Capítulo 29

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Al día siguiente me desperté muy temprano porque quería hacer algo antes de ir al teatro, hice una compra fugaz, tuve una idea mientras dormía, y pensé... ¿Porqué no?
Tenía que practicar las coreografías, más tarde sería la prueba de sonido, y mucho tiempo después el show, el último show de mi gira internacional, todo no había terminado que ya estaba poniéndome nostálgica.
Llegué a la puerta de teatro y se acercaron unos fans, algunos de Miami, Los Angeles, República Dominicana, Colombia, México ¡y obviamente Argentina! Yo estaba encantada de haberme cruzado con personas de tantos lados, la mayoría hablaba español, pero algunos de Estados Unidos no, tuve que escuchar muy atentamente para responder.
Me despedí saludando con mi mano y fui directo al escenario, me daba orgullo ver toda la escenografía montada y pensar que era mi idea, lo que tanto soñé, y era real.
Mis bailarines me recibieron con abrazos y Denise me sonrió al verme entrar "escoltada" por Peter, yo también le sonreí.
Bailé con una pista y después llegaron mis músicos, practicaron ellos solos hasta el momento de la prueba de sonido, sostuve el micrófono y sentí una descarga de energía hermosa en mi cuerpo, mi buen humor volvió.
-Tan tan talentosa sos Alas-Peter me miró fascinado, lo besé en la mejilla reiteradas veces y me sonrió.
-Gracias por tus halagos de siempre-elevé mis cejas y le di una palmadita en el hombro- ya tengo que prepararme
Asintió con la cabeza y me alejé para caminar por el pasillo hasta mi camerino, mis amigos y parte de mi equipo me arreglaron con todo, para darme ese look de estrella del pop que tanto amaba y creí haber perdido.
Recibí un llamado a unos minutos de empezar el espectáculo, eran mis amigas, Candela, María y Eugenia, eso me dejó desconcertada.
-¡Hola bomba!-Eugenia elevó sus cejas- ¡rompete una pierna!
-¡¿Qué?!-no entendí nada.
-¡Buena suerte tarada!-Candela se rió- buena suerte La
-¡Buena suerte Lala del amor!-María también sonrió.
Me emocionó verlas a las tres unidas llamándome, se me escaparon unas lágrimas.
-¡Soy una tarada!-me reí- gracias chicas, es una sorpresa hermosa esta llamada, ¡ya casi vuelvo! Por un tiempito y después voy a estar girando por mi amada Argentina
-¡Quiero ir a uno de esos shows!-Eugenia me sonrió, desde hace un tiempo ella también me mandaba mensajes, nunca me contó acerca de como estaba Peter, tal vez para que yo no me sintiera mal, pero estaba preocupada por mi, era un amor!
-¡Te tomo la palabra!-asentí con la cabeza y la sonrisa se me ensanchó- ¡ya nos vemos! ¡Falta nada! Tengo que irme-les avisé porque escuché que me tocaban la puerta y me llamaban.
-¡Te amo La!-Candela me saludó.
-¡Rompela!-Eugenia elevó sus cejas.
-¡Arrasá con todo!-María también me llenó de buena vibra.
Dejé de verlas en la pantalla de mi teléfono celular y salí de mi camerino, la banda empezó a sonar, cerré mis ojo, tomé aire y solté un suspiro, después los abrí nuevamente, y salí, salí a escena, llevé el micrófono a mi cara, mis bailarines me rodearon, y bailé, bailé, canté, salte, hablé con mi público.
Me emocioné muchísimo, me habían hecho miles de carteles amorosos, algunos algo subidos de tono, pero me hicieron reír.
