Octubre 11, 2019
He estado pensando constantemente en que tal vez debo ponerle más empeño a esta misión.
Quiero conocer esa mirada de orgullo que papá nunca le muestra a nadie. Quiero ganármela, aunque sea una vez.Esto está siendo muy retador.
Quiero sentir que realmente valgo la pena.Dejando de lado eso, mi cumpleaños, nuestro cumpleaños, fue hace unos días, y aunque fue agradable, no dejó de ser extraño. La ciudad organizó una pequeña fiesta: música, risas, bailes, y una mesa llena de comida y bebidas deliciosas. Todos parecían felices.
Recibí muchas felicitaciones... aunque no más que las que recibieron mis hermanos. A veces siento que las personas olvidan que somos siete en la academia.
Siete.
Pero cuando aplauden, no es para mí. Cuando celebran, yo no estoy ahí.
Es desgastante.
No puedo olvidar aquella vez en la que reportaron un incendio en una casa. Entré sin dudarlo, atravesando el humo y las llamas, y salvé a un bebé. Cinco apareció justo a tiempo. Se teletransportó para sacarnos del lugar antes de que colapsara. Él me tomó del brazo con firmeza, sosteniendo al bebé con la otra mano, y juntos escapamos de lo que hubiera sido una tragedia.
Cuando salimos, los aplausos estallaron como una tormenta. "¡Cinco! ¡Cinco! ¡Cinco!", gritaban todos. Nadie pronunció mi número.
¿Por qué?
Trabajamos en equipo. Ambos arriesgamos nuestras vidas. Pero solo él recibió el reconocimiento. Solo él fue visto.
No lo culpo. Hizo un trabajo increíble, y estoy orgulloso de él. Pero no puedo evitar preguntarme: ¿qué hay de mí?
¿Hay algo malo en mí?
¿Soy yo el problema?
La escritura fue interrumpida por el sonido de una notificación en su teléfono. Cerró la libreta con rapidez, dejando la pluma cuidadosamente en su lugar, y frunció el ceño. El sonido del teléfono siempre le resultaba extraño, como si no perteneciera a su mundo. No lo usaba a menudo; a veces, olvidaba que lo tenía.
Lo tomó del escritorio y miró la pantalla. Un mensaje de un número desconocido. Pero no era difícil adivinar quién era.
Sonrió, su expresión cambiando de inmediato. La pesadez en su pecho disminuyó, y el cansancio acumulado pareció disiparse un poco.
Señorita Wright
Buen día, Luther.
Buen día, señorita. Espero que mi idea no te haya incomodado demasiado.
Lo hizo, un poco. Pero estoy bien con eso ya.
¿Consideraste lo que alcancé a proponerte?
Eres un tipo raro, no lo voy a negar.
Respondiendo a tu pregunta, sí.
¿Dónde quieres que nos veamos?Donde nos conocimos, por supuesto.
Mañana a las 3 p.m. ¿Te parece?
Por mí está bien.
Muy bien. Hasta pronto, linda tarde.
Luther dejó el teléfono a un lado, aún con una amplia sonrisa. Había logrado algo bien. Por fin podría acercarse a esa chica y entender el repentino interés de su padre en ella.
Pero con la emoción vino también la incertidumbre. Necesitaba más que una simple conversación para cumplir con el propósito que le habían impuesto. ¿Y si ella no tenía ningún poder? ¿Y si no era especial?
Negó con la cabeza, tratando de alejar esos pensamientos.
Concéntrate, se dijo. Era demasiado temprano para preocuparse por lo que haría después.
Comenzó a entrenar, retomando su rutina después de días de descuido. Las pesas, los ejercicios de fuerza... necesitaba estar en su mejor forma. No solo físicamente, sino también mentalmente.
Pero había algo más que debía enfrentar. Algo que había evitado por demasiado tiempo: Allison.
Había pospuesto esa charla durante meses. Ella merecía una explicación. Y aunque sabía que sería doloroso, era algo que no podía seguir evadiendo.
Suspiró mientras realizaba la última serie de ejercicios, sintiendo cómo la tensión en sus músculos reflejaba la batalla interna que estaba librando. Era momento de poner fin a una etapa de su vida.
NUEVO CAAAP ¿Qué les pareció? espero que les haya gustado mucho <3
AGRADEZCO TODO SU A🐥
Les mando un besito en la cabecita, hasta pronto!!!
♡
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𝑳𝒂 𝑴𝒊𝒔𝒊𝒐́𝒏 | 𝑳𝒖𝒕𝒉𝒆𝒓 𝑯𝒂𝒓𝒈𝒓𝒆𝒆𝒗𝒆𝒔
FanficUna Academia. Dos personas. Una misión. Una investigación. Ambos quieren volver a sentir, tener el amor a alguien que alguna vez tuvieron. Pero nada nunca es igual. La historia siempre marca el inicio o el fin de una etapa. Jamás un intermedio.