La Calma De La Tormenta [Manjiro Sano]

Cap. 27 El Shiba y La Hanagaki

Narrador Omnisciente

Narumi sin pensarlo se lanzó a Taiju mientras que éste la miraba con el ceño fruncido. Una vez llegó a su altura, lanzó un puñetazo al alto, quién lo esquivó, el siguiente lo bloqueó y así sucesivamente.

-¿¡QUÉ HACES?!- Gritó con la respiración agitada.- ¡PELEA!- le dijo, él no respondió, dejando anonadado a Hakkai y los demás.
Narumi lanzó una patada a la zona del torso baja, haciendo que Taiju se tapara la zona. Acto seguido la chica lanzó un fuerte puñetazo a la cara del Shiba, dándole de lleno en ella.-¡¡TOMA!!- Festejó con una sonrisa cansada.

-¡¡NARUMI NO ES CONTIGO CON QUIÉN QUIERO PELEAR!!- Gritó con algo más de ira Taiju.

-Pues te ha tocado...- dicho eso, Narumi volvió a atacar, justo antes de que Taiju la pudiera dar algún golpe, se movió hábilmente hacia el lado en el que Yuzuha había clavado el cuchillo y dio una patada, haciendo que Taiju se arrodillara en es suelo.- ¡¡VAMOS TAIJU, GOLPÉAME!!- Gritó la chica.

-¡NO NARUMI, TE MATARÁ, NO LO TIENTES!!- gritó Takemichi desde el suelo, que al igual que los demás estaban expectantes.
Sin embargo, Narumi sólo lanzó otro golpe a la cabeza de Taiju. Justo cuando iba a lanzar una patada, Taiju la cogió del pie y la lanzó hacia los bancos que allí había.
Antes de levantarse, vio como hacía ella se dirigía Inupi con intención de golpearla.

-¡¡INUPI!!- Gritó Taiju.- ¡ESTO ES ESNTRE ELLA Y YO!! ¡No te atrevas a tocarla!- Dijo.- ¡¡VÁMOS, LEVÁNTATE SI QUIERES QUITARME MI PANDILLA.!!- Terminó. Narumi se levantó con cuidado de lo caerse de nuevo con los bancos.

-Quiero que sepas...- dijo Narumi abriéndose paso entre los bancos.- Que solo he estado usando el 30% de mis habilidades.- terminó de decir con una sonrisa, al escucharla, el Shiba sonrió de lado.
Taiju se lanzó a ella para atacarla. En ese momento Narumi giró y se agachó para esquivar el golpe, que dio directo en un muro de la capilla en la que estaban. Narumi saltó y le dio una patada en la nuca, aquello hizo perder el equilibrio de Taiju, pero no llegó a caerse.
Éste se recuperó rápidamente y acertó un golpe en el estómago de Narumi, lo que la hizo caerse al suelo y vomitar algo de sangre. Sin dejar que se levantara, Taiju se abalanzó sobre ella y la golpeó el rostro dos veces mientras decía una y otra vez en tono serio "Tú me has hecho hacerlo".

Antes de que Taiju la diera un cuarto golpe, la pierna derecha de la Hanagaki subió con fuerza dándole un rodillazo en la espalda a Taiju.
Aprovechó la distracción del Shiba para soltar un gancho en la cara del mismo. Rápido empujó su pecho hacia atrás, dejando la espalda de Taiju en el suelo y a ella encima de él.

Soltó otro puñetazo, seguido de un tercero, pero antes de que pudiera dar otro, las manos de Taiju se afirmaron fuertemente en la cintura de Narumi, levantando su peso a pulso y tirandola hacia la izquierda. Narumi se puso en pie aún sorprendida por la fuerza del Shiba, y antes de que pudiera volver a pelear contra Taiju, una voz la interrumpió.

-¡Narumi!- se pronunció dejando a todos sorprendidos.- Gracias por todo pero... por favor para ya.

