Destinados

Capítulo 8

Me sentí una mierda, fui egoísta, solo pensé en mi y no en él, Peter era un amor, desde que llegó a mi vida no deja de ser bueno y amable conmigo, sé que tiene algo especial que me atrae mucho, pero simplemente no puedo... No puedo arriesgar a enamorarme otra vez, no quiero sufrir, y tampoco quiero hacerlo sufrir a él, no es justo que después de haberse perdido años de su vida esté con una persona como yo que tiene varios problemas, no quiero lastimarlo, y tal vez esa es la decisión más sensata de todas.
-Gracias-traté de calmar mi respiración, le di un último abrazo- por todo..-saqué mis lágrimas de mis mejillas- yo tengo cosas que hacer, perdón pero tengo que irme
Mentirosa, "estas siendo una mentirosa", ¡perfecto!, ahora hablo con mi misma.
Noté desilusión en sus ojos, eso me hizo mal, lo acompañé a la puerta y recordé que él todavía no podía manejar.
-Si me esperas te llevo, ¡mejor dicho esperame!-se lo supliqué, Peter asintió con la cabeza.
Busqué mi cartera y metí varias cosas.
-¡Ahora sí! Podemos irnos-le sonreí para animarlo.
Nos sentamos en mi auto y manejé hasta la dirección de su casa, cuando se estaba por bajar no supe como saludarlo, terminó besando mi frente.
Lo vi irse y sentí una especie de sabor "amargo" en mi interior, él era demasiado bueno para mi, lo mejor es dejarlo en paz.

