⚠️🔞Deseos Ocultos - Nostalgia 🔞⚠️👭 (Libro I)

Capitulo I 🔞

Sus palabras recorrieron lentamente cada rincón de mis oprimidos deseos, esos que yacían en el subconsciente de la niña que fui, esa niña curiosa y sin prejuicios que termino opacada por las responsabilidades y el éxito, esa niña exiliada a lo más oscuro de mis recuerdos, tapada en años de olvidos, trabajo y metas por cumplir, quizá siempre ese fue el problema, como inconscientemente ahogue con mis manos bañadas en "mi futuro" a la niña juguetona, audaz y sensual que alguna vez fui. Ahora estoy aquí, sentada en el aeropuerto de Italia a punto de embarcarme de vuelta a mi país con más preguntas que respuestas, pero con una certeza que me llena de temores, debo volver a verla, debo verla a ella a la propulsora de mis pensamientos más sórdidos, esos que apenas me permito aceptar vivan en mí, esos que justo ahora estremecen mi cuerpo. Aquí sentada en esta terminal pulcra y tan organizada, me veo a mi misma como esta terminal, con apariencia de control y orden, mientras por dentro, cientos de trabajadores corren en un caos invisible para los usuarios con tal de cumplir con las exigencias de los pasajeros que, por supuesto, buscan el orden y el decoro para sentirse seguros y cumplir con sus itinerarios. Así soy yo, el orden y la pulcritud irradian de cada centímetro de mí, por años olvide a la joven salvaje que fui alguna vez, la fiestera incansable, llena de fantasías y deseos de conquista, besadora profesional y experta en el arte de olvidar nombres pero no caricias, no, esas se recordaban con placer los días sub siguientes a los encuentros fogosos y misteriosos que se daban en la pista de baile cuando la luz estereoscópica apenas iluminaba el rostro de la siguiente víctima, mientras movieran sus caderas y me sonrieran un par de veces, serían presas de mis encantos y caerían en una danza de besos, caricias y quizá algo más al cerrar el bar e irnos por pies quién sabe a qué lugar. De eso ya ha pasado mucho tiempo, esa joven alocada tiene un espacio en el cementerio de los recuerdos vergonzosos, de esos que no hablo, como podría hacerlo si tome un camino tan distinto al cumplir los 23 años, cuando todo aquello cambio, cuando decidí madurar y dejar las fiestas renegadas al olvido.

A los 19 me convertí en una estudiante de tiempo completo de medicina, con el paso del tiempo y el arduo estudio terminé enfocándome en el estudio en innovaciones tecnológicas y aparatos pensados para mejorar la calidad de vida de los niños que padecen sarcoma del tejido blando, así avoque mis esfuerzos en conseguir una beca completa de estudios para perfeccionarme en el extranjero y a los 30 años ya tenía mi departamento, varias publicaciones en revistas especializadas, un contrato con una compañía para fabricar un prototipo y una beca para ir por 3 años a Europa a perfeccionarme en los más grandes avances de la ciencia ¿Quién tendría tiempo para ir a perderlo en una pista de baile para besuquearse con una completa desconocida? En vez de eso conocí a Javiera, en un evento de avances tecnológicos, ella apareció en un grupo donde expondríamos. La conversación fue fluida entre ambas y note rápidamente su inclinación por las mujeres, o al menos comencé a sospecharla. Intercambiamos números para "no perder el contacto" y quizá organizar algún encuentro protocolar relacionado al trabajo, fui realmente feliz cuando comencé a ver segundas intenciones en sus mensajes que llegaban sagradamente cada fin de semana, por lo que su propuesta de vernos un día y tomarnos una copa en un bar de moda me pareció excelente. Javiera es una mujer culta, muy involucrada con los grandes cambios culturales que necesita la humanidad para mejorar la calidad de vida de las personas salvando el planeta, es de esas personas que se interesa tanto por el resto que te provoca una inmensa ternura, la que es solo opacada por la admiración a su inteligencia, es perspicaz, lectora voraz de documentos sobre el cambio climático y especialista en reciclaje y ahorro energético. Cada conversación con ella se volvía una diatriba en contra de esta sociedad egoísta y narcisista que no piensa en nada más que en sus deseos sin considerar las nefastas consecuencias que aquello podría traer al planeta.

Fueron 3 nuestras citas antes de que, en un descuido, me pasara de copas y me atreviera a besarla justo fuera del umbral de la puerta de mi edificio, Javiera contesto el beso con pasión que hasta entonces solo había percibido en sus discursos y luego de aquello comenzó nuestra historia de amor, tenía 28 años en ese primer beso. Dos años después continuábamos juntas, habían pasado apenas 3 meses de habernos mudado cuando conseguí la beca para ir a Europa en un tour por varios países estudiando con los mejores académicos para al fin poder crear el prototipo de mi invento. Para ella fue claro que ese viaje lo haríamos juntas y que no tenía problema alguno en dejarlo todo para ir conmigo por mi sueño que poco a poco se fue transformando en suyo también, eso me hizo muy feliz, ver como ella hablaba de mí en las cenas con amigos, en como mi proyecto iba a cambiar vidas, que irnos a Europa sería el cambio radical que nuestras vidas necesitaban, sobre todo ella que estaba tan agotada de este país tan pequeño y retrasado en tantos temas medio ambientales. Siempre comentaba de sus pasantías en Francia y cuando fue asesora de un político que debía exponer sobre la implementación de del acuerdo de parís en Chile por lo que tuvo la oportunidad de asistir a una de las conferencias sobre cambio climático, siendo eso el máximo hito en su vida adulta, ahora con la posibilidad de volver a Europa tomaría sus años de trabajo y los aplicaría para hacer cambios reales y profundos. Así fue como termine establecida en Francia aun cuando debía recorrer varios países, no siendo parís el lugar más estratégico para mis viajes pero era lo correcto para que Javiera también pudiera continuar con sus sueños.