-Y ahora llegó el momento de un homenaje que me sale hacer para dos personas muy importantes en mi vida...-hice una pausa porque la voz se me quebró- a una la conocí, me escuchó antes que nadie, me crió... y a la otra..-se me cayeron lágrimas por la mejilla- no la conocí, no la pude escuchar y tampoco la pude criar... La vida muchas veces es dura, y duele... Duele perder cosas importantes, pero no hay que vivir de duelo, hay que honrar a cada minuto, cada segundo, porque sé que a estas dos personas no les gustaría que siga llorándolas, y si caen lágrimas que sean de emoción, porque en algún momento pasaron por mi corta vida y algo me enseñaron... Yo... No estoy sola, como dice una de mis canciones, estoy acompañada por todos ustedes, por el arte que amo, el bailar, cantar y montar espectáculos, por el amor de mi equipo, colegas, amigos.. y por el amor de una persona muy especial-miré al costado del escenario y lo vi-la persona que me dio espacio, y tiempo, ¡y sé lo valioso que es el tiempo para él!-me lanzó un beso- Peter... Peter Lanzani... Quién me hizo volver a creer en el amor.. Peter-lo llamé y le hice señas para que se acerque, todo tímido lo hizo- antes de esta canción... Quiero...-mi corazón estaba latiendo muy rápido-saqué del bolsillo de mi shorts un anillo, uno que tenía una sola ala de ángel-vos sos una partecita mía y..-me reí nerviosa-¿queres casarte conmigo?
Se hizo un silencio y todos estaban expectantes, tenía miedo, mucho miedo, recién le había pedido ser novios, y me juré a mi misma no ser tan intensa, pero mi sueño fue como una "revelación", nos soñé a nosotros juntos, un día cualquiera mirando una película y había un bebé en un lugar al lado nuestro, no supe que era, solo supe que al despertarme sentí que ese era mi destino, estar con Peter y enfrentar todo juntos.
Peter soltó una carcajada y asintió con la cabeza también emocionado, suspiré aliviada.
-¡Sí Alas!-asintió varias veces y sostuvo mi cara entre sus manos, me besó en los labios y lo abracé por el cuello completamente feliz, no quería soltarlo, pero tenía que hacerlo, mi concierto no había terminado.
Chocó su frente con la mía y nos sonreímos como dos idiotas.
-Acá tu anillo..-me mordí los labios concentrada y se lo puse en el dedo- tenía miedo de que no te entrara
-¿Y el mío?-elevó sus cejas.
Marina le acercó el mío y lo miró.
-Una ala...-estaba sorprendido, lo deslizó por mi dedo y me lo besó- Alas-me llamó como siempre y le robé un último beso y me aparté para seguir.
Todos mis fans, todo mi equipo, y hasta los guardias de seguridad lo celebraron, a lo lejos vi a Peter mostrándome a mis amigas, traté de dejar de llorar.
-¡Uy que intenso todo!-me reí- ¡gracias por todo el amor! GRACIAS, ¡ahora si! Mi canción emocional y después mi otra canción emocional
Y comencé, primero la canción para mi mamá y mi bebé, el que no pude conocer, y después No estoy sola, recién ahora lo comprendo, nunca estuve sola.
Los papeles volaron de un lado a otro, todos corearon mi nombre, me aplaudieron, la banda tocó por última vez y saludé con mis manos, agradecí otras miles de veces.
Al bajar del escenario me quebré, pero de la emoción, lo que había pasado había sido mágico, intenso, esperanzador, tuve un shock de felicidad que me erizó la piel, con Peter nos abrazamos fuertemente, nos besamos y el tiempo se detuvo, solo éramos nosotros adentrándonos otra vez en nuestra propia burbuja.
Me cambié y fui con todo mi equipo a celebrar, Peter me tomó de la mano y así nos sentamos en la mesa, juntos, sin soltarnos.
-¿Sabes? Yo pensé en lo mismo el otro día-elevó sus cejas- cuando me pediste que sea tu novio... ¡Directamente quería pedirte que te casaras conmigo!
Nos reímos.
-¡Te sorprendí eh! Por primera vez en mi vida hice una locura y actué de manera impulsiva-también elevé mis cejas.
-Gracias por haber seguido tu impulso prometida-me besó una mejilla y mis ojos se achinaron mientras le sonreía.
-No... Gracias a vos-quise dejárselo en claro.
-¡¿Donde están los que van a casarse?!-apareció el amigo de Peter el Chino-me atrasé porque no pude comprar un vuelo directo, pero llegué para festejar, ¡¿no?!
Nos miró alegre y ambos asentimos,
El Chino abrazó a Peter, me abrazó a mi y otra vez pude suspirar más aliviada, tal vez, finalmente mi suerte estaba cambiando para bien.

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