Pequeño GRAN Desastre ~ NamMin

13: ¿Cambiar De Opinión?

Los días siguen su curso, Jimin va a la universidad tarde como la mayoría de veces y Namjoon a su vez, siempre cuidadoso y organizado, va a trabajar, con la diferencia de que ahora mira hacia el cuarto piso con la esperanza de ver al ridículo chico de cabellos alborotado deseándole los buenos días.

Ese fin de semana, Namjoon tenía pensado trabajar en un proyecto nuevo que le fue encomendado. Pero sus planes fueron cambiados totalmente al recibir la visita de su adorable vecino.

—Hola, Nam.

—Hola Jimin.

—¿Tienes planes para hoy?

—¿Por qué?

—Es...que... Un amigo abrió un nuevo local de ropa de segunda mano y q-quería saber si me quisieras acompañar.

—¿Yo?

—¡Sí! Anda vamos, te vas a divertir.

—Uhmmm... Bueno.

—¿En serio? ¡Bien! Voy a cambiarme y bajo.

Jimin subió corriendo emocionado al ver que su vecino había aceptado su invitación, a quien le pareció interesante la propuesta y entró a alistarse también, el día estaba fresco pero no había salido el sol, el cielo con su tono azul grisáceo indicaba que pronto podría llover.

Namjoon decidió vestir con camiseta blanca, pantalón café claro, zapatos deportivos y un abrigo fino color negro. Peinó su cabello, cepilló sus dientes y ordenó un poco antes de que Jimin llegara, se sentía un tanto ansioso por el día que les esperaba, con él todo es una sorpresa.

Jimin por fin toca la puerta y vestía un bonito abrigo amarillo de rayas y pantalón azul, era muy chillón pero Namjoon ya se empezó a acostumbrar a su estilo.

—Iremos en el auto.

—¡Noooo! Caminemos mejor, el día está precioso.

—Pero puede llover y no quiero caminar.

—Aparte de gruñón, perezoso, anda, vamos caminando, así disfrutaremos mejor.

—Tsk..

Namjoon deja las llaves de su auto sobre el mesón y salen juntos del departamento, bajan las escaleras y como siempre, Jimin con una hermosa sonrisa y sus mejillas rosadas, se encontraba muy emocionado por este día.

—Cogeremos el bus para ir a comer primero, te llevaré a comer pollo frito.

—Jimin, ¿Es en serio?

—Pues claro, mamá siempre dice que barriga llena, corazón contento y al parecer siempre estás con hambre.

—Muy gracioso, está bien, vamos.

Caminaron a la parada para tomar el bus y se dirigieron al restaurante donde Jimin come su pollo frito antes de llegar a la universidad, Namjoon al principio se rehusaba rotundamente a hacerlo, pero el chico pudo convencerlo mirándolo con ojos de cachorro abandonado. El más alto siempre terminaba cediendo. Ese chico siempre ganaba.

Entraron al lugar, el olor a pollo frito invadía cada rincón, encontraron una mesa y se sentaron. Jimin pidió una porción de pollo frito con diversas salsas, Namjoon como acompañante pidió kimchi.