Silenció Mortal (Komi-San)

capitulo 19

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La Calma antes de la Tormenta.
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Era una tranquila mañana en la cuidad de Tokyo, para ser más específicos, en el aeropuerto internacional Haneda.

Jeanne: te extrañamos Hito-kun.

Dijo, mientras se despedía de su hijo con la mano.

Hitomi: cuídate Onii-chan.

Dijo, para después romper en llanto.

Omojiri: adiós Hito-kun, llamanos cuando llegues.

Dijo entre llantos, para después ocultar su cara en el hombro de Jeanne.

Hitohito: bye chicas, las extrañaré.

Dijo, despidiéndose de su familia, pero derrepente, empieza a temblar.

Hitohito: q...que?

Dijo asustado, mientras se intentaba mantenerse en pie.

En eso, se habré una gran grieta en frente de Hitohito, de la cual salen varias manos.

Hitohito: pero que demo.....

Dijo, pero es interrumpido por una de las manos, la cual agarra a Tadano del tobillo.

En eso, varias manos más, empiezan a agarrar a Hitohito, con el propósito de arrastrarlo hacia la grieta de donde salieron.

Hitohito: sueltenme, hijos del diablo.

Dijo, mientras ponía resistencia a las manos, las cuales cada vez lo arrastraban con más fuerza.

Acto seguido, Hitohito es derribado por la fuerza de las manos, y es arrastrado lentamente a aquel abismo.

Hitohito: a...ayuda.

Dijo desesperado, para después.

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Tadano se despierta de golpe, sudando frío, y con la respiración agitada.

Tadano: (suspira) solo fue un sueño.

Dijo, mientras se calmaba.

Acto seguido, el joven pelinegro se levanta de su cama, y se alista para ir a su último día de instituto.

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Era un día tranquilo para Tadano Hitohito, el cual caminaba tranquilamente hacia su instituto, mientras tenía escuchaba música, con sus audífonos puestos.

Tadano: ' que extraño, normalmente me encontraria con alguien a este punto '

Dijo extrañado, pero en eso, este siente como alguien le quita sus audífonos.

Najimi: te estoy llamando como loca desde hace 10 minutos, y por andar con estas cosas no contestas.

Dijo molesta, mientras le jalaba la oreja a su amigo, en forma de castigo.

Tadano: oye para.

Dijo adolorido, para después safarse del agarré de Najimi.

En eso, Komi y Rumiko, se acercan a ambos amigos.

Rumiko: buenos dias chicos.

Dijo sonriente, mientras saludaba a ambos con su mano.

Komi: buenos días.

Dijo sonriente.

Tadano: ves Najimi, así deberías saludar a la gente.

Najimi: aja si, bueno chicos, alfin es viernes.