Contumaz - [El clan perdido]

Capítulo 1

Ciudadela de Mermar, año 2.155 P.A. [post- apocalipsis].

Ya era una tradición que en la ciudadela Mermar, los jóvenes del tercer perímetro asistieran a la academia L.O.F, o más conocida como «Los Líderes del Futuro». En este lugar estudiaban todos los hijos de familias pertenecientes a la élite, de aquel perímetro; que tenían el control de la ciudad. Se solía conformar por: políticos, militares y altos mandos.

Dhamar Blasko se encontraba frente a la puerta de ingreso de su salón, «clase de debate», se indicaba en un reluciente papel; no era su favorita de todas, pero en realidad, ninguna lo era. Luego de unos segundos de automotivación, tomó el valor de ingresar a la clase. Llevaba algunos minutos de retraso, por lo que guardó silencio al entrar. 

Una vez adentro, se percató del único asiento que se encontraba vacío, sin mucha demora caminó hasta allí para integrarse a la clase. «Los Contumaz», decía de forma despectiva, como titular en el pizarrón. Dhamar soltó un fuerte suspiro, al leer de que se trataría la clase, sabía que, con ese tema las horas de jornada se le harían infinitas.

Como hijastra de Román Massimo, él hace muy poco electo nuevo gobernador de la ciudadela, Dhamar tuvo que hacer ingreso a la academia de forma obligatoria, situación que le causaba varios conflictos. Ser parte del grupo élite, no era un tema que la emocionara demasiado. La forma de vida, que se llevaba dentro de la ciudadela y de cada perímetro en particular, no era de su agrado. Tenía el pensamiento de que las cosas podrían cambiar. O al menos, ser un poco más equitativa en la distribución de riquezas, entre los 3 perímetros de los cuales se conformaba la ciudad. Ella como oriunda del perímetro 1, sabía las reales necesidades que tenía el pueblo. 

Pero, por otro lado, se odiaba a sí misma por tener el mismo pensamiento que su padre. Fabio Blasko, fue un hombre justo y decidido, el cual siempre peleaba por sus derechos e ideales. Era el tipo de persona capaz de darlo todo, por un buen futuro para sus hijos. Esos valores lo llevaron a unirse al grupo oponente, del modus operandi, del gobierno de la ciudadela. Sin saber que la muerte lo esperaba en manos de sus propios partidarios, el Clan Contumaz. Con justa razón, cada vez que se hablaba del grupo opositor, Dhamar no podía evitar recordar la muerte de su difunto padre, aquel trauma seguía presente todos los días de su vida.

—Como saben, ya desde hace muchos años, no hemos tenido actividades del grupo opositor. Alguien me puede decir, ¿cuándo fue la última vez que hubo noticias sobre este tema? —cuestionó el maestro.

Uno de los alumnos presentes alzó la mano, a lo cual el profesor asintió para darle el pase a su respuesta.

—La última vez que se supo del clan fue hace 10 años, en el 2.145 post apocalipsis. En este año, ocurrió el atentado contra el gobernador y fundador Lionel Cassius.

—Atentado que tuvo un grado de violencia...horrible —un silencio se hizo presente en el salón, después de las palabras del profesor.

—Luego de ese acto tan macabro... no se volvió a saber de ellos. —mencionó Marcus, hijo del primer comandante en jefe.