⚠️🔞Deseos Ocultos - Nostalgia 🔞⚠️👭 (Libro I)

Capítulo XXVII - Segunda parte

Victoria volvió con los platos en las manos, sobre ellos un atún dorado por ambos lados con una salsa agridulce y algunas verduras salteadas - si es muy poco también tengo unas papas fritas en la freidora de aire - me dice mientras pone el plato frente a mí. Sobre la mesa hay un gran plato con ensaladas frescas, todo se ve delicioso y muero de ganas por probarlo.

- Emma: Me gusta tu casa, es acogedora, como su dueña - le digo coqueta mientras casi termino mi plato, ya casi no resisto mis ganas de mostrarle lo que escondo sobre mis piernas y bajo la mesa.

- Victoria: Me alegro que estés cómoda y con gusto puedo ser más acogedora pero primero me gustaría conversar contigo.

- Emma: ¿Por qué? ¿pasa algo? - pregunto ansiosa.

- Victoria: No es que pase algo nuevo, solo quiero hablar de nosotras - noto un pequeño rubor en el rostro de Victoria, eso es nuevo, creo que me gusta - pero primero dime que tal te fue con tus padres.

Le resumo la historia lo más que puedo pero Victoria insiste con preguntarme como me sentía o que pensaba mientras le narro cada situación, a veces olvido que su mente es más perceptiva que la mía hacía estas situaciones emocionales. Durante el tiempo que dura la conversación me mira intrigada, como si estuviera haciendo un perfil psicológico de mis comportamientos y no hay cantidad de vino disponible en esta casa que me mantenga cómoda con esto.

- Emma: Bueno eso, no quiero seguir hablando del tema ¿sabes? Siento que deje atrás esa etapa de mi vida cuando me fui de Chile y solo había algo pendiente y siento que ya he puesto punto final al asunto - le digo tratando de cerrar el tema y darlo por superado.

- Victoria: Claro lo entiendo, pero en mi experiencia el dolor guardado por años deja secuelas invisibles en nosotros, como miedo al compromiso o incluso problemas de confianza, ya sean con una misma o con otros, entonces pensando eso creo que...

No pienso seguir escuchando como me psicoanaliza o lo que sea que está haciendo, no sé si es el mejor momento pero solo puedo callarla con una cosa, tomo la caja que está sobre mis piernas y la pongo sobre la mesa en un movimiento rápido y repentino. Victoria se queda súbitamente en silencio observando la misteriosa caja.

- Victoria: ¿y eso? - mira la caja sin tocarla, ella siempre respetuosa de todos mis espacios, bueno eso hasta ahora con mi salud mental porque parece que ese lugar le parece divertido.

- Emma: Victoria mía - comienzo diciendo con el valor que el vino me ha dado - agradezco tu preocupación y contención durante mi pequeña crisis pero no he venido para hablar de eso - pongo mis dedos sobre la caja y la acerco a ella - quiero entregarte algo - siento como el rubor sube por mis mejillas - espero que entiendas...

Victoria toma la caja con cautela, la observa con detenimiento, es negra y tiene escrito sobre ella mi nombre con lápiz color plateado que me he comprado al salir del sexshop, ella lo abre y ve en su interior el collar, su cara es de sorpresa pero no de incomodidad, creo incluso ver el comienzo de una sonrisa pero la detiene a medio camino.

- Emma: ¿no te gusta? - le pregunto con voz casi de niña - es para mí ¿entiendes verdad?

- Victoria: Mi pequeña Emma, me encanta lo que hay en esta caja pero ¿sabes lo que significa que me entregues algo así? - me pregunta muy seria.

- Emma: Pues que - me sonrojo al instante no puedo evitarlo - que quiero jugar, bueno, que juguemos, creo se entiende a que - contesto un poco cabreada.

- Victoria: Pequeña esto es más que solo un juego, es una entrega, en otros terrenos esto sería una invitación a que sea tu dueña, tu ama y tu mi mascota o incluso mi esclava dispuesta a satisfacer cada uno de mis retorcidos o perversos placeres - me contesta con un tono severo, como si me estuviera regañando o enseñando algo, cosa que de verdad me molesta.