Destinados

Capítulo 19

-Alas-Peter me llamó justo cuando salí de mi departamento, iba a ir a buscar algo al local a lo de mi amiga María, ya era de noche y estaba lloviendo, por suerte él estaba refugiado en un techo.
-¿Estabas esperándome?-me sorprendí, Peter asintió con la cabeza, tenía la mirada rara, sus ojito estaban cristalinos-¿entras?-le abrí la puerta de mi auto, una vez ahí adentro di una vuelta para estacionarlo.
-Quiero hablar con vos, sé que mi mamá seguro te dijo algo, no la escuches-me tomó de la mano y me lo suplicó- sé que estoy sonando como un tonto suplicándote, pero Alas vos me haces bien, ella no entendió que te quiero, te necesito
Algo retumbó en mi cabeza, me quiere, Peter me quiero, eso fue suficiente para que yo también termine con lágrimas en los ojos, pero de la emoción.
-No soy la mejor persona para vos, mi vida..
Puso su mano sobre mi boca para silenciarme.
-¿Quién dice que no sos la mejor persona para mi? Yo sé, sé que vos sos una persona hermosa, no solo por fuera, por dentro, por lo que te conocí sé que sos una persona que se muestra fuerte, y es fuerte, pero también es sensible, y necesita abrazos-me rodeó con los suyos y me puse a llorar sin entender bien porqué- sos especial Lali, no sé en que idioma decírtelo
Otra vez algo me retumbó en la cabeza, me llamó Lali, eso solo significaba algo, quería que me quede bien en claro lo que estaba diciéndome.
Mi ex novio nunca me dijo algo tan hermosamente intenso como Peter, él se estaba jugando todo para hacerme cambiar de opinión.
-Alas... Por favor-me miró firmemente a los ojos y me rendí, rodeé su cuello con mis brazos y lo besé, lo besé con desesperación, la realidad era que lo había extrañado, y mucho.
Él me atrajo hacia su cuerpo y comencé a sentir calor, me separé un poco y nos miramos a los ojos, apoyó su frente con la mía y nos sonreímos.
No seguí dudándolo, puse en marcha mi auto y lo guardé nuevamente en la cochera, subimos por el ascensor besándonos otra vez con desesperación, al llegar a mi piso abrí y cerré rápidamente la puerta de mi departamento.
Quedé apresada contra la pared, me hizo una caricia delicada en la cara y rozó sus labios en mi cuello, eso me alteró la respiración.
Lo empujé suavemente para alejarlo y llevarlo a mi habitación, ahí todo se desvirtuó, le saqué la ropa ansiosa, mientras que él se quedaba admirándome con cada prenda que me sacaba, me miraba como si fuera una nueva maravilla del mundo.
Terminamos en la cama entre caricias y besos, no podía sacarle mis manos de encima, él se rió y besó mi frente, el silencio no me incomodó, y eso es una señal de que perfectamente podría despertarme todos los días de mi vida al lado suyo, sin timidez alguna.
Fui cerrando mis ojos relajada y cansada, no solté, no solté a Peter Lanzani.

Por la madrugada me agarró hambre, me desperté y me separé de Peter con cuidado, me puse una remera larga y caminé sigilosamente hasta la cocina, no quería despertarlo pero igualmente se despertó.
-No comimos al final, ¿te cocino algo?-me sonrió.
-¿Tenes ánimo? Puedo ayudarte y aprender...
-¿No seguís con sueño? Tenes una carita-me molestó.
-Pero el hambre le gana al sueño, por lo menos en mi caso eso es así-suspiré.
Lo vi a Peter inspeccionar mi heladera, sí, tenía muy pocas cosas.
-Con un sandwich me conformo
-¿Estas segura?-dudó y asentí con la cabeza- ok, pero voy a hacer uno gourmet
Claro, ¡no podía hacer menos!
Lo vi sacar ingredientes, cortó palta, tomate, hojas de recula, preparó pollo bien condimentado, con una salsa agridulce, y para acompañar batatas al horno.
-Es un montón-lo miré de reojo y me sonrió.
-Te lo dije, conmigo siempre vas a comer bien-se mordió los labios y mi sucia mente hizo de las suyas, Peter se dio cuenta y me guiñó un ojo.
-¡Sos un estúpido!-me reí y probé su sandwich-¡muy muy muy bueno! ¡No miento!
Él estaba satisfecho de verle feliz, ambos comimos mientras el sol estaba saliendo, ¿lo lindo de vivir en un edificio? Poder contemplar al sol desde muy temprano.
-Creo que esto es una de las cosas que más extrañé, el sol naranja-Peter se sentó en el sillón a mi lado, me apoyé sobre su pecho mientras estábamos agarrados de la mano como si fuéramos novios- vas a irte mañana, ¿no?-me lo recordó.
Asentí con la cabeza.
-Comienza mi gira, por eso ayer iba a ir a lo de Mery, ella me hizo una última cosa para que use, es para mi la mejor diseñadora lejos-no pude evitar sonreír.
Peter se quedó pensativo y me miró, se le formó una sonrisa.
-Puedo acompañarte a la gira
-¡No! ¡No! La vez pasada viniste con tu hermana Eugenia, no me imagino que puede llegar a pasarte si venís vos solo-me preocupé.
-Es mi vida y yo elijo Alas-estaba convencido-¿a vos te molestaría que yo te acompañe? Si me decís que sí no te acompaño, y no me digas que sí solo para evitar que vaya, y ni por no sentirte cómoda
Silencio, solté un suspiro y negué con la cabeza.
-No.. No me molestaría, solo me da pensar que no poder cuidarte de toda la exposición que vas a recibir, que vamos a recibir, vas a pasar cierto tiempo solo, ¡me preocupas Peter!-levante su cara con mi mano.
-Vos también me preocupas, y como me preocupas quiero estar a tu lado Alas
Es tan cabeza dura como yo, eso me hizo reírme y lo abracé, él me hacía bien, me hacía sentirme en paz.

Peter se volvió a su casa, bueno, lo dejé en la puerta y me agarró miedo, miedo a que su mamá se aparezca y otra vez me enfrente, no estaba cumpliendo.
Me saludó y se fue, rápidamente aceleré el motor de mi auto y huí como una fugitiva.
-¡Hola La!-mi amiga María besó mi mejilla, me recibió en su casa para almorzar-¡tengo lo tuyo!-me dio una bolsa y me miró entusiasmada.
-Wow-me sorprendí al ver unos tacos brillosos y animal print-son para el show, ¿no?
-¡Obvio boluda! Igual, sos una estrella pop, si te pinta usarlo ahora sé que podes, sos capaz-elevó sus cejas y nos sonreímos- ¿me parece a mi o volvió la Lali luminosa?
-Algo así...-no sabía por donde empezar-Peter
-¡No me digas más!-me interrumpió-¡que hermoso boluda! Soy muy feliz por vos-me abrazó.
-No es mi novio... No es mi nada solo es.. Un compañero-no sabía como definirlo.
-Compañero porque no solo es amigo, y compañero abarca muchas cosas, compañero de planes, compañero de cama...-me miró divertida y me reí.
-Estúpida
-Yo también te quiero estúpida-me dio un golpecito en el brazo.
Seguí sus pasos y comimos una ensalada césar, después fue el turno del helado, pasamos caminando por una heladería y nos sentamos en una mesa, una chica se acercó para pedirme una foto, le sonreí, había sido amable y respetuosa.
-Admiro tu fortaleza amiga, te admiro en todo, en tu talento, en vos como persona humana, sos muy humana, y siempre le decís que sí a las personas que se te acercan con buena onda, sos agradecida, paciente..
-La vida me dio y me sacó, se que es parte de un equilibrio, pero a pesar de todo estoy agradecida con mi vida... Y poder seguir haciendo cosas, y lo que me gusta es hermoso-me puse emocional- estoy modo tarada, debe estar por venirme-nos reímos.
Me despedí de ella y tuve que quedarme en el auto descansando un rato, me quedé quieta para hacer la "digestión", en veinte minutos iba a tener mi último ensayo de baile en el estudio, mañana bailaría y cantaría, pero arriba de un escenario, mañana finalmente comenzaría mi gira.