Cambiando El Destino.

#29

Rachel llamo a Katy para poder quedarse en su casa mientras buscaba un lugar donde vivir.

- Espero que todo le salga bien en especial a su hijo - dijo Dulce despidiéndose.

- Gracias por todo, Dulce cualquier cosa puedes llamarme a casa de Katy.

- Claro que si, señora cuídese mucho - abrazándola.

Gustavo salió a ver como el taxista guardaba las cosas de Rachel en el carro, verla marcharse le recordaba aquel momento doloroso de su relación pero por una parte se sentía aliviado de no tener mas nada que ver con esa mujer que le destrozo la vida.

- Este el final, Rachel- dijo.

- Así es, espero que encuentres la felicidad que yo no te pude dar mientras estuvimos casados se que un perdón no es suficiente por el daño que te hice pero quiero que sepas que me arrepiento, Gustavo.

- Gracias por tus disculpas...- Dijo con frialdad era obvio que no iba a perdonarla por ahora.

- Adiós...- le dijo antes de subirse al taxi.

Llego a la casa de Katy que la recibió con los brazos abiertos.

- Sabia que todo iba a terminar mal entre ustedes- Le había contado lo que había sucedido con Gustavo, ambas mujeres estaban sentadas en la sala de estar tomando té.

- Fue horrible enterarme de lo mala que era le hice daño a mucha gente e incluso a mis padres, ellos se cansaron de decirme que tenia que mejorar mi personalidad que eso no me llevaría a nada bueno.

- ¿Cómo te acuerdas de eso? ¿has recordado la memoria?

- No, pero hace unos días he estado recordando pequeñas cosas no todas.

- Eso quiere decir que pronto estarás bien.

- ¿Bien? Deseo no recuperarla, no quiero acordarme como era antes y de todas las vidas que arruine por mi soberbia.

- Amiga, ahora eres una persona diferente.

- Cambie porque sufro de amnesia.

- De todos modos has cambiado y para bien, ese hombre debes amarlo mucho ¿Por qué no lo llamas?

- No quiere verme, me dijo que iba a casarse con su novia.

- ¿Qué?- sorprendida- pero me dijiste que iban a volver.

- Ya vez eso también fue otra mentira, Ethan y yo no estamos destinados a estar juntos.

- Con esa cara de tristeza que tienes, se ve que aun lo quieres... Yo te conocí como una mujer luchadora que consigue lo que deseas porque no vas allá e interrumpes esa boda.

- ¿Estas loca?- riéndose- no podría hacer eso, aunque tengo un gran motivo.

- ¿Cuál será? Oh bendito ¿estas embarazada?- abriendo los ojos como platos.

- Si, me entere hoy... No se si decírselo.

- Obvio que si es el padre debe saberlo y ayudarte, ahora esta sola necesitas su apoyo.

- No quiero arruinarle su vida, fue muy claro expulsando de ella.

- Sea lo que sea, tiene que saberlo... Amiga, es un hijo las cosas cambiaron. Debes ir a Isla Cristal y decirle todo.

Ethan se estaba probando el esmoquin que iba a usar en su boda para los últimos detalles.

- Quita esa cara, Ethan cualquiera cae que ves de una boda iras a un velorio- bromeo su padrino y mejor amigo Ronny que es medico cirujano.

- En realidad no se si estoy haciendo lo correcto- mirándose al espejo.

- ¿Lo dices por Rachel? ¿La chica que sufría de amnesia?- Le había contado toda la historia.

- Si, pienso en ella todos los días aun la amo, después de todo lo que le dije dudo que quiera volver a saber de mí.

- Como dice el dicho: "Si amas a alguien, déjalo ir. Si regresa es tuyo. Si no regresa, nunca lo fue".

- Mejor cambiemos de tema, hablar de Rachel me pone peor.

Esa misma noche era su despedida de soltero, estuvo con varios de sus amigos la mayoría médicos, pero aun sentía un enorme vacio que nadie iba a poder llenar.

Una semanas después.

Había llegado el día de la boda, todos en la isla estaban a la expectativa seria un evento por todo lo alto.

Penélope vestía un hermoso vestido blanco, un velo larguísimo y con un bouquet de rosas rojas.

- Estoy lista para convertirme en la mujer de Ethan, me siento tan nerviosa y emocionada- sonriendo le dijo a sus damas de honor.

- Estas bellísima, cuando te vea seguro se va a enamorar mucho más de ti.

Por otra parte Ethan estaba arreglándose en su casa para salir hacia la capilla donde iba a casarse cuando tocaron la puerta de su habitación y fue abrir.

- Dios mío- sorprendido- ¿Qué haces aquí, Rachel?- era la ultima persona que esperaba ver.

- Quería verlo por mi misma, si en realidad vas a casarte con Penélope- le dijo pero por dentro se estaba muriendo por lanzarse en sus brazos, besarlo y decirle que iban a tener un hijo.