Te odio.

20 0 0
                                    

Quiero matarte, de la forma más lenta y dolorosa que exista.
Quiero verte sufrir y pedir misericordia con los ojos llenos de lágrimas, sin fuerzas para gritar y aún así oírte intentando pedir ayuda.
Quiero que te arrodilles ante mí, y te arrepientas de todos tus males en esta vida.
Quiero que dejes un mensaje claro para todo ser repulsivo igual a vos.
Quiero que seas la mancha de sangre que recorra todo el mundo con el mismo significado imborrable.
Quiero que seas una advertencia y amenaza para cualquiera que se atreva siquiera a pensar un cuarto de lo que alguna vez hiciste.
Quiero que te trague tu oscuridad y te ahogues en tu sangre.
Quiero ver cómo pagas gota a gota el sufrimiento que causaste.
Quiero mucho más que verte en una celda, quiero verte agonizar.

No quiero la justicia legal.
No quiero que te vean como un pobre diablo.
No quiero que alguien se atreva a defenderte.
No quiero un juicio.
No quiero una denuncia.
No quiero verte en los diarios y noticias para que pongan en duda lo que hiciste y si es que realmente lo hiciste.

Te quiero muerto, pero no muerto en vida, tampoco muerto por un disparo. No quiero que descanses tan fácil ni tampoco que vivas lo suficiente para volver a disfrutar un segundo de vida, mucho menos para que puedas volver a hacer daño.
Te quiero ahogandote en tu sangre, frente a todas tus víctimas mientras todas reímos con fuerza, quiero verte humillado.
Te quiero sufriendo el dolor que nosotras sufrimos.
Te quiero arrepentido de llamarnos débiles.
Te quiero retractandote por decir que "nos hacías un bien".

Que seas un ejemplo de la justicia verdadera que cada una de nosotras necesita.
Que seas el primero de muchos que recibe su castigo como verdaderamente lo mereces.
Que no vuelvas a respirar sin temor.
Que no vuelvas a pasar cerca de una mujer.
Que nunca vuelvas a pensar en abusar de alguien.
Que jamás se te ocurra pisar el suelo que antes pisó una mujer.
Que vivas en las sombras lleno de sufrimiento, miedo y dolor.
Que se te pase la vida recordando mil traumas de nuestra venganza.
Que no vuelvas a decirle a ninguna mujer que debe ser "delicada".
Que no olvides nunca lo que me hiciste. Y lo que le hiciste a muchas otras.
Que no puedas comer ni dormir por miedo a lo que pueda pasarte.

No. No recuerdo tu nombre completo, te juro que la ciudad estaría empapelada con el mismo seguido de la palabra"acosador" en letras gigantes y rojas, pero tengo tu cara tatuada, tengo tu mirada repulsiva grabada en un loop eterno. Siento tus manos en todo mí cuerpo como si aún estuviera sucediendo. Te escucho respirar como si estuvieras a mí lado. Tengo tu dirección como un mantra que no deja de repetirse. Y tengo la promesa de devolverte el favor, multiplicado infinitamente.

Decidiste que podías ser amo y señor de mí cuerpo, y te pareció gracioso decirme que me atreva a golpearte sabiendo que me tenías encerrada. La próxima vez que te encuentre, las cosas van a ser distintas. Quien no pueda huir vas a ser vos.

Y cuando me veas llegar vas a rogar que todo lo que te conté sobre mí entrenamiento sea mentira.

Porque una denuncia no me alcanza, no quiero esperar eternamente a que mueras en una cárcel o tal vez quedes libre en unos años.
Porque no me importa lo que me pase después, una vez que termine voy a poder dormir en paz.
Porque no pienso arriesgarme a que sigas en las calles.
Porque tengo una hermana.
Porque tengo amigas.
Porque tengo mujeres en mí familia.
Porque soy mujer.
Porque soy humana.
Porque no te importó abusar de mí.
Porque no paraste hasta que te dije que me estaban esperando.
Porque no me dejaste de tocar hasta que sentiste miedo.
Porque me dijiste que debía ser delicada.
Porque manoseaste mis pechos.
Porque intentaste masturbarme.
Porque me sacaste la ropa interior sin mí consentimiento.
Porque jugaste con mis nalgas diciendo que era parte del masaje.
Porque dijiste ser un profesional.
Porque dijiste que no te gusta que haya más hombres cuando atiendes mujeres porque "son desubicados".
Porque abusaste de otras mujeres.
Porque juras que es necesario tocar nuestras vulvas y pechos.
Porque mientes diciendo que tienes buenas intenciones.
Porque jamás respetaste cuando pedí que me llamaras por mí nombre.
Porque no dejabas de decirme "mí amor".
Porque volví a mí casa intentando no colapsar.
Porque me desmoroné frente a mí viejo.
Porque tuve que denunciarte.
Porque mí novio tuvo que viajar a ver que estuviera mínimamente estable.
Porque ahora no puedo salir sola.
Porque mí viejo tiene miedo de dejarme en cualquier lado, a cualquier hora.
Porque mí novio entra en pánico cada vez que un hombre se me acerca.
Porque no soy capaz de tomar un mate con mis amigos hombres sin sentir pánico.
Porque por tu culpa cargo todos los días con el recuerdo de lo que hiciste.
Porque me llamaron al juzgado.
Porque estoy esperando la cámara Gesell.
Porque puede que todo quede en la nada.
Porque puede que al final salgas impune.
Porque ahora quiero un arma de fuego para salir con la calma de antes.
Porque hoy más que nunca quiero volver a practicar defensa personal.
Porque tuve que decidir rápido entre golpearte y empezar una pelea, o asustarte para que me dejaras ir.
Porque tuve que respirar profundo para no ahorcarte.
Porque después de mí entró otra paciente indefensa, y no tuve la fuerza para decirle que huyera.
Porque escupiste en tu mano cuando intentaste masturbarme.
Porque me tardé para volver a verme desnuda.
Porque no puedo usar la ropa interior que tenía ese día.
Porque me da miedo contarlo y lo hago a la fuerza.
Porque sé que mí familia me va a culpar porque son hijos e hijas del patriarcado y todo va a ser mí culpa.
Porque me quisiste ahorcar.
Porque se me hizo una infección con la mezcla de crema y saliva que tenías en tus manos.
Porque te odio.
Porque te aborrezco.
Porque jamás en la puta vida te pienso perdonar, y eso de dejar ir es para aquellos que elijen no tener memoria.

Pero yo tengo memoria, y mucha.
Yo te juro, que pase lo que pase me vas a tener que pagar cada milésima de segundo que me robaste de vida.
Me vas a pagar cada latido desde el minuto cero hasta hoy.

Me vas a pedir piedad, y así como vos hiciste conmigo, te voy a escupir y voy a decirte que es un bien. Todo lo que te haga sufrir es un bien.

Te odio.

Roberto, te lo firmo con sangre, vas a sufrir mucho más de lo que pensas, y vas a pagar por mí y por todas las mujeres que tocaste.

Te odio. Y juro por mí vida y todo lo que amo, no vas a salir impune de esto.

Alguna vez dije que si alguien intentaba hacerme algo, iba a matarlo a golpes, por suerte tuve la cordura de esperar a tener la posibilidad de volver a casa. Pero esa promesa que hizo la niña de 9 años la primera vez que alguien la acosó de camino al colegio sigue en pie. Porque te voy a matar, de la forma que sea. Pero lo voy a hacer.

No te olvides de mí, yo jamás me voy a olvidar de vos, y voy a asegurarme de que lleves mí nombre tatuado en todo tu ser, hasta el fin de los tiempos.

-Luana.

Cosas del dolor...Where stories live. Discover now