Luther observó a Allison marcharse con el corazón apretado.
Cada paso que daba ella hacia la salida resonaba como un eco que le perforaba el pecho. Había sido su decisión, pero no podía evitar sentirse como el villano de esta historia. Sabía que no podía correr tras ella. No esta vez.
Los días siguientes fueron un suplicio. Allison evitaba cruzar miradas o palabras con él, y aunque los demás notaron el ambiente tenso entre ambos, nadie se atrevió a preguntar. Luther, por su parte, intentaba distraerse con la rutina, llenándose de tareas y entrenamientos. Pero, incluso cuando su cuerpo estaba exhausto, su mente siempre regresaba al mismo punto: Allison.
Era tarde, cerca de las 9:30, cuando Luther estaba en su habitación, intentando convencerse de que no podía dormir.
"No estás cansado. No tienes sueño."
"No te vas a dormir."
Los pensamientos se arremolinaban en su mente. Cada vez que cerraba los ojos, veía la mirada de Allison al rendirse, ese brillo de lágrimas que lo había perseguido desde aquel día.
Unos toques suaves interrumpieron su monólogo interno. Era Grace.
—Luther, tu padre quiere verte.
El tono dulce de Grace no reflejaba urgencia, pero el simple hecho de ser llamado por Reginald bastaba para que la preocupación se encendiera en su pecho.
—En un momento voy.
Se vistió rápidamente, ajustando su chaqueta y arreglándose el cabello con movimientos mecánicos. Caminó con paso firme hacia la oficina de su padre, aunque la sensación de pesadez crecía con cada paso. Tocó la puerta suavemente.
—Adelante.
Al entrar, se encontró con la figura imponente de Reginald, sentado detrás de su escritorio, con su usual postura rígida. Luther enderezó la espalda instintivamente.
—Tienes una nueva misión —anunció Reginald sin levantar la vista, mientras sacaba un folder azul marino de su escritorio.
Luther frunció el ceño.
"Otra misión."
"Otra prueba para demostrar mi valor."
—Padre, he estado muy ocupado y... —intentó hablar, pero Reginald lo interrumpió bruscamente.
—¿Qué te he dicho sobre interrumpir? —dijo sin mirarlo, mientras colocaba un objeto metálico sobre la mesa.
Luther respiró profundamente, sintiendo que el aire no llegaba del todo a sus pulmones. Su padre siempre tenía esa habilidad de hacer que todo pareciera una prueba imposible.
—Esta misión es diferente. He estado retrasándola porque no la consideraba prioritaria, pero ahora veo su verdadera importancia.
Reginald le entregó el folder con un gesto firme. Luther lo abrió, y lo que encontró en su interior lo dejó desconcertado.
Nombre: _______ Wright Jones
Edad: 17
Sexo: Femenino
Fecha de nacimiento: 16 de noviembre de 2001.La única imagen era una pequeña foto de una niña, de unos diez años. Nada más.
—¿Quién es ella? —preguntó Luther, levantando la vista hacia su padre.
—Eso es lo que debes averiguar. Sospecho que esta chica es una de nosotros. Quiero saber todo sobre ella: quién es, cuáles son sus poderes, si representa un peligro.
Luther sintió que su pecho se apretaba.
"¿Otra persona más a la que investigar?"
"Otra carga más sobre mis hombros."
Pero esta vez, algo era diferente.
—No hay suficiente información aquí. Esto es casi nada —dijo, intentando mantener un tono neutral, pero con una leve frustración en su voz.
—Exactamente, Número Uno. Esa es tu misión: reunir toda la información necesaria. Si logras completarla en seis meses, el viaje a la Luna será cancelado y consolidarás tu posición como líder de esta academia.
El corazón de Luther dio un vuelco. ¿Un respiro? ¿Un premio por cumplir esta misión? Pero... ¿a qué precio?
—¿Por qué yo? —se atrevió a preguntar.
—Porque necesito saber si realmente eres digno de ser el Número Uno —dijo Reginald con frialdad, sus ojos clavados en los de Luther—. No puedo permitir que fallemos.
Reginald le entregó un pequeño rastreador metálico.
—Esto es tuyo. Lo usarás cuando sea necesario. Ahora, puedes retirarte.
Luther asintió con rigidez y se dio la vuelta, dispuesto a salir, pero la voz de Reginald lo detuvo una última vez.
—Una cosa más, Número Uno.
Luther se giró lentamente, esperando las siguientes palabras.
—No me falles.
La frase, tan simple como contundente, lo siguió hasta su habitación como un eco.
Al entrar, notó un folder blanco sobre su escritorio. Lo abrió y vio que todas sus tareas anteriores habían sido canceladas, reemplazadas por esta nueva misión.
Se dejó caer en la cama, mirando fijamente el techo. Su mente era un torbellino.
"Buscar a una chica... No es la primera vez que me toca investigar a alguien, pero esta vez se siente diferente."
Su mirada se posó en el folder azul.
"¿Quién es ella? ¿Por qué ahora?"
Había pasado tanto tiempo tratando de demostrar su valía que había olvidado qué significaba realmente.
Ahora, con Allison fuera de su vida y esta nueva misión en sus manos, se sentía más solo que nunca.
Y sin embargo, no podía fallar.
No podía permitirse fallar.
Vamonos recio
¿Cómo estás?
Je
Espero que te guste este cap
Tqm
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𝑳𝒂 𝑴𝒊𝒔𝒊𝒐́𝒏 | 𝑳𝒖𝒕𝒉𝒆𝒓 𝑯𝒂𝒓𝒈𝒓𝒆𝒆𝒗𝒆𝒔
FanficUna Academia. Dos personas. Una misión. Una investigación. Ambos quieren volver a sentir, tener el amor a alguien que alguna vez tuvieron. Pero nada nunca es igual. La historia siempre marca el inicio o el fin de una etapa. Jamás un intermedio.