Capítulo 29 Say, say, say

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Antes de presentar el capítulo, un anuncio especial.

Nuevamente una talentosa artista hizo unos preciosos dibujos dedicados a mi pequeño fic.

-SERPENTPAIN-- 

se inspiró en el capítulo anterior y en su libro ARTBOOK, en la parte 7, hay arte que literalmente me dejo sin palabras, en su momento no supe describir lo que sentí.

¡Muchas gracias! Me siento muy feliz de haber inspirado algo tan hermoso, y adoro tus trazos y en especial la manera en que pintas junto a las paletas de colores. Lamento la demora y ausencia en Wattpad, pero si en algún momento llegue a pensar en dejar el fic en Hiatus indefinido recordar tus dibujos me dio fuerza extra, un ultimo estertor para dejar de lado mi falta de inspiración.

De nuevo, muchas gracias, es todo un honor que mi escritura llegue a gustar tanto como para crear dibujos tan preciosos, lo digo desde el fondo de mi corazón.

Sin mas que decir, aquí dejo el capitulo.





—¡Corran!

—¡¿Bromeas?!

—¡Jol, estaremos bien, solo vete!

Luego de que a Joseph se le ocurriera armar grupos pequeños como forma de protección ante la ola inminente de peligro que se acercaba Jolyne, Jouta, Hermes y Gyro se habían puesto en marcha al hotel del último, quien, a pesar de la actitud renuente que había mostrado, estaba dispuesto a ayudarlos.

La separación no había sido sencilla. Durante más de veinte minutos y con la preocupación marcando el rostro de todos una disputa de quién debería ir con quien los había mantenido en las ruinas de lo que alguna vez fue una casa invernal con todos frustrados por la situación en la que estaban.

Y aún con Holly totalmente en contra, la mayoría había acordado que no podían correr el riesgo de que los volverían niños a todos. Así que la manera que se les había ocurrido para poder dar con el usuario era tenderle una emboscada, aunque era difícil saber qué diablos pensaba Joseph antes de salir disparando a Hermit Purple por la ventana columpiándose como si de un trapesista se tratara, rompiendo el ultimo vidrio intacto de paso.

Sin embargo, la idea original de que tanto Jouta como Jolyne se mantuvieran a salvo al irse con Gyro fue de inmediato aplastada cuando los cuatro sintieron que sus párpados cayeron de forma antinatural.

Sin perder un segundo, y con un presentimiento bastante acertado, Gyro alejó a Jolyne quien tenía a Jouta en brazos y les ordenó que se fueran, lanzándole un folleto que tenía la dirección del hotel donde se alojaba con Johnny.

—Al Rose Crescent, ¡ahora!— dijo con la suficiente fuerza como para ser oído solo por ambos Joestar. Mientras tanto Hermes batallaba por abrir los ojos.

—¡¿Y ustedes?!

—¡Nos encargaremos, solo pónganse a salvo! —Hermes la alejó con la mano, sonriéndole con ese gesto que le decía que todo estaría bien.

Jolyne respondió con un gruñido, en realidad estaba más que lista para una pelea, se había mentalizado desde el momento en que fueron atacados por Akira Otoishi y aunque fueron Joseph y Caesar quiénes la libraron sabía que tarde o temprano debería enfrentarse con sus propios enemigos, pues al fin y al cabo no planeaba involucrar a nadie más, mucho menos a Foo o a Hermes, no quería ponerlas en riesgo innecesariamente.

Pero antes de poder replicar el pequeño niño en sus brazos se sostuvo más fuerte, tratando de ocultar su nerviosismo evidente. Lo miro por un instante y se dio cuenta de que Gyro dijo "protejanse" en lugar de "protegete" por lo que entendió que no es que desconfiara de ella, ¡todo lo contrario! No era el momento de ser egoísta

El heredero perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora