Tloz- El Anhelo de una Sombra.

Capítulo 24: Memorias.

Un cielo oscuro cubría los alrededores, tan frío y tan tenebroso que aquellos que no pertenecen a esas tierras se ven incapaces de afrontar ese mundo con valor. Cohibiendose en su propia agonía. Las criaturas de la noche, nacidas del mundo oscuro, poseedoras de un maligno corazón se regocijaban de alegría viviendo en su estado natural, maldiciendo a aquellos pertenecientes al mundo de la luz y todo lo relacionado a sus diosas.
Así había sido para él también al inicio. Observar desde la posición más baja, sin ser capaz de sentir con su propio cuerpo la belleza y naturalidad del mundo opuesto al de la oscuridad. Siendo siempre inferior. Sin voz, ni sonido. Incapaz de pronunciar palabra alguna. Sin que nadie deseara voltear y observar a la sombra del heroe.

La primera vez que pudo tocar ese mundo lo llenó de caos. Todo siguiendo los deseos de su amo, Gufuu.
Shadow había arruinado la reputación del héroe mientras inecendiaba aldeas y hacia travesuras por doquier. Él se había convertido en alguien. Alguien a quien todos temían, pero aquel sentimiento en lugar de traerle disgusto, lo hacía sentir poderoso, pues por primera vez la luz se sometía ante las sombras. Pero...Incluso así, nunca fue suficiente y ese solitario y avaro corazón debía ser llenado con algo. Algo que ni siquiera él conocía.

Los ojos de la sombra observaban todo lo que el espejo de la oscuridad mostraba. Cada deseo mínimo escondido en su inconsciente era expuesto ante el reflejo de aquel artefacto y a pesar de que estaba al "alcance de sus manos". No era capaz de comprenderlo.

Ver las sonrisas felices de los clones del héroe de la espada cuádruple, al igual que los problemas y adversidades que enfrentaban juntos, incluyendo la superación personal de cada uno...No lo comprendía. Y ese corazón sólo se envenenaba y caía en el abismo eterno.

-¿Por qué a pesar de todo ellos continúan...?

No podía evitar preguntarse en ese entonces que era lo que motivaba a los héroes. Pues ni siquiera creía que la princesa Zelda era un motivo tan importante como él ignoraba.

-Esa mujer insolente..

Se refirió con ira cuando la princesa lo confrontó en el Palacio de los vientos. Cuando creía que él pertenecía aún al mundo de las sombras. Incluso en ese entonces su corazón dudaba: ¿Por qué debería ser él el villano cuando sólo era parte de la sombra del verdadero héroe?. ¿Su destino había sido escrito desde el momento en que fue creado?. El espejo de la oscuridad creaba un reflejó malvado de aquello que se prostraba ante el...Pero desde el comienzo, siempre dudó de su papel principal.

Él continúa sintiéndose sólo, pero ¿qué podría haber hecho?.

Cuando los cuatro Links fueron separados, Shadow vio allí una ventaja: Aliarse con el más listo de los chicos y llevarlo al lado oscuro para así hacer de la espada cuádruple un arma inútil y abrir paso a la conquista sobre Hyrule. Pero, ¿Por qué su corazón había sido tan ingenuo?. A pesar de que él no era un héroe...¿Por qué sus deseos se habían desviado?.
Shadow, cuando se alió con Vio busco traicionar a Gufuu y ser junto al de prendas violetas, los amos de ese nuevo mundo. Shadow no quería que lo héroes arruinaran aquello. No quería que Green estuviese vivo y Vio se apartara de su lado. Incluso, dejó su corazón sobre la mesa y expresó al par de colores más claros todo lo que sentía; las debilidades del mundo oscuro y más allá de lo que cualquier persona pudiese conocer. Fue ingenuo y cuando el reflejo mostró la traición Shadow se quebró y jamás se recuperó.

Aquello sólo había marcado el inicio de su propio fin.

Sólo piensa si él realmente quería morir o si lo hizo por honor...o por algo mas.

La luz dañó su cuerpo desde entonces. Los poderosos fragmentos provenientes de la espada cuádruple en su esplendor lo destruyeron, y sólo fue dolor y agonía lo que se apoderó de su esencia.