocos alrededores disponibles, riendo internamente con la image...

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Lilinet por su parte, al ver sus hermanas iniciar su camino al baño, salió de esa casa, su barrera rodeaba toda la casa, no sería difícil encontrar a Raynett, empezó a caminar por los pocos alrededores disponibles, riendo internamente con la imagen de todos esos soldados controlados tratando de ingresar tan desesperadamente.

Unos metros después, Raynett salto frente a ella con una espada, tratando de herirla sin lograrlo, Lilinet estaba enojada por el secuestro de su hermana menor, si la pelirroja creía que saldría ilesa de esa situación estaba equivocada, ya sabía que la chica no era realmente fuerte y que habían tenido demasiado cuidado con ella. A ese punto para Lilinet era obvio que Raynett actuaba sin pensar y sin planear, improvisando y haciendo lo primero que llegara a su mente, sin considerar si resultaba mal para ella o para alguien más, por lo que la princesa debía acabar en ese instante, no la mataría solo para no mostrarse como una asesina frente a su hermana menor, pero si que desatará su furia con ella.

Una pelea comenzó, Lilinet con su sonrisa orgullosa no hacía más que enfurecer a la otra chica, quien en ese punto ya no sabía qué más hacer. ¿Realmente podría ganar a ese punto?, incluso si lograba vencer a la princesa frente a ella, ¿Cómo podría ganarle a una mentalista?. Fue cuando tuvo una idea, la princesa frente a ella se volvió débil frente a la niña, entendió que no la había atacada realmente frente a ella por no asustar a su pequeña hermana, por lo qué, si no podía evitar su muerte, al menos crearía una herida entre las hermanas difícil de curar.

Evitaba los ataque lo más que podía, pero el entrenamiento de la menor era bastante obvio, dejando algunos cortes en ella, trataba de volver al interior de su hogar, o de al menos lograr que las menores voltearan a verlas, todos decían que la segunda princesa era la más amable, no perdía nada intentándolo.

Ivelle escuchó todos los gritos, instintivamente queriendo salir por el balcón a ver qué pasaba, pero Shinesi la detuvo.

- Va a matarla ¿verdad? .- preguntó la niña.

- No lo hará, solo quiere capturarla.- respondió Shinesi.

- Tú podrías capturarla más rápido y con menos daños.- le dijo entonces.

Shinesi se quedó callada, sabía que la niña tenía razón, pero no podía evitar disfrutar de aquella venganza que su gemela tomaba por ambas, sufrieron mucho con la sola idea de aquella mujer lastimando a su hermana, aún se sentían culpables de que lograra capturar a la menor, sobre todo ella quien estaba tan cerca.

- Tienes razón Iv.- habló la mayor.- Yo podría hacerlo, pero esta vez no queremos ser apropiadas.- confesó.

- La odian.- entendió la niña.

- Si, solo mírate Iv, estas lastimada, puedo notar que no te has alimentado bien y esa mujer es un monstruo, lastimar a una niña inocente por diversión, y en cada metro hasta llegar a ti, estoy segura que lastimó a más niños y personas inocente.- contó.

𝑪𝑼𝑬𝑵𝑻𝑶 𝑹𝑶𝑻𝑶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora