Capítulo 23

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PETER

La vi a Lali subirse al escenario desde atrás de éste, ella estaba hermosa, era una diosa, una bomba.
Ella cantaba y se movía de un lado a otro, tenía un vestuario que dejaba al descubierto su panza, no se notaba, pero ahí, ahí adentro estaba nuestro bebé, no pude evitar sonreír, la grabé con mi teléfono, cuando nuestro bebito fuera más grande le mostraría lo imponente que es su mamá cuando hace lo que le gusta.
Por suerte finalmente bajó un cambio e hizo más canciones acústicas, cambió un poco el show, pero sus fans no se quejaron, por lo menos por ahora..
Papelitos plateados volaron por el aire y ella presentó a sus músicos y bailarines para que los aplaudan, emocionada lanzó besos al público.
-¡Sos tan talentosa!-sonreí cuando me abrazó por el cuello y me besó, estaba muy feliz, y yo estaba muy feliz por ella.
-Gracias-me sonrió y después fue abrazándose con todos, después de un rato largo fuimos a su camerino, empezó a cambiarse y tomó aire, soltó un suspiro-¿vamos a cenar juntitos? Solos.. Tengo ganas de tener un tiempito para los dos
-¡Alas!-elevé mis cejas coqueto-¡creí que jamás me lo pedirías!
-Sos un tarado-soltó una carcajada, besó mi mejilla- pero me gustas así
-Así que te gusto...-nunca voy a acostumbrarme a eso, a que ella me corresponda, cuando la conocí la vi tan apagada, creí que nunca iba a abrirse a mi, pero acá está, acá estamos, juntos, a punto de tener una cita.
-Pasamos por el hotel y me arreglo bien eh-ella fue quién ahora elevó sus cejas coquetas- y..-me besó en los labios-¿eso te lo responde?
Asentí con la cabeza.
-Vos también me gustas-rocé mi nariz cariñosamente con la suya para después apartarme.

Lali salió del baño toda producida, le sonreí y rodeé su cintura con mis brazos.
-¿Vamos a salir?-me reí y ella asintió-ok, vamos-la tomé de la mano, nos subimos al ascensor- por cierto, no das más de hermosa
Elevó sus cejas y se mordió los labios conscientemente, ¿acaso se le había ocurrido volverme loco?
Ella había organizado todo, por eso estaba algo ansioso, no sabía que podía pasar.
-¡Vos también estas guapo guapo Lanzani!-me palmeó la cola y me sonreí.
Estábamos en un restaurante todo arreglado y al mismo tiempo tranquilo.
-Esta es nuestra primera cita oficialmente cita-le sonreí encantando, la tomé de las manos- me encantó tu idea, me hubiese gustado haberte ganado de mano pero..
-Shhh-me calló y se rió- hoy por hoy las mujeres también podemos accionar, es más, ¡si quiero podría pedirte casamiento!-su cara se transformó al darse cuenta de lo que dijo, me reí fuerte- no es que.. Ahora no... No es esa la idea...
-Tranquila Alas-le hice una caricia en la cara- ahora ya tenemos un problema, soy de ir muy rápido, ¿no? No quiero agobiarte-la miré firmemente a los ojos.
-Todo pasó muy rápido, pero sí, primero quiero hacerme cargo de lo más importante-ella se señaló la panza con disimulo, nunca se sabría si habría periodistas entre nosotros- y de seguir conociéndote..
Eso me hizo feliz, sonreí como un tarado.
-Amo que estes permitiéndome entrar a tu mundo, poco a poco.. Pero lo estas haciendo, me haces feliz Alas, muy feliz-me sinceré y ella se estremeció-¿que pasó?
-Se me puso la piel de gallina-se rió nerviosa y noté brillo en sus ojos, un hermoso brillo que decía más que las palabras.
Nos interrumpieron, el mesero nos contó que cosas habían para comer, cual era la especialidad.
-¡Mira que acá hay un futuro chef! ¡Espero que todo esté riquísimo!-Lali me mandó al frente, el mesero se rió- ¡es cierto!-ella me miró a mi- seguro tu paladar es mucho más exigente que el mío
-Después vas a ser igual, planeo malcriarte con todas las cosas que quieras comer.. Y cuando tengas antojos más
Ella me tomó nuevamente de la mano y soltó un suspiro.
-Es una locura... Todo esto es una locura, la gira, los shows, el amor de la gente, el fanatismo, el estar acá, el que estés conmigo, nuestro secreto-me sonrió dulcemente- el que me quieras...No sé, pero.. ¿Te puedo contar algo muy mío?
-Claro
-Desde que te conocí... Supe que ibas a ser especial, yo.. Siento que te conozco de siempre, siento esa comodidad cuando estamos juntos
Sus ojitos volvieron a brillar y le besé las manos.
-Lo mismo digo-le sonreí.
Cuando llegó la comida Lali atacó el plato de una, pidió distintos postres para probar, la acompañé, solo la acompañé, el resto se lo terminó ella, después caminamos un ratito y en nuestra habitación de hotel puso música desde el televisor.
-¿Bailas conmigo Peter Lanzani?-estiró sus brazos y rodeó mi cuello, la tomé de la cintura fascinado.
-Obvio que sí Alas-nos quedamos así, bailando juntitos, deseé que momentos como este se queden congelados en el tiempo, que sean eternos.
Terminó la canción y a Lali le agarró sueño, le saqué el maquillaje con unas toallitas desmaquillantes y después se lavó la cara y los dientes, nos recostamos.
Su respiración se tranquilizo y lo supe, se quedó dormida, me aparté para hablar con mi mamá en el balcón, antes me llamó cuando justo estaba cenando.
-Hola ma-le hablé y ella hizo silencio- perdón que te responda ahora.
-Peter-su tono de voz era uno de preocupación-¿vas a volver ya? Te expusiste demasiado, Lali esta muy expuesta, no va a hacerte bien, pueden agarrarte nervios, podes tener un ataque de pánico y ella no va a saber que hacer, ¡estoy preocupada Peter! ¡Tu papá esta preocupado! La única que no demuestra el estar preocupada es tu hermana Eugenia, pero es tu aliada me imagino-suspiró- ¡mirá a la hora que me llamas! ¿No podes dormir? ¿Estas teniendo insomnio?
Mi mamá estaba enloqueciendo, para que me deje algo tranquilo decidí tirarle LA bomba.
-Mamá voy a ser papá
Su respiración a diferencia de la que Lali que estaba tranquila porque dormía, se alteró.
-¡¿Qué?!-por poco me deja sordo-¿cómo?
-¿Realmente necesitas que te explique como?-traté de responder con humor para que se calmara.
-¡No es momento de bromas Juan Pedro! ¡¿Esto es real?! ¡No estas psicológicamente preparado para algo así!
Suficiente, alejé mi teléfono de mi oreja, sus palabras estaban poniéndome mal, había algo de verdad en eso.
-Yo... Cuando vuelva voy a hacer mucha terapia, quiero ser mi mejor versión, quiero ser un buen papá así como papá lo fue conmigo, y quiero hacer feliz a Lali... La quiero.. No te estoy mintiendo cuando te digo que la quiero, y ella me quiere.. Espero que puedan entender eso, la quiero, me quiere y vamos a estar unidos de por vida ahora-me emocioné- la quiero tanto..
Mi mamá soltó un suspiro.
-Solo tengo miedo, tengo miedo a que algo te pase, ¡obvio que quiero verte feliz! Quiero verte hacer lo que te gusta, obvio que quiero ser abuela, pero no se si es momento de..
La interrumpí.
-Mi bebé, el bebé que voy a tener con Lali no está en negociación-le hablé firme.
-Hijo, soy tu mamá, ¿crees que soy capaz de pedirte que hagas una cosa horrible?-estaba dolida, su voz se quebró- me pareces que te olvidaste de como soy, solo soy protectora, y aunque no lo creas quiero lo mejor para vos, yo NUNCA te pediría que no tengas a tu hijo, vos sos MI hijo, y sos lo más hermoso que me pasó, la razón por la que seguí adelante cuando todos daban por hecho de que no te ibas a despertar... Yo quiero que sepas que si esto, el estar con Lali te va a hacer feliz voy a estar para vos, para ustedes
-Perdón mamá-no sabía que decirle- no quise hacerte sentir mal..
-No pasa nada, solo.. Estamos los dos nerviosos mi amor, espero que podamos vernos en persona pronto, tal vez pueda hacerme una escapada para verte
-Sería lindo... Y..-hice una pausa- gracias por apoyarme
-En todo mi chiquito
-Te amo ma
-Yo también-finalizó nuestra conversación.
Me metí en la cama y traté de despejar todos los pensamientos feos, los pesimistas, tenía que estar íntegro, tenía que ser el sostén de Lali, ella me necesitaba fuerte, no necesitaba tener que ocuparse de mi, el que mi mamá me lo haya recordado me hizo dudar, ¿sería buen papá?

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