PETER

Llegué a mi casa y mi hermana Eugenia estaba planificando un casamiento sentada en el medio del living, tenía su computadora, sus miles de cables, sus anotaciones en distintos papeles, fotos de salones, ella estaba en su mundo hasta que me vio, se despertó del cliente.
-¡Hola Pit!-me miró a los ojos y elevó sus cejas-¿como está Lali?
-Ella está bien...-hice una pausa antes de seguir hablando- ella me importa Chinita, todavía no entiendo porque, pero me importa mucho, siento que le debo el estar en este plano, hay una energía, una vibra cálida que siento cuando estamos juntos..
-Estas enamorado chiquito-mi hermana se emocionó- ¡no puedo creer que te hayas enamorado de la primera persona que viste! Pero.. Sabes que no podes involucrarte con ella, es una súper estrella, siempre recibe atención, buena y mala suspiró- vi las fotos y escuché el rumor, ¿que vas a decirme sobre eso?
-Qué... Qué me ofrecí voluntariamente para una estupidez, pero se trata de una estupidez que me importa..
-¡Obvio! Tiene que ver con Lali Espósito-mi hermana Eugenia me tomó de las manos- si lo de ustedes está destinado a ser en algún momento va a ser, pero no ahora
La miré firmemente.
-Sos mi hermana, no sos mi terapeuta-me molesté- ¡te estoy hablando de cosas profundas! Sabes que pasé por una mierda atrás de otra.. Diez años dormido, desde los dieciocho hasta ahora, que voy a cumplir veintiocho, ¡ya casi llego a los treinta! Y en mi cabeza todavía sigo con la misma edad y pensamientos que en ese viaje que hice con mis amigos, fuimos a Bariloche en el primer año después de la secundaria y pasó.. nunca supe esquiar bien-de un momento a otro se me empezaron a caer lágrimas de los ojos, hasta ahora no había llorado, no me lo había permitido- y me hice mierda.. la vida siguió, mis amigos hicieron nuevos amigos, mi novia... También hizo su vida-mi voz se quebró- y ahora solo quiero ser feliz Chinita, la quiero a Lali, sé que ella está igual de rota que yo, podemos sanarnos juntos
Mi hermana estaba conmocionada por todo lo que por fin había logrado sacar a la luz, no lo dudo y me dio un abrazo fuerte, ella también terminó llorando.
-Entiendo a que vas Peter, ¡entiendo todo! Pero tenes muchas cosas en las cuales trabajar, ella también está mal, tuvo una pérdida muy importante.. ¿Crees que sería bueno para ella lidiar con una persona que mentalmente sigue teniendo dieciocho?
-¿Te estas escuchando?-la miré mal-siempre fui más maduro que más de uno, y cuando pasó todo esta ya era un adulto, ¡y ahora soy un adulto! ¡Quiero vivir la vida Euge! ¡¿Es tan malo que quiera eso?!
Otra vez más lágrimas, el aire empezó a faltarme y no entendí que pasaba, sentí que iba a morirme, no quería morirme.
Justo llegó mi mamá y entró en pánico, le gritó a Eugenia algo, no escuché nada, solo me concentré en hacer todo lo posible para respirar, poco a poco pasó, el episodio terminó.
-Fue un ataque de pánico-el médico se lo comunicó a mi mamá y a mi hermana- va a terapia, ¿no?
Mi mamá asintió con la cabeza, estaba angustiada, mi hermana también estaba angustiada.
Me molestó el hecho de que hablaran de mi frente a mi como si yo fuera un nene chiquito, como si no fuera capaz de tomar mis propias decisiones.
-Tiene que hablar con su psicóloga y seguro ella va a decidir si lo deriva al psiquiatra-siguió el médico.
Cada palabra que escuchaba me daba más miedo, yo nunca deseé nada de esto, solo quiero volver a mi casa, volver a estudiar y tener una vida normal, vivir una vida normal.
Volvimos los tres en el auto en silencio, me puse a escuchar música con mis auriculares, de un momento a otro sonó la voz de Alas, Lali, eso me relajó, dejé de estar tan tenso.
-Ey mi amor-mi mamá me llamó cuando llegamos a nuestras casa, agarró mi cara entre sus manos, la noté preocupada- no estas listo para estar relacionándote con esa chica, es hermosa, es un amor ella, me cae bien, pero.. ¿viste lo que pasa cuando te sentís mal? No estas listo para ponerte nervioso y..
La interrumpí.
-En la vida uno nunca está preparado, en nada.. ¿No puedo arriesgar? Creé que no tengo mucho por perder ya
-¡Sí tenes algo por perder! ¡A tu familia!-se señaló- AÑOS esperamos a que puedas estar de nuevo con nosotros, no quiero que por un capricho tuyo vuelvas a caer, tal vez no despertas más
-¡Que mamá positiva sos!-me enojé.
-¡Justamente no podes tratarme de una persona positiva a mi! Recé, hice todo lo que estuvo a mi alcance para no perder la fe-ella iba a llorar, por mi culpa, se me formó un nudo en la garganta.
-Perdón, soy una mierda-la abracé haciendo fuerza para no llorar con ella.
-No mi amor, no sos una mierda.. Entiendo tu entusiasmo, tus ganas de hacer, pero.. Tenes que tener cuidado-me miró a los ojos y esbozó una pequeña sonrisa para animarme sin éxito- ella viene de otro mundo, uno que muchas veces se vuelve tóxico, daña..
-Ella viene del mismo mundo que nosotros, tiene un trabajo distinto, polémico, llamalo como quieras-suspiré- pero ella también no está pasándolo bien.. Quiero ayudarla, cualquiera que me escuchara ahora mismo se estaría riendo en mi cara, ¡yo ayudar a una persona! Pero no solo quiero estar para ella, necesito estar para ella, es una necesidad, todo mi ser quiere ahora mismo estar con ella
Mi mamá me miró sorprendida por mi convicción, era muy clara, no pensaba rendirme, no iba a dejarla sola, a pesar de que Lali esté intentando mantenerme apartado voy a cansarla, va a tener que aceptarme, solo la quiero cuidar, así como ella me cuidó a mi.
Vi a mi "lugar seguro" la cocina, e hice una tanda de facturas rellenas que estaban buenísimas, me acerqué a donde estaba mi hermana Eugenia.
-Perdón por haberte hablado mal.. Hice los cañoncitos de dulce de leche, tus favoritos-elevé mis cejas y a ella se le formó una pequeña sonrisa en los labios.
-Gracias-besó mi mejilla- yo también quiero pedirte perdón, me importas tonto-me sonrió- ¡por eso me pongo tan loca!, pero si vos queres seguir tu corazonada acá estoy, para apoyarte
Ella se quedó mirándome a los ojos y besé su frente.
-Gracias Chinita-le di otro abrazo.