Hechizo 12

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La sonrisa coqueta del joven mozo al ver al más alto acercarse a la barra, le molestó. Llevaban en el bar poco más de cuarenta y cinco minutos y era la segunda vez que Win Metawin tenía que levantarse de la mesa para reclamar un error en su orden.

Y así como en la primera oportunidad, el muchacho no sólo no escondió su admiración, sino que coqueteó con total atrevimiento, pasando la mano por su cabello y mostrando la perfecta hilera de dientes. Para colmo, su vecino, igual que hace un momento, lejos de rechazar el gesto, ya sea por cortesía o fingida ingenuidad, le devolvió la sonrisa.

¿Acaso no sabía Metawin que sonreírle a alguien que te coquetea es corresponder? Y acaso, ¿no recordaba que estaba en una cita? Le molestaba y mucho. Por Pete, claro. No era por él, por supuesto que no.

— Es la segunda vez que se equivoca con su bebida —refunfuñó, bebiendo de un solo trago todo el contenido de su copa—. Un mozo no debería coquetear así con los clientes, es des...

— Si tanto te molesta, debiste haberlo acompañado a reclamar —soltó Pete, interrumpiéndolo.

— No es mi cita —renegó.

— No me digas que no has notado que tampoco es la mía.

Bright colocó sus brazos en cruz e hizo un mohín en respuesta, mientras miraba de reojo como su vecino conversaba con el mozo. Exhaló con resignación cuando lo vio sonreírle otra vez y volteó el rostro, disgustado. ¿Cómo podía alguien sonreír así? ¿Cómo podía alguien verse tan intimidante cuando estaba serio y tan inofensivo cuando sonreía?

— ¿Dónde está Prem? —preguntó Pete de repente.

— Olvidó su teléfono en el auto.

Ante su respuesta, su amigo lo observó en silencio, estudiando sus gestos.

— ¿Y qué tal? ¿Te agrada? Es guapo, ¿verdad?

— Lo es.

Tras decir aquello, Bright se quedó en silencio una vez más, antes de mirar otra vez a Metawin y fruncir los labios, arrugando el entrecejo. Pete sonrió.

— ¿Te cuento algo?

— ¿Uhm?

— La cita de cuatro no fue idea mía —dijo sonriendo.

— ¿Qué?

Pete se acercó para hablarle en confidencia cuando alguien de repente apareció a su lado, tocándole el hombro.

— ¿Lui? —saludó su amigo con sorpresa, mirando al hombre delante de él—. No pensé encontrarte aquí, ¿Cómo estás? No supe nada de ti después de la fiesta de Earn.

— Tuve mucho trabajo, mi jefe es un explotador.

— Igual que el mío, ¿y como están los demás?

— Bien, muy bien, Milk no ha dejado de preguntar por ti, ¿no quieres verla? Estamos en la mesa de allá —invitó, señalando a lo lejos una mesa con varias personas riendo —. ¿Vamos? —lo animó, tomándolo por los hombros, pero mientras lo empujaba notó a Bright—. Oh, perdona, que idiota soy, has venido con alguien, él es... —interrogó con la mirada—. ¿Tu novio? —. Pete negó, controlando una risa.

— Es mi amigo—respondió—. Bright, te presento a Lui, un...amigo.

— Hola.

— ¿Quieres venir? Todos los amigos de Pete son bienvenidos.

— Oh, no, lo siento, he venido con alguien —respondió, buscando disimuladamente con la mirada a Win, quien ahora había dejado de conversar con el mozo y desde la barra lo observaba fijamente.

Sortilegio #Brightwin #SarawatTineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora