¿Están listos chicos? (¡Si, capitán, estamos listos!) ¡No los escucho! (¡Si, capitán, estamos listos!) UHHHHHH!!!!
Ok, ok. Ya basta. Pero en serio, ¿están listos? Aquí comienza lo bueno *risa malvada* ¡Disfruten!
Su día en el consultorio había terminado siendo más largo de lo que esperaba. Las consultas se alargaron más de lo previsto y por poco ha pensado que iba a dormir ahí atendiendo a medio país.
Afortunadamente su último paciente ha salido y no le toma mucho tiempo dejar el lugar limpio. Está metiendo sus pertenencias en su mochila cuando escucha la puerta volver a abrirse.
- Ya voy de salida - dice sin girarse pensando que es alguien del personal de limpieza.
- ¿Ya? Es una lástima porque yo esperaba hablar contigo.
Kuroo se gira con sorpresa hacia la puerta y encuentra bajo el marco de ella a un desconocido. Ni siquiera viste como del personal de limpieza o algún otro empleado, sino que lleva ropa de civil.
- Lo siento, mi turno ya ha terminado. Puede agendar una cita, pero creo que las recepcionistas ya se han ido. Vuelva mañana - le sugiere pensando que es un paciente, aunque algo no le parece correcto en el hombre.
- No vengo a consulta.
- Entonces no se a que ha venido - responde confundido.
El sujeto suelta una pequeña risa que lo tiene frunciendo el ceño y enderezándose.
- Si no ha venido a consulta, entonces le pido que se retire. Ningún civil tiene autorizado entrar aquí a menos de que sea un paciente - espeta de forma autoritaria pero sin sonar grosero. A fin de cuentas sigue en su lugar de trabajo.
- Oh, vamos. Tenemos mucho de qué hablar.
- No lo creo. Ni siquiera lo conozco.
- ¿Estás seguro? - pregunta el sujeto y por primera vez se mueve de su lugar. Su cabello reluce ante la luz intensa de la habitación. Por un momento la idea de haberlo visto antes cruza por su mente.
- Muy seguro. Por favor salga de aquí.
- Es una lástima. Creí que Kenma ya te habría dicho lo suficiente de mí como para que me reconocieras. O tal vez me recordarías de aquella vez en que nos chocamos.
Kuroo inspira hondo y aprieta sus puños con fuerza obligándose a mantenerse inmóvil. El sujeto le observa con diversión por entre sus pestañas y parece disfrutar de este momento.
- Largo.
- Oye, con calma...
- Llamaré a seguridad si no te vas ahora.
- ¿Y qué vas a decirles? No estoy haciendo nada como para merecer este trato tan maleducado. Mejor siéntate.
- Entonces voy a golpearte.
- Suerte con eso. Supongo que hay una cámara aquí y este lugar no dudará ni un segundo en despedirte. ¡Pero adelante! Ni siquiera opondré resistencia.
Es una desgracia que el maldito tiene razón. La maldita cámara apunta hacia ellos y no importa lo que Kuroo diga sobre quién es él y lo que ha hecho, si le toca un solo dedo con brusquedad van a echarlo a la calle sin misericordia. El laboratorio no desea la reputación de un empleado violento.
- ¿Qué es lo quieres?
- Solo quiero charlar. ¿Qué tan malo puedo ser si solo quiero charlar? - pregunta con burla.
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¡No me toques! - Kuroken
Fanfic- ¿Quieres irte del país? Yo te compro el boleto. ¿Quieres ir con tus padres? Le pediré el auto a Bokuto y en menos de dos horas estaremos en camino. ¿O quieres trabajar? Iré por un periódico y traeré mi portátil para buscarte un empleo. Dime que qu...