La Calma De La Tormenta [Manjiro Sano]

Cap. 9 Visita A Prisión

-¿¡Narumi desapareció?!- pregunté alterado. Él afirmó levemente y comenzamos a caminar hacia el piso de Hina.

-Ella lleva muchos años desaparecida... incluso la policía a los 7 años paró de buscarla.-comentó Naoto con tristeza.
Tras unos minutos caminando por los pasillos, decidí volver por donde había venido ya que habían pasado muchos años y Hina no se acordaría de mí.

-Narumi...-pensé mientras bajaba las escaleras.- Dónde estas...- justo cuando iba a abrir la puerta, choqué con una chica, se trataba de Hina.

Después de estar en su casa junto a Naoto y dar una vuelta en coche, su hermano tuvo una llamada del trabajo por lo que nos dejó solos.
Decidimos ir a dar un paseo, y tras confesar que seguía sintiendo amor por mi, desaparecí por miedo quedando de nuevo en el coche.
Cuando me dirigía al aparcamiento, vi como una furgoneta chocaba contra el coche en el que Hina se encontraba. Al acercarme vi que Akkun era quién estaba conduciendo la furgoneta, ésta explotó dando resultado a llamas que ahora cubría los coches.
Me acerqué a Hina y tras unos minutos, ella me empujó para sacarme del coche que estaba apunto de explotar al igual que el anterior.

____ Al día siguiente ____

Asistí al funeral de Hinata, opté por quedarme atrás del todo, desde allí era capaz de ver a todos los que se encontraban presentes.
Decidí acercarme al altar para recitar unas oraciones, cuando pasaron unos minutos noté como dos hombres se acercaban a mi, sin embargo seguí orando a Hina.
El llanto de Naoto me hizo abrir los ojos y mirar hacia él, en ese momento, una mujer presente, se levantó rápidamente de uno de los bancos y se dirigió velozmente hacia la salida.

Su piel era pálida y estaba cubierta por un vestido negro corto junto a unas botas altas de tacón negras, llevaba el pelo suelo, el cual era negro como el mío. Su rostro estaba oculto bajo unas gafas de sol negras y un sombrero del mismo color.
Quedé mirandola mientras ella se dirigía a la salida. Algo en ella me resultó familiar, sin embargo me acerqué a Naoto para ayudarlo y consolarlo.

-¿Qué hacenos aquí, Naoto?- pregunté a mi acompañante mientras leía las grandes letras que adornaban el edificio.

-Aquí se encuentra Ken Ryuguju...- aquello me cogió de sorpresa, sin embargo le seguí mientras nos adentrabamos por los pasillos de la Prisión de Tokio.
Tras hablar con varias personas, nos pasaron a una sala para hablar con Draken. Después de esperar unos minutos un hombre salió.

-¡Draken!- exclamé.- Draken eres tú...-dije nuevamente mientras observaba el tatuaje en la sien de el ahora calvo.

-Me alegro de volver a verte Takemichi...- saludó con una leve sonrisa. Tras presentar a Naoto, Draken volvió a hablar.-Dime, ¿Qué estás haciendo aquí?

-Yo... pensaba que no te encontrabas en la cárcel...-confesé.- ¿Qué hiciste para que te dieran pena de muerte? ¡¿A quién mataste?!- exclamé- ¿Que fue de la Toman? ¿¡Dónde está mi hermana?!- Finalicé con los ojos llorosos.

-Takemichi...-habló pausadamente Draken.- No me arrepiento de lo que hice... y yo me merezco estar aquí, es mi culpa que la Toman terminara de esa manera, porque no fui capaz de detenerlo... y ella tampoco- dijo con pena.

-¿A quién?- pregunté ansioso.

-Ay la Toman... Que buenos tiempos aquellos, hacíamos todo lo posible por hacer parecer el equipo... La Toman lo era todo para mí, si pudiera rehacer mi vida, no elegiría otro camino... pero si de verdad hay una cosa que cambiaría... ¡¡Mataría a Kisaki!!-dijo con rabia. Antes de que pudiera decir algo más, un empleado de la cárcel a decir que el tiempo de visita había llegado a su fin.- Takemichi...-volvió a decir de espaldas a nosotros.- Vete de Tokio, si has venido es por que han intentado matarte...-hizo una pausa.- ella es la última que podrá salvarle.

-¡¡Espera!!-grité mientras veía a Draken irse.- ¡¿POR QUÉ INTENTAN MATARME?!- Pregunté mientras me acercaba al cristal.- ¡¿¡DÓNDE ESTÁ MI HERMANA, DRAKEN!?!- Volví a gritar.

-Mikey era el ídolo de Kisaki... pero su admiración se convirtió en odio- hizo una pausa.- Kisaki intenta arrebatarle a Mikey todo lo que aprecia y ama, incluida a tu hermana...- tras decir aquello volvieron a encerrar a Draken en prisión.

-¿Qu-que?...-tartamudeé- Mikey... Kisaki... pero mi hermana, ¿Está con Mikey?

Volvimos al piso de Naoto y comenzamos a buscar a información de Kisaki Tetta. Él era uno de los jefes de Toman. Tras estar pensando me decidí.

-Me haré el capitán de la Toman... así protegeré a Draken y Hina, y podré traer de vuelta a mi hermana donde quiera que esté...-hice una pausa.- La perdida de PahChin supuso un hueco... seré el capitán de la tercera división, es mi oportunidad...

Tras unos minutos discutiendolo, Naoto tendió su mano hacia mi, hicimos un apretón de mano y una vez más regresé al pasado para salvarlos a todos.