-Oye Yuzuha.- habló Narumi mientras se dio media vuelta para mirara a la Shiba dejando ver la abundante sangre que tenía en el rostro- Los golpes no son lo más doloroso... lo realmente doloroso es la Soledad.- hizo una pausa mientras que Yuzuha lloraba.- Puedes hablar lo que sea conmigo... somos... amigas, ¿no?- Yuzuha comenzó a llorar en gran cantidad mientras que se dejaba caer en el suelo.- Déjamelo a mi... Yuzu.

-Ayúdame Narumi...- dijo entre lágrimas Yuzuha.

-¡¿ME ESTÁS JODIENDO JEFE?!- Exclamó Koko al ver que Taiju se encontraba de cuclillas recuperando el aire perdido en la pelea.

-¡¡HIZO QUE EL JEFE SE ARRODILLARA!!!- Se sorprendió Inui.

-¡¡VAMOS LEVANTATE IMBÉCIL DE DOS METROS!!!- Gritó con una sonrisa Narumi y la respiración agritada.- Sabes otra cosa... ahora usé el 70% de mis habilidades... ¿y tú?- preguntó.

-Me gustan las mujeres con carácter.- dijo levantándose con dificultad.- Pero tu eres una maldita fiera...- terminó con una sonrisa.
Detrás de Narumi se escuchó otra voz en llanto.

-¡Perdonarme!- dijo Hakkai abrazando a su hermana- Yo... nunca tuve moratones... Fue Yuzuha quién hizo el pacto con Taiju para recibir golpes por los dos... yo solo pensé que apuñalar a mi hermano era la única salida...- comenzó a llorar.- Perdón Narumi... quise esconder mi debilidad mintiendo.

-Eso... Eso es... me das asco Hakkai.- dijo la joven dejando a todos expectantes.- Pero al fin y al cabo todos damos asco.- hizo una pausa.- y todos somos débiles... es por eso que necesitamos el apoyo uno del otro. ¡¡¡Y no por esa mentira te vamos a dejar de lado!!!.- Hakkai se puso al frente decidido para pelear con Taiju.
Tras un intercambio de golpes, Taiju lo dejó en el suelo con apenas conocimiento.

-¡¡Hakkai!!- gritó desde el suelo Takemichi mientras se comenzaba a levantar junto con Chifuyu.

-¡¡Taiju!!- le llamó Narumi.- ¿Retomamos lo que dejamos a medias?- le preguntó con una sonrisa algo ensangrentada mientras que Taiju negaba con una sonrisa.
Los tres se abalanzaron contra los de Black Dragons, yendo Chifuyu contra Koko y Takemichi contra Inui.

-Saben que ninguno de aquí saldrá con vida... ¿verdad?- sonrió Taiju.- La capilla está rodeada por más de 100 de mis hombres...

-Vamos a morir.- Dijo Takemichi con una sonrisa, al igual que la de Narumi.

-¿¡No entiendo por qué sonríen?!- lloró más Yuzuha.- ¡¡En serio los pueden matar!!

-Quien tenga miedo a morir que no nazca.- contestó Narumi con una sonrisa más amplia.
Dicho eso, comenzó nuevamente ma pelea. Al igual que antes, Taiju bloqueaba los ataques de Narumi hasta que ésta acertó un golpe, esta vez no en la cabeza, sino en las partes bajas, dejándolo de rodillas en el suelo.- ¡¡VAMOS TAIJU!!- Gritó Narumi.- ¡¡PELEA POR TU PANDILLA!!- antes de que Taiju se pudiera levantar, Narumi le dio una patada en la cabeza, haciendo que este se debilitara. Pero antes de que pudiera hacer otro movimiento, un motor comenzó a sonar.

-Ese sonido...- dijo Takemichi.

-¡¡ES LA MOTO DE MIKEY!!- Exclamó Hakkai.