Mi Concubino

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- como se llama esa sultana?- pregunto una de las nuevas criadas. Aquella mujer que mira era tan hermosa y se veía poderosa.

- ella es jisoo y es la criada personal del sultán jimin- explicó wheein.

- criada? Esa mujer? Pero ella parece una sultana..- susurro sorprendida no sabía que las criadas tan bien se veían como sultanas.

- el sultán jimin tiene una estricta regla con la ropa de sus criadas- explicó- si una de ellas viste una ropa horrible arruinaría su imagen..-

Una hermoso hombre de sonría linda salió de los aposentos del sultán jimin, vio como hablaba con la criada tan animadamente

- ese chico es el príncipe?- pregunto haciendo reír a la mujer

- ese es felix... Es un eunuco- explicó- el también es un fiel sirviente del sultán.-

- te daré un consejo- se acerco una criada - nunca te metas con esos dos pues tienen la protección del sultán jimin pelear con ellos sería pelear con el mismo sultán..- explicó.

Todo el palacio conocía el gran poder que aquellos dos tenían gracias al sultán jimin. Jamás habían sido regañados o castigados por nada. Todos les tenían envidia pues vivían una hermosa vida.

- que pasa si peleó con ellos- pregunto curiosa la chica

- la última criada en pelear con ellos desapareció- recordó como aquella pobre chica había desaparecido. Una mañana que jisoo entró al harén la chica le dijo que era una criada más, alguien sin importancia recordó como jisoo le sonrió y se fue por la noche la chica desapareció.

La pequeña chica se dio vuelta al escuchar que alguien llegaba, sonrió al ver a una hermosa mujer frente a ella la belleza de es mujer era inumana.

Una de las criadas jaló su mano sacándola de su trance, rápidamente hizo una reverencia no quería morir por insolente.

Chaeryeong río al ver el nerviosismos de la pobre chica. A paso lento se acercó levantó la carita de la chica y sonrió.

- ¿tu nombre?- pregunto.

- Ryujin....- respondió nerviosa.

- tu edad?-

- 25, sultana...-

La boca de chaeryeong se abrió aquella chica frente a ella tenía la misma edad. Como era posible que esa chica estuviera en el harén pues solo chicas de 20 años o menores podían entrar. Sintió como está le tocaba las manos como acariciaba sus anillos.

- este es muy hermoso- susurro maravillada ryujin. El anillo piedra verde capturo la atención de la chica.

Chaeryeong sabía que esa chica estaba siendo insolente al tocarle las manos sin su permiso, aquello podía ser castigado con la muerte. Poco le importaba si el ver la hermosa sonrisa de la chica y los ojos curioso la hicieron olvidar de castigos.

- sus vestido también es muy hermoso, el rojo es un color muy hermoso- susurro- el rojo simboliza poder...-

Trago saliva nerviosa la ver a la chica arrodillarse ante ella, acarició el vestido detallandolo.

- estás perlas que tiene su vestido es hermoso- levantó su vista regalándole una sonrisa. Siguió acariciando la tela del vestido.

Chaeryeong alejó su vestido de las manos de la criada rápidamente se alejó. Estaba nerviosa.

Todos los presentes quedaron atónitos pues la Sultana chaeryeong no había castigado a esa criada insolente.